Luis Pedro Peralta: De vender shucos en carreta a CEO de La Playa
Conoce la trayectoria del emprendedor guatemalteco que ahora lidera una exitosa cadena de restaurantes en el país.
Luis Pedro Peralta es un emprendedor guatemalteco con una visión clara y un espíritu perseverante. Su historia es la de un joven que, a los 20 años mientras estudiaba en la universidad, soñaba con establecer un negocio.
“Siempre quisimos con un amigo poner algo que fuera fácil, pero más que nada, uno que nos permitiera seguir estudiando”, señaló. Aquellos días fueron los que marcaron el comienzo de su viaje.
“Empezamos con una carreta de shucos. La fuimos a comprar enfrente del colegio Liceo Guatemala. Literalmente un shuquero nos enseñó todo el proceso y así fue como empezamos”, explicó compartió Peralta.
Su negocio creció a lo largo del tiempo, y pasaron a convertirse lo que él describe como “una pequeña empresa con 10 carretas, dos camiones y eventos casi todos los fines de semana”.
Sin embargo, el mercado de eventos se volvió cada vez más competitivo, lo que los llevó a buscar nuevas oportunidades.
Fue por eso que decidieron aventurarse con la apertura de pequeños restaurantes en diferentes ubicaciones. Pero las cosas no salieron como esperaron y a pesar de este fracaso, Luis Pedro no se rindió.
Finalmente, su determinación lo llevó a encontrar una nueva ubicación, Plaza Futeca, en la Zona 14, y fue aquí donde su restaurante comenzó a despegar.
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A lo largo de su trayectoria, Luis Pedro siempre admiró a La Playa, un restaurante ubicado en la misma plaza. Observaba atentamente sus operaciones y soñaba con alcanzar un nivel de éxito similar en su propio restaurante.
“Siempre decía algún día se me va a llenar mi restaurante como se llena La Playa”, recordó el emprendedor.
Un tiempo después, el destino intervino en su vida cuando los dueños de La Playa se acercaron a él, buscando su experiencia y visión empresarial para abrir una nueva sucursal en 4 Grados Norte.
“En algún momento los dueños de La Playa me hablaron para abrir otra sucursal que sería en 4 Grados Norte. Eso fue aproximadamente entre 2003 y 2004”.
En ese momento, Luis Pedro dio un giro en su carrera, y dejó atrás los shucos para enfocarse completamente en operar y administrar La Playa. Hoy en día es el CEO de esta cadena de restaurantes.
Los orígenes del éxito de Luis Pedro Peralta
En el nacimiento de su aventura emprendedora, la pregunta que muchos se hacen esencialmente gira en torno a quiénes eran quienes estaban detrás de la preparación de esos shucos que poco a poco fueron ganando popularidad en Guatemala.
La respuesta, según Luis Pedro Peralta, fue una mezcla de esfuerzo propio y trabajo en equipo. “Al principio sí los hicimos nosotros”, relató Luis Pedro.
“Digamos, como había diferentes eventos, en los de LOS amigos los hacíamos nosotros. Pero cuando eran eventos ya más formales, cuando había una contratación de parte de un cliente, contratábamos al personal que nos ayudaban a prepararlos y a servirlos”.
La versatilidad de su emprendimiento era notable, ya que lograron adaptarse a muchas situaciones diferentes. “En donde sí los hacíamos nosotros siempre fue cuando poníamos las carretas afuera de las discotecas.
“En aquel momento estaba de moda Qbar, nosotros llevábamos la carreta, el dueño nos dejaba guardarla como en una esquina en el ingreso y nosotros entrábamos y luego nos salíamos como 15 minutos antes a preparar los shucos. Yo preparaba los panes y mi socio cobraba”.
Persistencia y Pasión
En la vida, a menudo nos encontramos con decisiones que tomamos impulsivamente, sin un plan sólido o un análisis exhaustivo. Así fue como Luis Pedro Peralta y su socio decidieron dar los primeros pasos en el mundo de los restaurantes. Cuando se les presentó la oportunidad de abrir su primer local, fue una la tomaron en el calor del momento.
“El primer local lo abrimos porque una señora que conocía a mi socio nos dijo que tenía ese local y que nos lo daba barato. Fue por eso que decidimos probar suerte”, detalló Luis Pedro. Pero lo que podría haberse interpretado como un fracaso, se convirtió en una lección invaluable para ellos.
Luis Pedro comprendió que el emprendimiento es un proceso de aprendizaje continuo, donde cada decisión y cada desafío son oportunidades para crecer.
