Nadie puede negar que Brasil haya parido a los máximos exponentes del fútbol mundial, técnicamente hablando. Sus cinco títulos mundiales comprueban que ha logrado, hasta ahora, un balance perfecto entre cantidad y calidad. Pareciera que con cada generación siempre sale una figura a relucir y tomar la estafeta de quien en su momento fue considerado el mejor. Esto sucede, no sin los roces característicos de los egos de estos astros del deporte rey.
Uno de sus hijos pródigos, Romario, una vez respondió a las críticas que sobre él vertía quienes muchos consideran el mejor futbolista de todos los tiempos, Pelé, diciendo “Por una buena razón Dios bendijo las piernas de Pelé, porque cada vez que abre la boca solo mierda sale”. Más allá de las críticas certeras que Pelé hacía sobre Romario, la respuesta de este siempre dibuja una sonrisa en mi rostro.
No fue la respuesta usual de un futbolista, por eso era único también Romario. El futbolista promedio suele tener un discurso aprendido para responder a cada pregunta, modificando el mismo dependiendo del resultado. “Tocamos bien el balón y tuvimos oportunidades pero lamentablemente la pelota no entró y no pudimos darle una satisfacción a la afición, pero vamos a seguir trabajando para mejorar estos resultados” o podría ser “Tocamos bien el balón y tuvimos oportunidades que logramos concretar y así logramos darle una satisfacción a la afición y ahora toca seguir trabajando para mantener estos resultados”. ¡Excepcional oratoria!
En recientes días me sucede lo mismo al escuchar las declaraciones de OPM, Roxana Baldetti y en particular Gudy Rivera sobre el caso del [ultimo escándalo de política nacional sobre las elecciones de jueces. Acaso no tienen asesores los funcionarios que no deben litigar y justificarse ante los medios regurgitando estupidez tras estupidez y que encima los mantenemos con nuestros impuestos. Tan incapaces somos de poner hasta aquí y no permitir que este vulgar y ofensivo circo continúe. Pienso en lo que Romario le contestó a Pelé y me queda la duda sobre sobre qué fue lo que Dios le bendijo a estas personas, porque cada vez que abren la boca…
@robertoantoniow
Nadie puede negar que Brasil haya parido a los máximos exponentes del fútbol mundial, técnicamente hablando. Sus cinco títulos mundiales comprueban que ha logrado, hasta ahora, un balance perfecto entre cantidad y calidad. Pareciera que con cada generación siempre sale una figura a relucir y tomar la estafeta de quien en su momento fue considerado el mejor. Esto sucede, no sin los roces característicos de los egos de estos astros del deporte rey.
Uno de sus hijos pródigos, Romario, una vez respondió a las críticas que sobre él vertía quienes muchos consideran el mejor futbolista de todos los tiempos, Pelé, diciendo “Por una buena razón Dios bendijo las piernas de Pelé, porque cada vez que abre la boca solo mierda sale”. Más allá de las críticas certeras que Pelé hacía sobre Romario, la respuesta de este siempre dibuja una sonrisa en mi rostro.
No fue la respuesta usual de un futbolista, por eso era único también Romario. El futbolista promedio suele tener un discurso aprendido para responder a cada pregunta, modificando el mismo dependiendo del resultado. “Tocamos bien el balón y tuvimos oportunidades pero lamentablemente la pelota no entró y no pudimos darle una satisfacción a la afición, pero vamos a seguir trabajando para mejorar estos resultados” o podría ser “Tocamos bien el balón y tuvimos oportunidades que logramos concretar y así logramos darle una satisfacción a la afición y ahora toca seguir trabajando para mantener estos resultados”. ¡Excepcional oratoria!
En recientes días me sucede lo mismo al escuchar las declaraciones de OPM, Roxana Baldetti y en particular Gudy Rivera sobre el caso del [ultimo escándalo de política nacional sobre las elecciones de jueces. Acaso no tienen asesores los funcionarios que no deben litigar y justificarse ante los medios regurgitando estupidez tras estupidez y que encima los mantenemos con nuestros impuestos. Tan incapaces somos de poner hasta aquí y no permitir que este vulgar y ofensivo circo continúe. Pienso en lo que Romario le contestó a Pelé y me queda la duda sobre sobre qué fue lo que Dios le bendijo a estas personas, porque cada vez que abren la boca…
@robertoantoniow