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Colapso económico. ¿Es peor el remedio que la enfermedad?

Luis Gonzalez
29 de marzo, 2020

La actividad económica del país está paralizada en gran parte. Ello responde al plan gubernamental para evitar la propagación del coronavirus. Muchas empresas y personas particulares llevan casi 15 días sin recibir ingresos y están por cerrar o declararse insolventes.

En medio de este panorama gris, el presidente Alejandro Giammattei ratificó la prolongación de medidas que mantienen paralizado al país, acciones que hasta ahora han dado resultado en el tema de salud, pero la crisis económica también empieza a cobrar víctimas.

De ahí surge la interrogante, ¿es peor el remedio que la enfermedad? Es decir, puede el país seguir paralizado mientras miles se quedan sin trabajo y la economía entra en un letargo.

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Representantes de diversos sectores empresariales apoyan las decisiones del Gobierno, pero también esperan acciones económicas inmediatas para garantizar los ingresos de las empresas y el empleo de los guatemaltecos.

Miles de empleos en riesgo

Aunque todos sectores son golpeados por la crisis, hay algunos que ven un riesgo inmediato. Por ejemplo, en el sector turismo 600 mil personas se quedaron sin recibir ingresos porque esta actividad se paralizó a partir de mediados de marzo.

Otro gremio afectado y que cada día que pasa teme cierre de empresas, es el de restaurantes. Un aproximado de 58 mil personas dependen de manera directa y aunque algunos operan, gran parte de estos negocios están cerrados.

También sobre el sector de la construcción hay un efecto inmediato por la paralización de obras. No obstante que los proyectos son de largo plazo, muchos trabajadores directos e indirectos se quedaron sin recibir ingresos.

Se estima que unas 300 mil personas dependen de manera directa, como albañiles, plomeros, electricistas, carpinteros, ingenieros y diseñadores, entre otros.

Pero también están los trabajos indirectos que no están generando ingresos. Esta cifra de afectados es mayor a los 300 mil. Se estima que por cada 40 trabajos directos se generan 59 indirectos, según la Cámara Guatemalteca de la Construcción.

Otros sectores están paralizados no por decisiones locales, pero sí por la pandemia del coronavirus. Los exportadores de flores se quedaron sin pedidos. Acá son 15 mil empleos directos en riesgo sino se reactiva la economía global.

Todos estos sectores productivos demandan apoyo del gobierno para sostener los miles de empleos y no cerrar las empresas.

“No queremos nada gratis”, dice Andreas Kuestermann, presidente de la Comisión de Turismo Sostenible de Agexport, pero piden acciones “específicas” y prontas.

En lo posible y cumpliendo todas las normas sanitarias, se espera que algunas empresas puedan volver de manera paulatina a generar ingresos por no agravar la crisis económica que podría ser peor de lo esperado, opinan los entrevistados.

Antigua Guatemala depende de un 80 por ciento del turista extranjero.

Turismo, el más golpeado

La pandemia del coronavirus Covid-19 golpeó al turismo en su mejor época.

Se esperaban 144 mil turistas extranjeros que dejarían en el país unos US$50 millones y el desplazamiento de 3.5 millones de turistas internos que aportarían Q400 millones al sector, según el Inguat.

Pero todas las reservaciones para Semana Santa se cancelaron y las empresas todavía se esfuerzan por retener a los turistas para que aplacen sus visitas. Sin embargo, Kuestermann considera que tomará todo el año para recuperar, primero el turismo local y luego el externo.

El empresario señala que no hay duda que el turismo es el más golpeado y así lo reconocen las autoridades, pero por el momento no ven “ningún alivio y no tienen perspectiva” de algún apoyo específico.

El Inguat, la institución que rige el sector, no se ha pronunciado acerca de algún apoyo directo y aunque han manifestado su preocupación al Organismo Ejecutivo y Legislativo, no han recibido respuesta, afirma Kuestermann.

Por ello los hoteleros, tour operadores, agencias de viajes, líneas aéreas, guías de turismo, artesanos, pequeños restaurantes y varias comunidades, están preocupados.

La ciudad de Antigua Guatemala, por ejemplo, depende de un 80 por ciento del turismo y ahora está sin visitantes.

El sector turístico ha pedido a las autoridades apoyo para sostener los empleos porque se quedaron sin ingresos. Necesitan dinero (liquidez) para cumplir con sus obligaciones inmediatas con los empleados y bancos, y algunos apoyos en exoneraciones y para diferir el pago de impuestos.

No queremos nada gratis, pero necesitamos el apoyo del gobierno y también de la misma iniciativa privada y de las personas para reactivar el sector”, enfatiza Kuestermann.

