Desde inicios del siglo XX, el paradigma conductista dominó la psicología
educativa. En los países más desarrollados, a mediados de la década de los 60s,
el enfoque cognitivo fue desplazado por sistemas basados en aprender a aprender
y aprender a pensar. No obstante, gran parte de la educación en nuestro país
aún se basa en el paradigma conductista, en el que el alumno es un receptor
pasivo que memoriza los contenidos.
Hoy en día vivimos en una realidad muy distinta a la que teníamos a inicios
del siglo, la cual aún no hemos terminado de comprender. Guatemala es uno de
los países de Latinoamérica con una pirámide poblacional muy joven, en donde el
50 por ciento de la población se encuentra entre los 0 y 19 años de edad. Sin
embargo, seguimos educándolos con un paradigma educativo del siglo pasado.
Dicho paradigma quizás fue el adecuado en su momento pero hoy está truncando el
potencial de aprendizaje de la mitad de nuestra población y, por consiguiente,
limitando sus oportunidades de superación.
La actual generación no tiene las mismas
necesidades, intereses y destrezas que las pasadas. Además, el mercado laboral
presenta enormes cambios y se vienen importantes retos con la automatización,
robótica, inteligencia artificial, etc. El reto para nosotros es en doble
sentido ya que mostramos rezagos contra el modelo del siglo pasado a la vez que
debemos también definir el modelo educativo del futuro. La realidad ineludible
es que tenemos que hacer importantes y urgentes cambios para impedir que se
siga ampliando la brecha contra el resto del mundo. Afortunadamente, estos
cambios ya están comenzando a avizorarse.
Desde hace algunos meses, FunSEPA ha unido
fuerzas con Khan Academy, una organización sin fines de lucro cuyo objetivo es mejorar
la educación a través de herramientas gratuitas y accesibles por cualquier persona
en cualquier parte del mundo. Junto a ellos, FunSEPA está experimentando con
miras a definir la mejor ruta hacia una nueva era educativa para Guatemala.
Este cambio se basa en la implementación de los
programas “KA” y “KA Lite” en escuelas públicas con distintas características,
tales como (i) si cuentan o no con acceso a Internet, (ii) laboratorio de
computo con computadores de escritorio,
(ii) laboratorio de computo con computadores portátiles, y (iii) tabletas.
La retroalimentación de los maestros y la respuesta de los alumnos ha sido muy positiva.
Por un lado, hemos visto cómo muchos de ellos han aprovechado esta herramienta
para adelantar contenido y practicar más en casa o fuera de horas de clase, y
por otro, hemos visto cómo ahora el maestro puede dedicarle más tiempo a la
asistencia individualizada, en vez de repetir una y otra vez la lección sin
mayor éxito.
A nuestros niños les urge enfrentarse a un
nuevo escenario educativo. Para lograrlo debemos de experimentar y evaluar la
costo eficiencia de distintas plataformas. Hoy tenemos el potencial de dar un
“salto cuántico” donde migremos directamente al modelo del futuro sin pasar por
todas las evoluciones e iteraciones que han sufrido otros países. Los quiero
invitar a que formen parte de este esfuerzo, uniéndose a “Anota tu gol por la
educación”. Con tan solo Q10 podemos ayudar a transformar a la educación en
Guatemala, para que así más escuelas tengan la oportunidad de contar con un
centro de computo y el programa de Khan Academy. Con ese pequeño aporte,
estarán participando en la rifa de tabletas, smartphones y un Volkswagen Gol. Aunque la contribución es pequeña,
su beneficio es gigante y nos llevará a la transformación de la educación en el
país. Por un nuevo paradigma educativo en Guatemala, ¡anoten su gol!
@salva_paiz
Desde inicios del siglo XX, el paradigma conductista dominó la psicología
educativa. En los países más desarrollados, a mediados de la década de los 60s,
el enfoque cognitivo fue desplazado por sistemas basados en aprender a aprender
y aprender a pensar. No obstante, gran parte de la educación en nuestro país
aún se basa en el paradigma conductista, en el que el alumno es un receptor
pasivo que memoriza los contenidos.
Hoy en día vivimos en una realidad muy distinta a la que teníamos a inicios
del siglo, la cual aún no hemos terminado de comprender. Guatemala es uno de
los países de Latinoamérica con una pirámide poblacional muy joven, en donde el
50 por ciento de la población se encuentra entre los 0 y 19 años de edad. Sin
embargo, seguimos educándolos con un paradigma educativo del siglo pasado.
Dicho paradigma quizás fue el adecuado en su momento pero hoy está truncando el
potencial de aprendizaje de la mitad de nuestra población y, por consiguiente,
limitando sus oportunidades de superación.
La actual generación no tiene las mismas
necesidades, intereses y destrezas que las pasadas. Además, el mercado laboral
presenta enormes cambios y se vienen importantes retos con la automatización,
robótica, inteligencia artificial, etc. El reto para nosotros es en doble
sentido ya que mostramos rezagos contra el modelo del siglo pasado a la vez que
debemos también definir el modelo educativo del futuro. La realidad ineludible
es que tenemos que hacer importantes y urgentes cambios para impedir que se
siga ampliando la brecha contra el resto del mundo. Afortunadamente, estos
cambios ya están comenzando a avizorarse.
Desde hace algunos meses, FunSEPA ha unido
fuerzas con Khan Academy, una organización sin fines de lucro cuyo objetivo es mejorar
la educación a través de herramientas gratuitas y accesibles por cualquier persona
en cualquier parte del mundo. Junto a ellos, FunSEPA está experimentando con
miras a definir la mejor ruta hacia una nueva era educativa para Guatemala.
Este cambio se basa en la implementación de los
programas “KA” y “KA Lite” en escuelas públicas con distintas características,
tales como (i) si cuentan o no con acceso a Internet, (ii) laboratorio de
computo con computadores de escritorio,
(ii) laboratorio de computo con computadores portátiles, y (iii) tabletas.
La retroalimentación de los maestros y la respuesta de los alumnos ha sido muy positiva.
Por un lado, hemos visto cómo muchos de ellos han aprovechado esta herramienta
para adelantar contenido y practicar más en casa o fuera de horas de clase, y
por otro, hemos visto cómo ahora el maestro puede dedicarle más tiempo a la
asistencia individualizada, en vez de repetir una y otra vez la lección sin
mayor éxito.
A nuestros niños les urge enfrentarse a un
nuevo escenario educativo. Para lograrlo debemos de experimentar y evaluar la
costo eficiencia de distintas plataformas. Hoy tenemos el potencial de dar un
“salto cuántico” donde migremos directamente al modelo del futuro sin pasar por
todas las evoluciones e iteraciones que han sufrido otros países. Los quiero
invitar a que formen parte de este esfuerzo, uniéndose a “Anota tu gol por la
educación”. Con tan solo Q10 podemos ayudar a transformar a la educación en
Guatemala, para que así más escuelas tengan la oportunidad de contar con un
centro de computo y el programa de Khan Academy. Con ese pequeño aporte,
estarán participando en la rifa de tabletas, smartphones y un Volkswagen Gol. Aunque la contribución es pequeña,
su beneficio es gigante y nos llevará a la transformación de la educación en el
país. Por un nuevo paradigma educativo en Guatemala, ¡anoten su gol!
@salva_paiz