La pandemia del COVID 19 no da tregua en Guatemala, cada día son más contagiados y las muertes por este virus que ha golpeado en todas las esferas sociales, la económica por supuesto es una de las más lastimadas no solo aquí sino en todo el mundo, pero creo que una sociedad como la guatemalteca que esta resintiendo esta enfermedad en todos los ámbitos también se vincula con otra crisis.

Este país vive claramente una crisis de salud en donde muchas vidas humanas están enlutando los hogares de todos y claro que todavía no vemos un norte por parte de las autoridades de salud, porque esperamos mejores resultados y más ahora. 

Pero dentro de esta crisis, se da otra crisis que se agudiza en el país y que viene desde el año pasado y es la elección de magistrados a Corte Suprema de Justicia que cada vez se complica más y sobre todo que los estrategas han logrado de nuevo polarizar la elección hasta el punto de poder vincular un enrede jurídico que se da entre el Congreso de la Republica, la Corte Suprema de Justicia y la Corte de Constitucionalidad.

Esta crisis institucional también entra al ruedo el Procurador de Derechos Humanos, diferentes posicionamientos que son a favor o en contra de las resoluciones que emite la Corte de Constitucionalidad que ha resuelto ampararse citando el artículo 167 de la Ley de Amparo. 

Esta gran división se evidencia y las estrategias que van desde las políticas, pasando claro por las de comunicación tiene muy involucradas las redes sociales en donde la actividad no ha cesado y busca crear una opinión pública para posicionar la opinión de los grupos antagónicos que ahora se hacen evidentes quienes están de un lado y quienes de otro.

Esta crisis jurídica dentro de una crisis sanitaria, pueden a mi juicio tener varias razones una de ellas es la lucha de poder dentro de la elección a magistrados de la CSJ, y claro esto lleva a hacernos una pregunta necesaria y es que si debe cambiar la elección de magistrados a CSJ ya que al parecer es el problema del que nace esta gran crisis.

A mi percepción también existe una intensión deliberada y estratégica de hacer un rio revuelto lo que claro tendrá consecuencias y sin lugar a dudas pronto sabremos quien o quienes son los beneficiados de revolver las aguas de esta magnitud.

La crisis dentro de la crisis es algo que evidencia que la política y las condiciones sociales en sus diferentes frentes siguen en esta nueva normalidad, como se le ha llamado y que posiblemente seguiremos viendo como se crean revueltas ya sean políticas, jurídicas y sociales que nos tendrán siempre atentos hacia los que dirigen el país.

Como sociedad debemos estar atentos, aunque considero que es difícil sabiendo que vivimos esto en medio de una pandemia, así que no será fácil pero tampoco hay que dejar de lado esto que ocurre mientras estamos encerrados, leamos y escuchemos lo que pasa y así podremos tener un razonamiento claro. 

Escuchemos a los expertos, pero ante todo exijamos a nuestras autoridades que se centren en lo que importa que no olviden que miles están sufriendo ahora mismo y eso es lo que debe importar.