“Estamos claro que la labor y prioridad del Gobierno es la salud de los guatemaltecos y las decisiones son para mitigar el contagio, y las apoyamos sin duda alguna”, añade.

Pero de continuar paralizada la actividad económica, el efecto será “devastador“, indica el entrevistado.

Muchas empresas de turismo dependen del “día a día” y si la paralización no va acompañada de ayuda inmediata, el daño será sin precedentes, subraya Kuestermann.

“Nadie puede soportar 30 días sin ingresos, sin ningún apoyo específico”, concluye el representante del sector turístico.

Muchos restaurantes no reciben ingresos desde el 17 de marzo.

Preocupa el país, dice Gremial de Restaurantes

Carlos Mansilla, de la Gremial de Restaurantes de Guatemala (Gregua), señala que muchos empresarios ya no están preocupados por su empresa sino por Guatemala.

Por ahora se desconoce el impacto que tendrá el coronavirus en la economía local, pero en otras naciones se observan hechos preocupantes como quiebras y despidos masivos.

Indica que como sector privado respaldan al Gobierno en las decisiones que adopte.

“Es una línea muy fina permitir alguna operatividad empresarial, previniendo más contagios del virus para que no reviente el sistema de Salud, para evitar las situaciones críticas que hemos visto en otros países”, señala Mansilla

El entrevistado comenta que los restaurantes que siguen operando lo hacen cumpliendo todas las normas de Salud y han sido certificados.

Para algunos de estos negocios que siguen operando, aún con restricciones, ha sido “una bendición”, “pero quien piense que no perderá en esta crisis está equivocado”, resalta el empresario.

Los restaurantes que solo servían en sus negocios, han recurrido de inmediato a atender a domicilio y a otorgar descuentos. También se busca renegociar rentas, créditos y establecer nuevas condiciones con proveedores para sobrevivir, añade el entrevistado.

En estos momentos de crisis lo que debe prevalecer es la solidaridad entre todos para preservar la salud y las empresas, agrega.

“Es una situación difícil, se requerirá de habilidad porque aunque todos perdamos, la mayoría de empresas debe sobrevivir para reactivar la economía”, subraya Mansilla.

Como empresarios debemos ser creativos y esperar que todos los sectores se vayan activando de manera que la vida continúe priorizando la salud, sostenibilidad y el abastecimiento en general.

Los pedidos de flores de exportación fueron cancelados.

Sin exportar flores y sin ingresos

Guatemala exporta flores a Europa y Estados Unidos, son sus grandes mercados, pero los pedidos fueron cancelados.

La pandemia del coronavirus Covid-19 golpeó también a este sector que de la noche a la mañana se quedó sin ingresos.

Después del 14 de febrero se empezó a sentir la presión hacia la baja. Primero fue Europa en cancelar pedidos y luego Estados Unidos, indica Byron Calderón, del Comité de Flores de la Asociación de Exportadores de Guatemala.

Europa es el destino del 20 por ciento de la producción y Estados Unidos el 70 por ciento.

“Ya nadie compró y estamos preocupados”, señala Calderón. De esta actividad que incluye plantas ornamentales, flores y follajes, dependen 15 mil familias.

Los productores siguen trabajando para mantener vivas sus plantas, pero llegará el momento de cortar el producto y sin compradores, la opción es regalar o botar las flores.

Las economías golpeadas con comunidades de Sacatepéquez, Chimaltenango, Alta Verapaz y algunas parte de la Costa Sur.

Por ahora estas empresa subsisten con ingresos propios generados de la época de diciembre y de febrero,

“La verdad es que no podemos seguir operando por mucho tiempo, no me atrevo a dar un plazo, todo depende de cada empresa”, agrega Calderón.

“Este es un negocio de centavos, el margen es pequeño, el negocio está en el volumen, pero sin ingresos algunos podrían subsistir unos 30 días y hasta cuatro meses para que todas las empresas cierren”, añade el entrevistado.

Pero hay una pequeña luz, comenta Calderón, China está saliendo del ciclo, debería seguir Europa y luego “nosotros esperamos sea una recuperación más rápida y que de nuevo se abran los mercados”.

Calderón considera que estas circunstancias toda iniciativa ayuda. Lo que le urge a las empresas es “flujo de caja”.

Por su lado iniciarán una campaña de sensibilización llamando a los guatemaltecos a regalar flores, a levantar el ánimo en medio de las circunstancias adversas.

“Estamos haciendo un esfuerzo por mantener el trabajo. No queremos llegar a despidos porque eso es una cadena negativa debido a que si las familias no tienen ingresos, todos salimos perjudicados. Todos estamos haciendo un esfuerzo para salir adelante”, concluye Calderón.

