Una venta de ceviches, cinco licuadoras “arruinadas” y una receta familiar marcaron el inicio del emprendimiento de Mario de León. Con 25 años, el fundador de Chiltepico supo escuchar y reconocer una oportunidad que el mercado le solicitaba.

“Inicialmente, vendíamos con mi hermano ceviches en el Campo Marte. El picante siempre fue parte de mi casa y entonces a ese producto nosotros le agregábamos una salsa de chiltepe. Poco a poco la gente fue preguntando si vendíamos o no. Fue ahí cuando la idea comenzó a rondar”, contó Mario de León, en una entrevista con República Emprendimiento.

Pese a que esa primera conversación entre hermanos terminó en risas, Mario continuó con la duda de “lo que podría ser”, hasta que volvieron a retomar la conversación y decidieron emprender en el tema de alimentos envasados.

“Primero iniciamos en la casa de mis papás. Recibimos las autorizaciones del Ministerio de Salud. Mi mamá nos prestaba sus licuadoras. Le habremos arruinado unas cinco”, comentó entre risas. “Y así seguimos investigando y creando un mejor espacio para producir el producto”.

En 2013, Chiltepico se consolidó como una empresa formal y dos años después ingresaron con sus productos a reconocidos supermercados del país.

¿Cuáles han sido los retos que has tenido para que tu emprendimiento se mantenga y cómo los resolviste?

— Lo principal son los retos personales. Conocerte a ti, para que sos bueno y malo dentro de una empresa. Cuando uno comienza un emprendimiento, al final hace todo, pero uno tiene que saber cuál es su pasión dentro de su negocio.

Esa es una enseñanza que me ha dejado los retos, conocerme a mí mismo, reconocer en lo que soy bueno y enfocarme sobre ese camino. Así las cosas, vienen por sí solas, y si uno hace un buen trabajo, creo que el karma lo regresa y multiplica.

Otra enseñanza es “lento, pero con talento”. Me refiero a que, si vas a hacer un escalón que sea bien hecho, para que el proyecto esté consolidado desde las raíces. Con toda la documentación para manejar una empresa, fue algo que aprendí porque tuve que ser muy ordenado.

Y el desarrollo de productos. Ahora ya tenemos la habilidad con mi hermana de saber que tenemos que investigar proveedores, hacer prueba y error con sabores para encontrar un buen resultado que vaya acorde a nuestra misión y visión de marca.

¿Cómo esperas que ser parte de Entre Jaguares ayude y potencialice tu emprendimiento?

— Un emprendedor siempre tiene deseo de ver su marca en lugares donde nunca pensó, en la radio, medios escritos, televisión, Mupis, atrás de un bus, etc. En 2015, cuando la cree nunca pensé en ello, solo sabía que quería estar en la mesa de cada consumidor. Por eso, Entre Jaguares me ha servido para recordar mis raíces como emprendedor.

Recordarme y reencontrarme, volver a las quejas que siempre lo abruman a uno de por qué no se vende más, y decirme que todo viene a su tiempo y “lento, pero con talento”.

También la exposición de marca es superimportante y las mentorías que nos han dado, en las que uno sabe que está haciendo las cosas, pero esos espacios te lo recalcan y son como un baño de agua fría en la que te dicen el porqué o por qué no lo estás haciendo.

Te ayudan a decir corre y va de nuevo. Hagámoslo, y hagámoslo bien.

Con la participación en el programa, ¿cuál es la lección más importante que como emprendedor quieres dejar a otros?

— Lo más importante es no rendirse. Si uno tiene un producto o emprendimiento ganador, habrá mil formas de poder echar a andar tu idea. Seguramente vas a tener dos trabajos por mucho tiempo, pero habrá un punto de inflexión en el que tu emprendimiento le va a ganar a tu trabajo y es el momento en el que se toma la decisión de a qué te vas a dedicar.

Finalmente, ¿recomendarías Entre Jaguares a otros emprendedores?

— Claro, porque es una experiencia que permite como emprendedor contar las historias. Eso te hace incentivar a mucha gente a que no se desanimen. Entre Jaguares te hace entender el ABC de un emprendimiento, los retos que vienen detrás de eso, todas las adversidades que uno enfrente como emprendedor, pero ayuda a salir de la zona de confort y recibir consejos de gente profesional.

Es una plataforma para empresas que están a un nivel de consolidadas y atrás hay muchas plataformas e instituciones que están aportando a tener una empresa con un valor adicional de lo que uno comercializa.