Un pandillero de la Mara 18, infiltrado en el Ejército de Guatemala, fue condenado a 221 años de cárcel inconmutable.
El condenado entrenaba a los pandilleros en las orillas delos barrancos y participó en ataquesarmados donde hirieron a 16 personas.
El Ministerio Público informó que entre las víctimas figuran cinco agentes de la Policía Nacional Civil (PNC).
“Luis Ángel Sierra Arévalo pertenecía al Ejército de Guatemala, y al barrio 18, utilizó armas en ataques armados”, informó el MP.
Juntó con el infiltrado fueron condenados dos personas más: Edgar Francisco Vicente Chamalé y Cristian Alexander Barrios.
Los delitos por los que fueron condenados son: asesinato en grado de tentativa, atentado con agravación, portación ilegal de armas de fuego y tenencia de armas con número de registro alterado.
Marero condenado
La Fiscalía de Delitos contra la Vida y la Integridad de las Personas demostró que cometieron delitos contra 16 personas.
La Fiscalía informó que los procesados fueron aprehendidos en mayo de 2017, en la 13 calle y avenida Elena, zona 1, de la capital.
Declaró que en esa ocasión incautaron dos fusiles de asalto y una subametralladora y chalecos blindados.
En las investigaciones la fiscalía se estableció que lasarmas fueron utilizadas en ataques en donde resultaron heridas 16 personas.
La condena fue dictada por el Tribunal de Sentencia Penal, Narcoactividad y Delitos contra el Ambiente.
Condena
El MP informó que por el delito de asesinato en grado de tentativa contra 11 personas, fueron condenados a 16 años con ocho meses a cada uno, es decir 184 años y ocho meses de prisión.
Por el delito de atentado con agravación específica, donde resultaron heridos cinco policías, un año y cuatro meses por cada agraviado, para una suma de seis años y ocho meses de cárcel.
La fiscalía acreditó también el delito de portación ilegal de armas de fuego bélicas o de uso exclusivo del Ejército, les sumó 10 años de prisión.
Mientras por el delito tenencia o portación de arma de fuego con número de registro alterado, 10 años por cada arma, para un total de 30 años de cárcel.
Un pandillero de la Mara 18, infiltrado en el Ejército de Guatemala, fue condenado a 221 años de cárcel inconmutable.
El condenado entrenaba a los pandilleros en las orillas delos barrancos y participó en ataquesarmados donde hirieron a 16 personas.
El Ministerio Público informó que entre las víctimas figuran cinco agentes de la Policía Nacional Civil (PNC).
“Luis Ángel Sierra Arévalo pertenecía al Ejército de Guatemala, y al barrio 18, utilizó armas en ataques armados”, informó el MP.
Juntó con el infiltrado fueron condenados dos personas más: Edgar Francisco Vicente Chamalé y Cristian Alexander Barrios.
Los delitos por los que fueron condenados son: asesinato en grado de tentativa, atentado con agravación, portación ilegal de armas de fuego y tenencia de armas con número de registro alterado.
Marero condenado
La Fiscalía de Delitos contra la Vida y la Integridad de las Personas demostró que cometieron delitos contra 16 personas.
La Fiscalía informó que los procesados fueron aprehendidos en mayo de 2017, en la 13 calle y avenida Elena, zona 1, de la capital.
Declaró que en esa ocasión incautaron dos fusiles de asalto y una subametralladora y chalecos blindados.
En las investigaciones la fiscalía se estableció que lasarmas fueron utilizadas en ataques en donde resultaron heridas 16 personas.
La condena fue dictada por el Tribunal de Sentencia Penal, Narcoactividad y Delitos contra el Ambiente.
Condena
El MP informó que por el delito de asesinato en grado de tentativa contra 11 personas, fueron condenados a 16 años con ocho meses a cada uno, es decir 184 años y ocho meses de prisión.
Por el delito de atentado con agravación específica, donde resultaron heridos cinco policías, un año y cuatro meses por cada agraviado, para una suma de seis años y ocho meses de cárcel.
La fiscalía acreditó también el delito de portación ilegal de armas de fuego bélicas o de uso exclusivo del Ejército, les sumó 10 años de prisión.
Mientras por el delito tenencia o portación de arma de fuego con número de registro alterado, 10 años por cada arma, para un total de 30 años de cárcel.