En Guatemala hay grandes posibilidades de riqueza para todos los habitantes, sabiendo aprovechar sus recursos, sobre todo los naturales, con los que cuenta este país en abundancia.  Lamentablemente, lo que algunos dicen es que “Guatemala es un país rico con gente pobre”, es una frase que se escucha en boca de políticos buscando el voto, o de activistas queriendo aparentar estar del lado de los trabajadores.  En realidad, lo que debiesen decir es que.  Para aprovechar los recursos naturales usualmente se requiere de grandes inversiones que esos políticos y activistas populistas nunca proveen, pero si critican.  Son los enemigos de la prosperidad.

Esos enemigos de la prosperidad están siempre al acecho.  Buscan -y encuentran- toda ocasión que tienen para intentar arrebatarle a trabajadores y sus familias las oportunidades de empleo digno.  Ha pasado y seguirá pasando mientras lo permitamos y mientras haya fuente de lucro para ellos en detrimento de las fuentes de trabajo para cientos o miles de guatemaltecos que no quieren vivir de dádivas de cooperación internacional o migrar al norte, sino que quieren trabajo digno.    

Guatemala tiene recursos naturales que requieren ser explotados para generar trabajo y riqueza; la minería es -junto con la inventiva- probablemente la actividad humana que ha permitido el avance tecnológico que hoy vivimos.  La minería genera trabajos directos bien remunerados, algo que los guatemaltecos necesitamos, sobre todo si queremos frenar la migración hacia Estados Unidos en busca de mejores oportunidades.

En el departamento de Jutiapa, en el municipio de Asunción Mita, existe desde el 2006 una de esas oportunidades de empleo digno y bien remunerado en la denominada mina Cerro Blanco, proyecto minero que desde ese año ha hecho trabajos tendientes a extraer oro y plata, pero las condiciones geológicas -especialmente las hídricas- no han permitido la intervención como se planteó inicialmente.  Ahora, el titular del derecho minero ha pedido autorización para intervenir el polígono a cielo abierto y ya no por  medio de túneles.  Esto ha hecho que los enemigos de la prosperidad tengan otra chance para impedir que los guatemaltecos tengan fuentes de trabajo, particularmente en un área del país en donde no hay muchas.  

Para enfrentar esa oposición, aproximadamente 1,200 vecinos y residentes en las siete aldeas de los alrededores de la zona de influencia de la mina Cerro Blanco conformaron la Asociación Pro-Industria Minera Mita Avanza.  También la conforman ex trabajadores y  proveedores de la mina, de los cuales aproximadamente 300 se han quedado sin fuente de trabajo directo por la falta de certeza jurídica, afectando directamente a la economía familiar y del municipio.

Mita Avanza realiza trabajos de concientización, ad-honorem, promoviendo actividades enfocadas en el desarrollo del Municipio de Asunción Mita mediante proyectos que aporten fuentes de trabajo, mejoren la economía familiar, tecnificación y principalmente que les permitan no migrar hacia Estados Unidos en búsqueda de un mejor futuro para sus familias.

La opocisión, los enemigos de la prosperidad, entre los que están organizaciones cuasi religiosas, ambientalistas y feministas (¿?) como el denominado Concejo Parroquial de Asunción Mita, la Orden Franciscana Justicia y Paz por la Integridad de la Creación, el Colectivo Madre Selva, CRIPES, la Alianza Centroamericana Frente a la Minería (ACAFREMIN), la Mesa contra la Minería de El Salvador y Mujeres Ecofeministas de Metapán han logrado que la Municipalidad de Asunción Mita convoque a una “consulta municipal” para que se vote si se permite operar a la mina.  Esto lo han logrado al recolectar 4,262 firmas, las que no se ha permitido que sean auditadas para verificar que sean vecinos del lugar, requisito para que, en todo caso, sea válida dicha solicitud.  La municipalidad hará la referida consulta por sus propios medios, sin que medie participación o asesoría siquiera del Tribunal Supremo Electoral.

Como ha ocurrido varias ocasiones anteriormente, los opositores a la prosperidad engañan a los pobladores haciéndoles creer que la municipalidad tiene facultades para aprobar o no un proyecto minero, permitiendo su operación o denegándola.  Todas las veces que eso ha sucedido, invariablemente la Corte de Constitucionalidad ha resuelto que esas “consultas” están hechas de manera ilegal, pues ni los Concejos Municipales, y mucho menos los alcaldes, son quienes aprueban o no proyectos mineros, sino es el gobierno central a través de los ministerios de Energía y Minas y de Ambiente y Recursos Naturales. 

Así, los opositores a la prosperidad no solo engañan a la población, sino que les intentan arrebatar oportunidades de empleo digno que ellos, los opositores, jamás ofrecen.  La manipulación ha llegado a tal nivel que, según personeros de Mita Avanza, el sacerdote dela Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción, en su campaña para promover que se vote en contra de la mina en la “consulta” oró al final de una misa exclusivamente para quienes se oponen a la minería, aduciendo que quienes la apoyaban eran mentirosos.  

A pesar de la manifiesta ilegalidad, la municipalidad ha convocado para el 18 de septiembre la “consulta” que pretende aprobar o improbar un proyecto que ya cuenta con autorización estatal y solo tramita una modificación al plan original.

Ante ello, Mita Avanza planteó -acertadamente- un amparo ante el juzgado de primera instancia del departamento de Jutiapa, en contra de la aprobación del reglamento de dicha consulta, pues el Concejo lo hizo sin tener facultades para ello; por razones que se desconocen -pero se sospechan- el juez no dio trámite como indica la ley al mismo y los interesados recurrieron a la Corte de Constitucionalidad para hacer que el juez a quo resuelva conforme a derecho.  Quedando pocos días para ello, no hay resolución todavía.

Las oenegés antes mencionadas, y según personeros de Mita Avanza, los particulares Armando Teo, María del Carmen Cifuentes y Herbert Jiménez (este último es presidente del Cocode de la Aldea Tiucal y está en negociaciones con Codeca/MLP para postularse por ese movimiento como alcalde de Asunción Mita) están recibiendo financiamiento desde el extranjero para su activismo en contra de la posibilidad de fuentes de trabajo para los pobladores del municipio.  Ese financiamiento, según personeros de Mita Avanza, lo obtienen en El Salvador, a donde van a recogerlo en efectivo varias personas, para burlar el límite de dinero en efectivo (dólares) que una persona puede ingresar al país. 

La famosa autonomía municipal ha sido mal interpretada, manipulada y abusada muchas veces, desde la imposición de “tasas” cuando lo que realmente hacen es crear arbitrios, algo que es facultad exclusiva del Organismo Legislativo, hasta la celebración de consultas como la aludida, manifiestamente ilegal.

El cuidado al ambiente debe y la salud de las personas debe ser, por supuesto, elementos indispensables a incluir en toda actividad; los estándares que la operación de la mina debe mantener deben ser los más altos, sobre todo tratándose de entidades extranjeras que, si bien sujetas a la débil institucionalidad local, debe rendir cuentas a reguladores e inversionistas de primer mundo, quienes no le permitirán afectar ni el ambiente, ni la salud de los trabajadores o habitantes circundantes. 

Ya es tiempo de que manipuladores profesionales, los enemigos de la prosperidad, arrebaten oportunidades de empleo digno y bien remunerado a los guatemaltecos, por mantener ellos su modus vivendi.

Las autoridades del gobierno central deben ejercer su rectoría en estos temas y, si fuese el caso, perseguir judicialmente a personas que engañan a los pobladores y se conciertan con autoridades municipales para manipular a los vecinos.