Empieza un nuevo año, que inicia con cambios en nuestra sociedad y el primero de ellos viene desde el cambio de Gobierno y con autoridades que tendrán que asumir una responsabilidad grande, dado que los problemas estructurales del país siguen sin ser resueltos y a la espera de encontrar una verdadera solución.
Es sumamente preocupante que durante este año Guatemala parece haberse quedado detenida y que los avances, si es que hubo, fueron mínimos e incluso no fueron sensibles para la mayoría de los guatemaltecos, ya que mucho seguimos en la búsqueda de una nación distinta en donde la igualdad y la equidad predominen sobre los intereses particulares.
El año 2019 deja un nuevo Ejecutivo y un Congreso que cambiará por los menos en un 60% de legisladores. Además, es importante destacar que la Corte Suprema de Justicia, aún no ha cambiado como debería haber ocurrido desde octubre, así que parece ser que tendremos que esperar hasta febrero para saber quiénes serán los responsables de impartir justicia.
Con estos cambios para el 2020, es necesario hacer un llamado a quienes van a ejercer esas responsabilidades, ya que la mayoría de la población se encuentra en estado de pobreza esperando por un mejor horizonte, aunque sabemos que lograr un cambio es difícil ahora mismo.
El llamado a las autoridades que fueron electas y que asumirán el sector justicia es a que sean conscientes de sus decisiones, porque de ellas depende en gran medida el futuro de este país, que ha visto como las cosas se salen de las manos dado que los funcionarios no son capaces de reaccionar ante las atrocidades que se comenten en las políticas públicas.
Y es que se puede decir que el gobierno que en pocos días dejara de ejercer el poder simplemente se dedicó a defenderse, a generar una lucha en contra sus adversarios políticos en lugar de llevar sus esfuerzos a la igualdad y equidad, para generar oportunidades para todos, pero no, simplemente tomo la determinación que defenderse ya que lo afectaba a sus intereses particulares.
Sin duda, este es un país polarizado en el que el discurso de la derecha e izquierda ha entrado en una fase profunda de divisionismo, un discurso que desde luego solo beneficia a ambos extremos, y deja a la gran mayoría a su suerte, sin tomar en consideración las realidades en que vivimos los que andamos a pie.
Por eso, por este año que empieza yo también pido por más oportunidades y desarrollo para todos, y al Gobierno que iniciará el 14 de enero le deseo lo mejor esperando que puedan cumplir con sus promesas, porque de ello depende que este país pueda salir adelante.
Al Congreso también hay que recordarle que es necesario que legislen para todos y no para unos pocos y a nuestro sistema de justicia, que comprenda que desde ahí nace el empuje hacia la igualdad y equidad.
Deseo que este año 2020 sea lleno de cosas buenas, de noticias que hagan grande a un país como el nuestro que tanto merecemos, que trabajemos por una nación grande con igualdad y equidad para todos y todos nos reencontremos y fijemos nuestro esfuerzo en salir adelante todos y no solo unos.
Empieza un nuevo año, que inicia con cambios en nuestra sociedad y el primero de ellos viene desde el cambio de Gobierno y con autoridades que tendrán que asumir una responsabilidad grande, dado que los problemas estructurales del país siguen sin ser resueltos y a la espera de encontrar una verdadera solución.
Es sumamente preocupante que durante este año Guatemala parece haberse quedado detenida y que los avances, si es que hubo, fueron mínimos e incluso no fueron sensibles para la mayoría de los guatemaltecos, ya que mucho seguimos en la búsqueda de una nación distinta en donde la igualdad y la equidad predominen sobre los intereses particulares.
El año 2019 deja un nuevo Ejecutivo y un Congreso que cambiará por los menos en un 60% de legisladores. Además, es importante destacar que la Corte Suprema de Justicia, aún no ha cambiado como debería haber ocurrido desde octubre, así que parece ser que tendremos que esperar hasta febrero para saber quiénes serán los responsables de impartir justicia.
Con estos cambios para el 2020, es necesario hacer un llamado a quienes van a ejercer esas responsabilidades, ya que la mayoría de la población se encuentra en estado de pobreza esperando por un mejor horizonte, aunque sabemos que lograr un cambio es difícil ahora mismo.
El llamado a las autoridades que fueron electas y que asumirán el sector justicia es a que sean conscientes de sus decisiones, porque de ellas depende en gran medida el futuro de este país, que ha visto como las cosas se salen de las manos dado que los funcionarios no son capaces de reaccionar ante las atrocidades que se comenten en las políticas públicas.
Y es que se puede decir que el gobierno que en pocos días dejara de ejercer el poder simplemente se dedicó a defenderse, a generar una lucha en contra sus adversarios políticos en lugar de llevar sus esfuerzos a la igualdad y equidad, para generar oportunidades para todos, pero no, simplemente tomo la determinación que defenderse ya que lo afectaba a sus intereses particulares.
Sin duda, este es un país polarizado en el que el discurso de la derecha e izquierda ha entrado en una fase profunda de divisionismo, un discurso que desde luego solo beneficia a ambos extremos, y deja a la gran mayoría a su suerte, sin tomar en consideración las realidades en que vivimos los que andamos a pie.
Por eso, por este año que empieza yo también pido por más oportunidades y desarrollo para todos, y al Gobierno que iniciará el 14 de enero le deseo lo mejor esperando que puedan cumplir con sus promesas, porque de ello depende que este país pueda salir adelante.
Al Congreso también hay que recordarle que es necesario que legislen para todos y no para unos pocos y a nuestro sistema de justicia, que comprenda que desde ahí nace el empuje hacia la igualdad y equidad.
Deseo que este año 2020 sea lleno de cosas buenas, de noticias que hagan grande a un país como el nuestro que tanto merecemos, que trabajemos por una nación grande con igualdad y equidad para todos y todos nos reencontremos y fijemos nuestro esfuerzo en salir adelante todos y no solo unos.