Panorama general. El Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) ha emitido su informe diario sobre la actividad volcánica en Guatemala, alertando sobre la situación que enfrentan las comunidades cercanas a los volcanes de Fuego y Santiaguito.

Lo que se debe saber. En el volcán de Fuego, se han registrado explosiones de diversa intensidad, expulsando columnas de ceniza a alturas de entre 4 mil 500 y 4 mil 800 metros sobre el nivel del mar.

• Estas columnas se desplazan hacia el oeste, suroeste y noroeste del complejo volcánico, afectando a localidades como Yepocapa, La Soledad, Panimaché, Morelia, Santa Sofía, Siquinalá y Santa Lucía Cotzumalguapa.
• Las explosiones han generado retumbos y avalanchas que descienden por las barrancas Seca, Taniluya, Trinidad y Las Lajas, incluso alcanzando la vegetación.
• Se advierte sobre la expulsión de balísticos sobre la meseta, lo que representa un peligro significativo para quienes se encuentren en la zona.

Por otro lado. El volcán Santiaguito ha mantenido un alto nivel de actividad explosiva y extrusiva.

• El material acumulado en la cúpula del cráter ha originado avalanchas de bloques y ceniza, especialmente en el flanco suroeste y oeste, llegando a la base del domo Caliente.
• Las explosiones varían en intensidad y desplazan columnas de ceniza hacia el flanco oeste y noroeste, afectando a Loma Linda Palajunoj.
• Durante la noche, es posible observar incandescencia en el cráter y en el flanco oeste del domo.

Por qué importa. Debido a esta actividad, existe el riesgo de flujos piroclásticos de mayor alcance, similares a los de 2022.

• Por lo tanto, se hace un llamado a la población a no acercarse a áreas de los domos, evitar permanecer cerca o dentro de las barrancas cercanas al complejo volcánico y mantener distancia del flujo de lava en el suroeste.
• Las autoridades continúan monitoreando de cerca la situación y emiten recomendaciones para garantizar la seguridad de las comunidades afectadas.