Las obras de construcción se paralizaron.

La paralización afecta a todos

En el sector de la construcción las obras están paralizadas y se retrasó la entrega de algunos proyectos.

Quienes trabajan en labores complementarias también son afectados porque no tiene ingresos, además todo el comercio formal e informal alrededor de las obras también es perjudicado.

“La paralización hasta el 12 de abril es un reto complicado, afectará a muchos por cierres de empresas y despidos. Creo que el Gobierno debe pensarlo en prioridad de la salud sin dejar ver la parte económica”, comenta Daniel Morales, director de la empresa Comercial Sur Desarrollos.

El entrevistado considera que se podrían dar aperturas en medio de la cuarentena con estrictas regulaciones para que las empresas sigan operando.

“Todos podríamos salir, pero con ciertos procedimientos y protocolos, excepto las personas de la tercera edad y otras que se han mencionado”, considera.

Por ahora, aunque se cuenta con autorización del Ministerio de Economía para operar, las obras quedaron paralizadas para proteger la salud de los trabajadores, explica Morales.

También se retrasó la entrega de algunos proyectos y aunque existe temor acerca de qué sucederá, las empresas se esfuerzan por transmitir seguridad a los compradores.

En su empresa, indica el entrevistado, los ingresos no se quedaron a cero porque la mayor parte de su mercadeo está en las redes sociales.

En este caso les ayuda que las personas no deben pagar de inmediato la oficina o el apartamento que reciben y también el apoyo de los bancos que son los que financian la operación.

Este año las ventas y el sector de la construcción esperaba un nuevo periodo de crecimiento. Seguro no se logrará lo previsto, pero Morales considera que la economía de Guatemala no será golpeada como la de otras naciones.

Lo que corresponde ahora, dice el entrevistado, es ser creativos y recurrir a todas las opciones para mantener a flote a las empresas porque el cierre afecta más al país.

“Hay que mantenerse ocupado y ser positivos porque se deben generar ingresos”, enfatiza el entrevistado.

“Algunas empresas ya han tomado decisiones. Han bajado costos hasta donde pueden, para pasar esta crisis por el bien de los que se quedan en las compañías”, expresa.

Añade que el “toque de queda” no debe significar dejar de trabajar porque mucho se puede hacer por medio digitales.

“Pensemos en seguir adelante y ser creativos. Si se pierden los ingresos hay que buscar nuevas formas de generarlos, porque toca reinventarnos. Esto que nos pasa pudo ocurrir en cualquier momento”, concluye Morales.

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En medio de este panorama gris, el presidente Alejandro Giammattei ratificó la prolongación de medidas que mantienen paralizado al país, acciones que hasta ahora han dado resultado en el tema de salud, pero la crisis económica también empieza a cobrar víctimas.

De ahí surge la interrogante, ¿es peor el remedio que la enfermedad? Es decir, puede el país seguir paralizado mientras miles se quedan sin trabajo y la economía entra en un letargo.

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Representantes de diversos sectores empresariales apoyan las decisiones del Gobierno, pero también esperan acciones económicas inmediatas para garantizar los ingresos de las empresas y el empleo de los guatemaltecos.

Miles de empleos en riesgo

Aunque todos sectores son golpeados por la crisis, hay algunos que ven un riesgo inmediato. Por ejemplo, en el sector turismo 600 mil personas se quedaron sin recibir ingresos porque esta actividad se paralizó a partir de mediados de marzo.

Otro gremio afectado y que cada día que pasa teme cierre de empresas, es el de restaurantes. Un aproximado de 58 mil personas dependen de manera directa y aunque algunos operan, gran parte de estos negocios están cerrados.

También sobre el sector de la construcción hay un efecto inmediato por la paralización de obras. No obstante que los proyectos son de largo plazo, muchos trabajadores directos e indirectos se quedaron sin recibir ingresos.

Se estima que unas 300 mil personas dependen de manera directa, como albañiles, plomeros, electricistas, carpinteros, ingenieros y diseñadores, entre otros.

Pero también están los trabajos indirectos que no están generando ingresos. Esta cifra de afectados es mayor a los 300 mil. Se estima que por cada 40 trabajos directos se generan 59 indirectos, según la Cámara Guatemalteca de la Construcción.

Otros sectores están paralizados no por decisiones locales, pero sí por la pandemia del coronavirus. Los exportadores de flores se quedaron sin pedidos. Acá son 15 mil empleos directos en riesgo sino se reactiva la economía global.

