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Más sobre los Conservadores Americanos

Redacción República
07 de abril, 2014

En mi ultimo articulo di un bosquejo en rasgos grandes sobre mis percepciones del movimiento que denomine Conservador Americano, por lo que quise decir Conservador Liberal, que pretende conservar un régimen político de gobierno delimitado, constitucionalmente fundado, caracterizado por libertad económica, política y social, y la separación de poderes políticos, además de una desconfianza sana del populismo demagógico. ¿Más de lo mismo? De ninguna manera! Este Conservador es liberal, pero no al extremo de ser libertario, ni mucho menos randiano ni anarco-capitalista, aunque coinciden en muchísimo. El Conservador es amante de la libertad, pero acepta el gobierno como un mal necesario, creado principalmente para mitigar los riesgos sociales más grandes cuyo temor de que puedan suceder representaría un fuerte impedimento al sano desarrollo social, basado en paz y prosperidad si no se creasen instituciones públicas solidas para introducir un poco de certidumbre a la acción humana. Solo así se condicionan las expectativas de los agentes económicos y políticos que más importan, los individuos de tal manera que les permitiese perseguir sus intereses en beneficio propio y como consecuencia no intencionada, el bien común. 

Los Conservadores Americanos y los libertarios y, me atrevo a decir, los anarco capitalistas, comparten los mismos héroes: los Próceres de EE.UU., hombres ilustres que, por primera vez en la era moderna, sentaron las bases para el gobierno limitado y la libertad como condición ética del ser humano, siempre desde su posición ultra privilegiada en su momento histórico, y su posesión de esclavos humanos, lo cual no quita de su aporte grandioso a la humanidad. Pero no hay que confundirse. Los próceres de la libertad eran aristócratas Americanos; se consideraban buenos ingleses, gente de bien, irrespetada por la Corono Inglesa, cosa que no iban a tolerar. Al rebelarse, querían preservar el estilo de vida inglés, sin los defectos que en su momento impactaban sus intereses económicos y políticos, y orgullo social. Revolucionarios sí, pero conservadores en su corazón. 
Los Conservadores generalmente son pragmáticos, no idealistas. Para los Conservadores, las instituciones públicas no se crean para lograr los mejores resultados posibles, sino evitar los peores resultados posibles, entre los cuales figura prominentemente la amenaza permanente a la seguridad física de las personas y sus bienes. El Conservador acepta las postulaciones de sus primos mas liberales de que mejores resultados son posibles sin estado alguno, pero en temas de vida o muerte el Conservador no piensa arriesgar todo en base a imaginaciones teóricas de filósofos que jamás han probado sus tesis en ninguna parte del mundo en ningún momento histórico. El Conservador acepta, ala Locke, que el hombre es generalmente bueno, pacifico y cooperativo, pero no deduce de inmediato de eso la irrelevancia de un estado, sino al contrario. Piensa, ¿si la mayoría son buenos, y no organizados, que pasa si aparecen unos cuantos malos organizados? 
Esta no es una pregunta retórica, dado que los buenos siempre son mas, pero los malos siempre mas fuertes. Pare el Conservador Americano, las amenazas a la vida liberal, siempre existen. Y deben ser aniquiladas. He aquí la critica dirigida al liberalismo extremo que cae en el pecado del pasajero libre, filósofos amantes de la libertad, pero que no dan sus bienes y sus vidas, para defenderla. Para eso, los Conservadores. Guatemala es buen ejemplo de esto. En el conflicto armado, los más ricos “contrataron” al ejército para defenderlos, justo, pues pagaban sus impuestos. No obstante, las familias ricas no pusieron a sus propios hijos en el frente de combate. Claro, no hacerlo esa es una solución racional, pero no sería más funcional, eficiente y ética una sociedad donde las familias que mas quieren defender el sistema compartiesen valores que les dijesen (irracionalmente?) que deberían aportar todo, sus bienes y sus hijos, cuando todo está en juego? Cuando el guatemalteco se maravilla del respeto que el pueblo de EEUU todavía le da a sus héroes militares, será que no se da cuenta que es porque es su gente, su sangre? 
Algunos “liberales” sabemos que la libertad no es gratis. El valor de ese conocimiento no tiene precio, porque su valor es incalculable, pero de que tu estilo de vida depende de otros que dan la vida para defenderla debería de generarte una apreciación y sensibilidad de las dificultades y retos de vida que afrontan esos “otros” todos los días. Si no, puede ser que un día dejen de defender TU libertad.

