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El Uso Sensato de las Redes Sociales

Redacción
03 de febrero, 2016

Recién se terminó el primer mes del nuevo año; muchos hemos empezado con nuevas expectativas, metas y resoluciones. También ha tomado posesión un nuevo presidente y gabinete, con la oportunidad de trabajar e impulsar iniciativas, reformas, y políticas que logren remediar mucho del daño que se ha hecho en gobiernos pasados. En las pocas semanas desde su posesión, el presidente ha llamado la atención de los medios y del público a raíz de los cambios de los ministros de comunicación, la derogación de los salarios diferenciados y hasta por los lugares que frecuenta para almorzar.

En definitiva es bueno ver un nuevo interés del público por temas económicos, políticos y sociales relevantes e importantes para el país, pues ese interés es el que abre el camino a entender más el trabajo que realizan los políticos y votar conscientemente. Sin embargo, hay que ser sensatos y entender que el cambio en Guatemala no puede ocurrir a través de comentarios en medios sociales, si no que debe ser acompañado de acciones e iniciativas concretas. La crisis política del año pasado rezagó muchos proyectos impulsados tanto por el sector público como por el privado. El llamado contra al corrupción era imperativo, pero el “stand by” que lo acompañó también tuvo impactos negativos en el país.

Este año el índice de percepción de la corrupción evaluó a Guatemala con una calificación de 28 puntos, un retroceso de 4 puntos en comparación con el año anterior. De 168 países evaluados, Guatemala quedó en el puesto 123, estando en Centroamérica únicamente mejor evaluado que Nicaragua. El retroceso en está calificación afecta directamente la competitividad de nuestro país, pues es uno de los indicadores más pertinentes para inversionistas extranjeros. La corrupción en el país es un obstáculo que incrementa la desigualdad e impide el uso adecuado de nuestros recursos y uno que debe ser combatido pero, si bien el despertar social que tomó lugar el año pasado fue un factor clave en la lucha contra la corrupción, no se pueden dejar de lado las demás iniciativas que también ayudan a impulsar el crecimiento del país.

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He observado un sin fin de críticas en línea hacía funcionarios públicos, empresarios, instituciones y demás. La transparencia es un derecho que debemos exigir como ciudadanos, pero la difamación y el uso irresponsable de los medios, obstruye el trabajo de quienes si están haciendo su función ética y eficazmente. Estamos poniendo tantos altos que ya no estamos dando espacio para que avancemos, podemos dar un paso para atrás siempre y cuando nos lleve a dar dos pasos para adelante. Todos deben seguir compartiendo sus opiniones y demandando sus derechos, pero si esos comentarios se acompañaran de recomendaciones, acciones e iniciativas no sólo para los sectores y personas que lideran el país si no que también personales, tendrían mucho más valor para el país.

El Uso Sensato de las Redes Sociales

Redacción
03 de febrero, 2016

Recién se terminó el primer mes del nuevo año; muchos hemos empezado con nuevas expectativas, metas y resoluciones. También ha tomado posesión un nuevo presidente y gabinete, con la oportunidad de trabajar e impulsar iniciativas, reformas, y políticas que logren remediar mucho del daño que se ha hecho en gobiernos pasados. En las pocas semanas desde su posesión, el presidente ha llamado la atención de los medios y del público a raíz de los cambios de los ministros de comunicación, la derogación de los salarios diferenciados y hasta por los lugares que frecuenta para almorzar.

En definitiva es bueno ver un nuevo interés del público por temas económicos, políticos y sociales relevantes e importantes para el país, pues ese interés es el que abre el camino a entender más el trabajo que realizan los políticos y votar conscientemente. Sin embargo, hay que ser sensatos y entender que el cambio en Guatemala no puede ocurrir a través de comentarios en medios sociales, si no que debe ser acompañado de acciones e iniciativas concretas. La crisis política del año pasado rezagó muchos proyectos impulsados tanto por el sector público como por el privado. El llamado contra al corrupción era imperativo, pero el “stand by” que lo acompañó también tuvo impactos negativos en el país.

Este año el índice de percepción de la corrupción evaluó a Guatemala con una calificación de 28 puntos, un retroceso de 4 puntos en comparación con el año anterior. De 168 países evaluados, Guatemala quedó en el puesto 123, estando en Centroamérica únicamente mejor evaluado que Nicaragua. El retroceso en está calificación afecta directamente la competitividad de nuestro país, pues es uno de los indicadores más pertinentes para inversionistas extranjeros. La corrupción en el país es un obstáculo que incrementa la desigualdad e impide el uso adecuado de nuestros recursos y uno que debe ser combatido pero, si bien el despertar social que tomó lugar el año pasado fue un factor clave en la lucha contra la corrupción, no se pueden dejar de lado las demás iniciativas que también ayudan a impulsar el crecimiento del país.

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He observado un sin fin de críticas en línea hacía funcionarios públicos, empresarios, instituciones y demás. La transparencia es un derecho que debemos exigir como ciudadanos, pero la difamación y el uso irresponsable de los medios, obstruye el trabajo de quienes si están haciendo su función ética y eficazmente. Estamos poniendo tantos altos que ya no estamos dando espacio para que avancemos, podemos dar un paso para atrás siempre y cuando nos lleve a dar dos pasos para adelante. Todos deben seguir compartiendo sus opiniones y demandando sus derechos, pero si esos comentarios se acompañaran de recomendaciones, acciones e iniciativas no sólo para los sectores y personas que lideran el país si no que también personales, tendrían mucho más valor para el país.