Todos estos sectores productivos demandan apoyo del gobierno para sostener los miles de empleos y no cerrar las empresas.

“No queremos nada gratis”, dice Andreas Kuestermann, presidente de la Comisión de Turismo Sostenible de Agexport, pero piden acciones “específicas” y prontas.

En lo posible y cumpliendo todas las normas sanitarias, se espera que algunas empresas puedan volver de manera paulatina a generar ingresos por no agravar la crisis económica que podría ser peor de lo esperado, opinan los entrevistados.

Antigua Guatemala depende de un 80 por ciento del turista extranjero.

Turismo, el más golpeado

La pandemia del coronavirus Covid-19 golpeó al turismo en su mejor época.

Se esperaban 144 mil turistas extranjeros que dejarían en el país unos US$50 millones y el desplazamiento de 3.5 millones de turistas internos que aportarían Q400 millones al sector, según el Inguat.

Pero todas las reservaciones para Semana Santa se cancelaron y las empresas todavía se esfuerzan por retener a los turistas para que aplacen sus visitas. Sin embargo, Kuestermann considera que tomará todo el año para recuperar, primero el turismo local y luego el externo.

El empresario señala que no hay duda que el turismo es el más golpeado y así lo reconocen las autoridades, pero por el momento no ven “ningún alivio y no tienen perspectiva” de algún apoyo específico.

El Inguat, la institución que rige el sector, no se ha pronunciado acerca de algún apoyo directo y aunque han manifestado su preocupación al Organismo Ejecutivo y Legislativo, no han recibido respuesta, afirma Kuestermann.

Por ello los hoteleros, tour operadores, agencias de viajes, líneas aéreas, guías de turismo, artesanos, pequeños restaurantes y varias comunidades, están preocupados.

La ciudad de Antigua Guatemala, por ejemplo, depende de un 80 por ciento del turismo y ahora está sin visitantes.

El sector turístico ha pedido a las autoridades apoyo para sostener los empleos porque se quedaron sin ingresos. Necesitan dinero (liquidez) para cumplir con sus obligaciones inmediatas con los empleados y bancos, y algunos apoyos en exoneraciones y para diferir el pago de impuestos.

No queremos nada gratis, pero necesitamos el apoyo del gobierno y también de la misma iniciativa privada y de las personas para reactivar el sector”, enfatiza Kuestermann.

“Estamos claro que la labor y prioridad del Gobierno es la salud de los guatemaltecos y las decisiones son para mitigar el contagio, y las apoyamos sin duda alguna”, añade.

Pero de continuar paralizada la actividad económica, el efecto será “devastador“, indica el entrevistado.

Muchas empresas de turismo dependen del “día a día” y si la paralización no va acompañada de ayuda inmediata, el daño será sin precedentes, subraya Kuestermann.

“Nadie puede soportar 30 días sin ingresos, sin ningún apoyo específico”, concluye el representante del sector turístico.

Muchos restaurantes no reciben ingresos desde el 17 de marzo.

Preocupa el país, dice Gremial de Restaurantes

Carlos Mansilla, de la Gremial de Restaurantes de Guatemala (Gregua), señala que muchos empresarios ya no están preocupados por su empresa sino por Guatemala.

Por ahora se desconoce el impacto que tendrá el coronavirus en la economía local, pero en otras naciones se observan hechos preocupantes como quiebras y despidos masivos.

Indica que como sector privado respaldan al Gobierno en las decisiones que adopte.

“Es una línea muy fina permitir alguna operatividad empresarial, previniendo más contagios del virus para que no reviente el sistema de Salud, para evitar las situaciones críticas que hemos visto en otros países”, señala Mansilla

El entrevistado comenta que los restaurantes que siguen operando lo hacen cumpliendo todas las normas de Salud y han sido certificados.

Para algunos de estos negocios que siguen operando, aún con restricciones, ha sido “una bendición”, “pero quien piense que no perderá en esta crisis está equivocado”, resalta el empresario.

Los restaurantes que solo servían en sus negocios, han recurrido de inmediato a atender a domicilio y a otorgar descuentos. También se busca renegociar rentas, créditos y establecer nuevas condiciones con proveedores para sobrevivir, añade el entrevistado.

En estos momentos de crisis lo que debe prevalecer es la solidaridad entre todos para preservar la salud y las empresas, agrega.

“Es una situación difícil, se requerirá de habilidad porque aunque todos perdamos, la mayoría de empresas debe sobrevivir para reactivar la economía”, subraya Mansilla.

Como empresarios debemos ser creativos y esperar que todos los sectores se vayan activando de manera que la vida continúe priorizando la salud, sostenibilidad y el abastecimiento en general.

