Según analistas consultados, el precio de maíz estadounidense es el que determina el costo del grano en el mundo.

Una buena cosecha como la que se pronostica es determinante para abaratar los precios mundiales del grano. Contrario es si se da una helada o cualquier otro factor que disminuya el volumen de la cosecha, pues el precio tenderá a subir. 

Sin embargo, aunque los precios vayan a la baja, los productos hechos con el maíz, no corren con la misma suerte.

La organización de las Naciones Unidas para la agricultura y Alimentación (FAO por sus siglas en inglés), en su informe de monitoreo de precios de enero, señaló que el precio promedio registró un aumento de Q6, ya que el quintal pasó de Q112 en comparación con el mes  anterior que se cotizó en Q96. 

Según el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga), el objetivo primario del país es satisfacer las necesidades nacionales con la producción interna.  Hay que tomar en cuenta que, estacionalmente las cosechas se ven disminuidas de marzo a agosto de cada año, acentuándose una escasez del grano.

Durante el periodo, de mayo a julio, el mercado guatemalteco se abastece de las reservas o de la producción que ingresa de México o de otros países.