“Yo creo que parte del emprendimiento y del aprendizaje, es ir intentando e ir creciendo y tratar de ir mejorando cada vez que uno va tomando decisiones nuevas”, reflexionó.
Hoy en día, Luis Pedro Peralta se encuentra al frente de La Playa, un restaurante que siempre admiró desde lejos.
“Es un sentimiento especial, ahorita viéndolo para atrás, me da mucha nostalgia porque yo sinceramente si pasaba en el carro, pasaba caminando y miraba La Playa llena de gente, nunca pensé: Voy a estar ahí o eso será mío. Yo quería algo igual para lo mío y que yo haya parado aquí fue algo que se proyectó y se logró.”
Cabe resaltar que esta cadena de restaurantes, se ha convertido en una verdadera bendición tanto para él como para las familias que trabajan allí.
“La Playa cumple 27 años de estar en el mercado este 2023 y la verdad es que me da mucho orgullo y mucha alegría poder seguir ofreciéndoles a las nuevas generaciones, lo que tanto disfrutamos de venir y de estar aquí”, compartió.
Desafíos, cambios y lecciones
La vida de Luis Pedro Peralta, ha estado llena de desafíos y logros notables. Uno de los más destacados que enfrentó fue la transformación de La Playa en un lugar que se estaba alejando de su misión y razón de ser original.
En un punto, el ambiente se volvió más pesado de lo que él consideraba apropiado para su marca. “La Playa es un sitio para pasarla, relajado, puedes venir con amigos, sentirte seguro. Puedes venir con tu familia o tus compañeros de trabajo y disfrutar. Cada mesa es un mundo donde la gente se divierte en diferentes aspectos de la vida”.
La percepción “negativa” que se estaba formando sobre La Playa fue un desafío importante para la marca. Pero en lugar de rendirse, Luis Pedro y su equipo lo tomaron como una oportunidad para una transformación completa. Revolucionaron el menú, el diseño, la música y las instalaciones, devolviéndole así a este lugar su autenticidad y su ambiente relajado.
Esta decisión no solo revitalizó la marca, sino que también abrió puertas a nuevas ubicaciones y oportunidades de crecimiento. Hoy, La Playa sigue creciendo y expandiéndose, con un enfoque en mantener su esencia relajada y acogedora.
En este mismo sentido, Luis Pedro enfatizó la importancia de superar el miedo y la pena.
“No hay que tener pena de emprender. Lo que hagas debe ser bajo los marcos de la ley y agregar valor a las personas. No importa qué vendas, si generas sonrisas y empleo, estás haciendo algo valioso”, expresó.
De acuerdo con el emprendedor, el miedo es un motor que impulsa a los emprendedores a seguir adelante. “El miedo al emprendedor nunca se acaba, pero es el motor que nos mantiene motivados”, confesó.
27 años de La Playa: Un legado de éxito y transformación
La historia de La Playa es una historia de perseverancia, evolución y éxito en Guatemala. En el 2020, mientras el mundo enfrentaba la pandemia de la COVID-19, esta marca celebraba sus 25 años de existencia, un logro impresionante que muy pocos bares pueden reclamar.
“Fue una de las peores experiencias que yo he pasado como emprendedor. Como persona”, confesó. La pandemia trajo consigo cero ingresos y varios desafíos enormes para mantener a su equipo y seguir adelante.
Pero además de esto, La Playa se destaca también por su capacidad para adaptarse y evolucionar. Antes de la pandemia, comenzaron un proyecto para celebrar sus 25 años. Esta celebración incluyó una transformación completa de la marca, desde la imagen hasta el menú.
“Una remodelación de la marca. A nivel de imagen. A nivel de instalaciones. Y a nivel de menú. Tenemos un menú nuevo. Como con 30 platillos nuevos, que están excelentes y bebidas nuevas”, contó Luis Pedro.
Este año, La Playa celebra su 27 aniversario, un hecho que llena de orgullo a Luis Pedro y su equipo. “Nos sentimos superorgullosos y agradecidos con Dios”, comentó.
La Playa ha sido más que un bar-restaurante; ha sido un punto de encuentro para generaciones de guatemaltecos, un lugar donde las historias y los momentos se comparten y se celebran.
Para aquellos que han perdido de vista La Playa o han estado ausentes por un tiempo, Luis Pedro les hace una invitación especial a redescubrir lo nuevo que tienen para ofrecer. Con el legado de 27 años a cuestas, La Playa sigue siendo un ejemplo de éxito, transformación y alegría en la escena gastronómica de Guatemala.