Los pedidos de flores de exportación fueron cancelados.

Sin exportar flores y sin ingresos

Guatemala exporta flores a Europa y Estados Unidos, son sus grandes mercados, pero los pedidos fueron cancelados.

La pandemia del coronavirus Covid-19 golpeó también a este sector que de la noche a la mañana se quedó sin ingresos.

Después del 14 de febrero se empezó a sentir la presión hacia la baja. Primero fue Europa en cancelar pedidos y luego Estados Unidos, indica Byron Calderón, del Comité de Flores de la Asociación de Exportadores de Guatemala.

Europa es el destino del 20 por ciento de la producción y Estados Unidos el 70 por ciento.

“Ya nadie compró y estamos preocupados”, señala Calderón. De esta actividad que incluye plantas ornamentales, flores y follajes, dependen 15 mil familias.

Los productores siguen trabajando para mantener vivas sus plantas, pero llegará el momento de cortar el producto y sin compradores, la opción es regalar o botar las flores.

Las economías golpeadas con comunidades de Sacatepéquez, Chimaltenango, Alta Verapaz y algunas parte de la Costa Sur.

Por ahora estas empresa subsisten con ingresos propios generados de la época de diciembre y de febrero,

“La verdad es que no podemos seguir operando por mucho tiempo, no me atrevo a dar un plazo, todo depende de cada empresa”, agrega Calderón.

“Este es un negocio de centavos, el margen es pequeño, el negocio está en el volumen, pero sin ingresos algunos podrían subsistir unos 30 días y hasta cuatro meses para que todas las empresas cierren”, añade el entrevistado.

Pero hay una pequeña luz, comenta Calderón, China está saliendo del ciclo, debería seguir Europa y luego “nosotros esperamos sea una recuperación más rápida y que de nuevo se abran los mercados”.

Calderón considera que estas circunstancias toda iniciativa ayuda. Lo que le urge a las empresas es “flujo de caja”.

Por su lado iniciarán una campaña de sensibilización llamando a los guatemaltecos a regalar flores, a levantar el ánimo en medio de las circunstancias adversas.

“Estamos haciendo un esfuerzo por mantener el trabajo. No queremos llegar a despidos porque eso es una cadena negativa debido a que si las familias no tienen ingresos, todos salimos perjudicados. Todos estamos haciendo un esfuerzo para salir adelante”, concluye Calderón.

Las obras de construcción se paralizaron.

La paralización afecta a todos

En el sector de la construcción las obras están paralizadas y se retrasó la entrega de algunos proyectos.

Quienes trabajan en labores complementarias también son afectados porque no tiene ingresos, además todo el comercio formal e informal alrededor de las obras también es perjudicado.

“La paralización hasta el 12 de abril es un reto complicado, afectará a muchos por cierres de empresas y despidos. Creo que el Gobierno debe pensarlo en prioridad de la salud sin dejar ver la parte económica”, comenta Daniel Morales, director de la empresa Comercial Sur Desarrollos.

El entrevistado considera que se podrían dar aperturas en medio de la cuarentena con estrictas regulaciones para que las empresas sigan operando.

“Todos podríamos salir, pero con ciertos procedimientos y protocolos, excepto las personas de la tercera edad y otras que se han mencionado”, considera.

Por ahora, aunque se cuenta con autorización del Ministerio de Economía para operar, las obras quedaron paralizadas para proteger la salud de los trabajadores, explica Morales.

También se retrasó la entrega de algunos proyectos y aunque existe temor acerca de qué sucederá, las empresas se esfuerzan por transmitir seguridad a los compradores.

En su empresa, indica el entrevistado, los ingresos no se quedaron a cero porque la mayor parte de su mercadeo está en las redes sociales.

En este caso les ayuda que las personas no deben pagar de inmediato la oficina o el apartamento que reciben y también el apoyo de los bancos que son los que financian la operación.

Este año las ventas y el sector de la construcción esperaba un nuevo periodo de crecimiento. Seguro no se logrará lo previsto, pero Morales considera que la economía de Guatemala no será golpeada como la de otras naciones.

Lo que corresponde ahora, dice el entrevistado, es ser creativos y recurrir a todas las opciones para mantener a flote a las empresas porque el cierre afecta más al país.

“Hay que mantenerse ocupado y ser positivos porque se deben generar ingresos”, enfatiza el entrevistado.

“Algunas empresas ya han tomado decisiones. Han bajado costos hasta donde pueden, para pasar esta crisis por el bien de los que se quedan en las compañías”, expresa.

Añade que el “toque de queda” no debe significar dejar de trabajar porque mucho se puede hacer por medio digitales.

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