Más sobre los Conservadores Americanos

Redacción República
07 de abril, 2014

En mi ultimo articulo di un bosquejo en rasgos grandes sobre mis percepciones del movimiento que denomine Conservador Americano, por lo que quise decir Conservador Liberal, que pretende conservar un régimen político de gobierno delimitado, constitucionalmente fundado, caracterizado por libertad económica, política y social, y la separación de poderes políticos, además de una desconfianza sana del populismo demagógico. ¿Más de lo mismo? De ninguna manera! Este Conservador es liberal, pero no al extremo de ser libertario, ni mucho menos randiano ni anarco-capitalista, aunque coinciden en muchísimo. El Conservador es amante de la libertad, pero acepta el gobierno como un mal necesario, creado principalmente para mitigar los riesgos sociales más grandes cuyo temor de que puedan suceder representaría un fuerte impedimento al sano desarrollo social, basado en paz y prosperidad si no se creasen instituciones públicas solidas para introducir un poco de certidumbre a la acción humana. Solo así se condicionan las expectativas de los agentes económicos y políticos que más importan, los individuos de tal manera que les permitiese perseguir sus intereses en beneficio propio y como consecuencia no intencionada, el bien común. 

Los Conservadores Americanos y los libertarios y, me atrevo a decir, los anarco capitalistas, comparten los mismos héroes: los Próceres de EE.UU., hombres ilustres que, por primera vez en la era moderna, sentaron las bases para el gobierno limitado y la libertad como condición ética del ser humano, siempre desde su posición ultra privilegiada en su momento histórico, y su posesión de esclavos humanos, lo cual no quita de su aporte grandioso a la humanidad. Pero no hay que confundirse. Los próceres de la libertad eran aristócratas Americanos; se consideraban buenos ingleses, gente de bien, irrespetada por la Corono Inglesa, cosa que no iban a tolerar. Al rebelarse, querían preservar el estilo de vida inglés, sin los defectos que en su momento impactaban sus intereses económicos y políticos, y orgullo social. Revolucionarios sí, pero conservadores en su corazón. 
Los Conservadores generalmente son pragmáticos, no idealistas. Para los Conservadores, las instituciones públicas no se crean para lograr los mejores resultados posibles, sino evitar los peores resultados posibles, entre los cuales figura prominentemente la amenaza permanente a la seguridad física de las personas y sus bienes. El Conservador acepta las postulaciones de sus primos mas liberales de que mejores resultados son posibles sin estado alguno, pero en temas de vida o muerte el Conservador no piensa arriesgar todo en base a imaginaciones teóricas de filósofos que jamás han probado sus tesis en ninguna parte del mundo en ningún momento histórico. El Conservador acepta, ala Locke, que el hombre es generalmente bueno, pacifico y cooperativo, pero no deduce de inmediato de eso la irrelevancia de un estado, sino al contrario. Piensa, ¿si la mayoría son buenos, y no organizados, que pasa si aparecen unos cuantos malos organizados? 
Esta no es una pregunta retórica, dado que los buenos siempre son mas, pero los malos siempre mas fuertes. Pare el Conservador Americano, las amenazas a la vida liberal, siempre existen. Y deben ser aniquiladas. He aquí la critica dirigida al liberalismo extremo que cae en el pecado del pasajero libre, filósofos amantes de la libertad, pero que no dan sus bienes y sus vidas, para defenderla. Para eso, los Conservadores. Guatemala es buen ejemplo de esto. En el conflicto armado, los más ricos “contrataron” al ejército para defenderlos, justo, pues pagaban sus impuestos. No obstante, las familias ricas no pusieron a sus propios hijos en el frente de combate. Claro, no hacerlo esa es una solución racional, pero no sería más funcional, eficiente y ética una sociedad donde las familias que mas quieren defender el sistema compartiesen valores que les dijesen (irracionalmente?) que deberían aportar todo, sus bienes y sus hijos, cuando todo está en juego? Cuando el guatemalteco se maravilla del respeto que el pueblo de EEUU todavía le da a sus héroes militares, será que no se da cuenta que es porque es su gente, su sangre? 
Algunos “liberales” sabemos que la libertad no es gratis. El valor de ese conocimiento no tiene precio, porque su valor es incalculable, pero de que tu estilo de vida depende de otros que dan la vida para defenderla debería de generarte una apreciación y sensibilidad de las dificultades y retos de vida que afrontan esos “otros” todos los días. Si no, puede ser que un día dejen de defender TU libertad.