Luis Pedro Peralta: De vender shucos en carreta a CEO de La Playa
Conoce la trayectoria del emprendedor guatemalteco que ahora lidera una exitosa cadena de restaurantes en el país.
Luis Pedro Peralta es un emprendedor guatemalteco con una visión clara y un espíritu perseverante. Su historia es la de un joven que, a los 20 años mientras estudiaba en la universidad, soñaba con establecer un negocio.
“Siempre quisimos con un amigo poner algo que fuera fácil, pero más que nada, uno que nos permitiera seguir estudiando”, señaló. Aquellos días fueron los que marcaron el comienzo de su viaje.
“Empezamos con una carreta de shucos. La fuimos a comprar enfrente del colegio Liceo Guatemala. Literalmente un shuquero nos enseñó todo el proceso y así fue como empezamos”, explicó compartió Peralta.
Su negocio creció a lo largo del tiempo, y pasaron a convertirse lo que él describe como “una pequeña empresa con 10 carretas, dos camiones y eventos casi todos los fines de semana”.
Sin embargo, el mercado de eventos se volvió cada vez más competitivo, lo que los llevó a buscar nuevas oportunidades.
Fue por eso que decidieron aventurarse con la apertura de pequeños restaurantes en diferentes ubicaciones. Pero las cosas no salieron como esperaron y a pesar de este fracaso, Luis Pedro no se rindió.
Finalmente, su determinación lo llevó a encontrar una nueva ubicación, Plaza Futeca, en la Zona 14, y fue aquí donde su restaurante comenzó a despegar.
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A lo largo de su trayectoria, Luis Pedro siempre admiró a La Playa, un restaurante ubicado en la misma plaza. Observaba atentamente sus operaciones y soñaba con alcanzar un nivel de éxito similar en su propio restaurante.
“Siempre decía algún día se me va a llenar mi restaurante como se llena La Playa”, recordó el emprendedor.
Un tiempo después, el destino intervino en su vida cuando los dueños de La Playa se acercaron a él, buscando su experiencia y visión empresarial para abrir una nueva sucursal en 4 Grados Norte.
“En algún momento los dueños de La Playa me hablaron para abrir otra sucursal que sería en 4 Grados Norte. Eso fue aproximadamente entre 2003 y 2004”.
En ese momento, Luis Pedro dio un giro en su carrera, y dejó atrás los shucos para enfocarse completamente en operar y administrar La Playa. Hoy en día es el CEO de esta cadena de restaurantes.
Los orígenes del éxito de Luis Pedro Peralta
En el nacimiento de su aventura emprendedora, la pregunta que muchos se hacen esencialmente gira en torno a quiénes eran quienes estaban detrás de la preparación de esos shucos que poco a poco fueron ganando popularidad en Guatemala.
La respuesta, según Luis Pedro Peralta, fue una mezcla de esfuerzo propio y trabajo en equipo. “Al principio sí los hicimos nosotros”, relató Luis Pedro.
“Digamos, como había diferentes eventos, en los de LOS amigos los hacíamos nosotros. Pero cuando eran eventos ya más formales, cuando había una contratación de parte de un cliente, contratábamos al personal que nos ayudaban a prepararlos y a servirlos”.
La versatilidad de su emprendimiento era notable, ya que lograron adaptarse a muchas situaciones diferentes. “En donde sí los hacíamos nosotros siempre fue cuando poníamos las carretas afuera de las discotecas.
“En aquel momento estaba de moda Qbar, nosotros llevábamos la carreta, el dueño nos dejaba guardarla como en una esquina en el ingreso y nosotros entrábamos y luego nos salíamos como 15 minutos antes a preparar los shucos. Yo preparaba los panes y mi socio cobraba”.
Persistencia y Pasión
En la vida, a menudo nos encontramos con decisiones que tomamos impulsivamente, sin un plan sólido o un análisis exhaustivo. Así fue como Luis Pedro Peralta y su socio decidieron dar los primeros pasos en el mundo de los restaurantes. Cuando se les presentó la oportunidad de abrir su primer local, fue una la tomaron en el calor del momento.
“El primer local lo abrimos porque una señora que conocía a mi socio nos dijo que tenía ese local y que nos lo daba barato. Fue por eso que decidimos probar suerte”, detalló Luis Pedro. Pero lo que podría haberse interpretado como un fracaso, se convirtió en una lección invaluable para ellos.
Luis Pedro comprendió que el emprendimiento es un proceso de aprendizaje continuo, donde cada decisión y cada desafío son oportunidades para crecer.
