Política
Política
Empresa
Empresa
Investigación y Análisis
Investigación y Análisis
Internacional
Internacional
Opinión
Opinión
Inmobiliaria
Inmobiliaria
Agenda Empresarial
Agenda Empresarial

Zika también origina casos de artritis

Redacción República
08 de marzo, 2016

El Protocolo de Vigilancia Epidemiológica para la Prevención, Identificación Temprana, Control y Atención de Casos del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) indica que los casos probables de Zika son los pacientes que presenten fiebre y artralgias o fiebre y artritis de etiología desconocida.

Los casos a descartar son las pruebas negativas para malaria, dengue, chikungunya y sarampión-rubeola. En Guatemala se dio a conocer en el marco del Día Internacional de la Mujer la prevalencia que existe entre las mujeres sobre artritis reumatoide en comparación con los hombres.

Se calcula que unas cien mil personas tienen este padecimiento en el país y las cifras alrededor del mundo hablan sobre una población integrada por más de 70 millones de individuos en la etapa productiva de la vida.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER

Es una enfermedad crónica que causa inflamación de las articulaciones, tejidos circundantes y puede afectar otros órganos. Las señales de alerta son rigidez prolongada, calor, sensibilidad, dolor y deformidad de articulaciones, dolor torácico, resequedad en ojos y boca, ardor y secreción del ojo, nódulos bajo la piel, entumecimiento en las manos y pies, dificultad para dormir y fatiga”, informan los expertos.

Los síntomas de las articulaciones son rigidez prolongada, con una duración de más de una hora, en las mañanas; calor, sensibilidad y rigidez especialmente después de un periodo largo de inactividad o reposo; dolor de la misma articulación en ambos lados del cuerpo; pérdida del rango de movimiento en las articulaciones afectadas y deformidad de las articulaciones comprometidas en la enfermedad.

En los pacientes en los que la terapia convencional no produce una respuesta adecuada, el tratamiento con medicamentos biológicos, particularmente con inhibidores del TNF alfa, han significado un inmenso avance, logrando detener la progresión de la enfermedad y alcanzar la remisión e inactividad de la misma.

Zika también origina casos de artritis

Redacción República
08 de marzo, 2016

El Protocolo de Vigilancia Epidemiológica para la Prevención, Identificación Temprana, Control y Atención de Casos del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) indica que los casos probables de Zika son los pacientes que presenten fiebre y artralgias o fiebre y artritis de etiología desconocida.

Los casos a descartar son las pruebas negativas para malaria, dengue, chikungunya y sarampión-rubeola. En Guatemala se dio a conocer en el marco del Día Internacional de la Mujer la prevalencia que existe entre las mujeres sobre artritis reumatoide en comparación con los hombres.

Se calcula que unas cien mil personas tienen este padecimiento en el país y las cifras alrededor del mundo hablan sobre una población integrada por más de 70 millones de individuos en la etapa productiva de la vida.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER

Es una enfermedad crónica que causa inflamación de las articulaciones, tejidos circundantes y puede afectar otros órganos. Las señales de alerta son rigidez prolongada, calor, sensibilidad, dolor y deformidad de articulaciones, dolor torácico, resequedad en ojos y boca, ardor y secreción del ojo, nódulos bajo la piel, entumecimiento en las manos y pies, dificultad para dormir y fatiga”, informan los expertos.

Los síntomas de las articulaciones son rigidez prolongada, con una duración de más de una hora, en las mañanas; calor, sensibilidad y rigidez especialmente después de un periodo largo de inactividad o reposo; dolor de la misma articulación en ambos lados del cuerpo; pérdida del rango de movimiento en las articulaciones afectadas y deformidad de las articulaciones comprometidas en la enfermedad.

En los pacientes en los que la terapia convencional no produce una respuesta adecuada, el tratamiento con medicamentos biológicos, particularmente con inhibidores del TNF alfa, han significado un inmenso avance, logrando detener la progresión de la enfermedad y alcanzar la remisión e inactividad de la misma.