“Yo creo que parte del emprendimiento y del aprendizaje, es ir intentando e ir creciendo y tratar de ir mejorando cada vez que uno va tomando decisiones nuevas”, reflexionó.
Hoy en día, Luis Pedro Peralta se encuentra al frente de La Playa, un restaurante que siempre admiró desde lejos.
“Es un sentimiento especial, ahorita viéndolo para atrás, me da mucha nostalgia porque yo sinceramente si pasaba en el carro, pasaba caminando y miraba La Playa llena de gente, nunca pensé: Voy a estar ahí o eso será mío. Yo quería algo igual para lo mío y que yo haya parado aquí fue algo que se proyectó y se logró.”
Cabe resaltar que esta cadena de restaurantes, se ha convertido en una verdadera bendición tanto para él como para las familias que trabajan allí.
“La Playa cumple 27 años de estar en el mercado este 2023 y la verdad es que me da mucho orgullo y mucha alegría poder seguir ofreciéndoles a las nuevas generaciones, lo que tanto disfrutamos de venir y de estar aquí”, compartió.
Desafíos, cambios y lecciones
La vida de Luis Pedro Peralta, ha estado llena de desafíos y logros notables. Uno de los más destacados que enfrentó fue la transformación de La Playa en un lugar que se estaba alejando de su misión y razón de ser original.
En un punto, el ambiente se volvió más pesado de lo que él consideraba apropiado para su marca. “La Playa es un sitio para pasarla, relajado, puedes venir con amigos, sentirte seguro. Puedes venir con tu familia o tus compañeros de trabajo y disfrutar. Cada mesa es un mundo donde la gente se divierte en diferentes aspectos de la vida”.
La percepción “negativa” que se estaba formando sobre La Playa fue un desafío importante para la marca. Pero en lugar de rendirse, Luis Pedro y su equipo lo tomaron como una oportunidad para una transformación completa. Revolucionaron el menú, el diseño, la música y las instalaciones, devolviéndole así a este lugar su autenticidad y su ambiente relajado.
Esta decisión no solo revitalizó la marca, sino que también abrió puertas a nuevas ubicaciones y oportunidades de crecimiento. Hoy, La Playa sigue creciendo y expandiéndose, con un enfoque en mantener su esencia relajada y acogedora.
En este mismo sentido, Luis Pedro enfatizó la importancia de superar el miedo y la pena.
“No hay que tener pena de emprender. Lo que hagas debe ser bajo los marcos de la ley y agregar valor a las personas. No importa qué vendas, si generas sonrisas y empleo, estás haciendo algo valioso”, expresó.
De acuerdo con el emprendedor, el miedo es un motor que impulsa a los emprendedores a seguir adelante. “El miedo al emprendedor nunca se acaba, pero es el motor que nos mantiene motivados”, confesó.
27 años de La Playa: Un legado de éxito y transformación
La historia de La Playa es una historia de perseverancia, evolución y éxito en Guatemala. En el 2020, mientras el mundo enfrentaba la pandemia de la COVID-19, esta marca celebraba sus 25 años de existencia, un logro impresionante que muy pocos bares pueden reclamar.
“Fue una de las peores experiencias que yo he pasado como emprendedor. Como persona”, confesó. La pandemia trajo consigo cero ingresos y varios desafíos enormes para mantener a su equipo y seguir adelante.
Pero además de esto, La Playa se destaca también por su capacidad para adaptarse y evolucionar. Antes de la pandemia, comenzaron un proyecto para celebrar sus 25 años. Esta celebración incluyó una transformación completa de la marca, desde la imagen hasta el menú.
“Una remodelación de la marca. A nivel de imagen. A nivel de instalaciones. Y a nivel de menú. Tenemos un menú nuevo. Como con 30 platillos nuevos, que están excelentes y bebidas nuevas”, contó Luis Pedro.
Este año, La Playa celebra su 27 aniversario, un hecho que llena de orgullo a Luis Pedro y su equipo. “Nos sentimos superorgullosos y agradecidos con Dios”, comentó.
La Playa ha sido más que un bar-restaurante; ha sido un punto de encuentro para generaciones de guatemaltecos, un lugar donde las historias y los momentos se comparten y se celebran.
Para aquellos que han perdido de vista La Playa o han estado ausentes por un tiempo, Luis Pedro les hace una invitación especial a redescubrir lo nuevo que tienen para ofrecer. Con el legado de 27 años a cuestas, La Playa sigue siendo un ejemplo de éxito, transformación y alegría en la escena gastronómica de Guatemala.