Brasil emitió alerta roja por más tormentas en Río Grande
En medio de la crisis causada por las lluvia, las autoridades intensifican las advertencias. Los ciudadanos enfrentan no solo la pérdida de hogares, sino también el aumento de la inseguridad.
El Instituto Nacional de Meteorología de Brasil (INMET) emitió una alerta roja para Río Grande do Sul, advirtiendo sobre la posibilidad de tormentas severas en el estado, ya azotado por inundaciones que han causado estragos. Según INMET, se esperan precipitaciones que podrían superar los 100 milímetros en 24 horas, acompañadas de vientos de más de 100 km/h y posible caída de granizo. Esta situación podría causar desde cortes de electricidad hasta perturbaciones en el transporte y daños en la infraestructura.
Lo que se debe saber. Esta semana, el gobierno brasileño declaró estado de calamidad en 336 municipios del estado, tras las lluvia que ha marcado niveles históricos, los más altos desde 1941. La crisis se ha intensificado en ciudades como Porto Alegre, donde el agua ha superado los cinco metros, afectando a otras áreas como Canoas y Caxias del Sur.
- La Defensa Civil de Río Grande do Sul reporta que al menos 83 personas han perdido la vida y 111 siguen desaparecidas. Más de 270 individuos han resultado heridos y cerca de 141 mil 300 han sido desplazados de sus hogares. La Fuerza Aérea Brasileña ha desplegado drones para asistir en las labores de búsqueda y rescate de víctimas.
- El impacto de esta catástrofe no solo se refleja en las cifras de muertos y desplazados, sino también en el creciente temor a la criminalidad. Los reportes de saqueos y asesinatos en las zonas más afectadas contribuyen a un clima de incertidumbre y miedo entre los sobrevivientes, complicando aún más los esfuerzos de respuesta y recuperación.
- Mientras tanto, cerca de 800 mil personas en el estado enfrentan una escasez de agua potable, y las pérdidas materiales aún son difíciles de calcular. Con la previsión de más lluvias, el panorama sigue siendo desalentador, y las autoridades instan a la población a tomar medidas de precaución, como desconectar los aparatos eléctricos y mantenerse informados sobre las condiciones meteorológicas.
Brasil emitió alerta roja por más tormentas en Río Grande
En medio de la crisis causada por las lluvia, las autoridades intensifican las advertencias. Los ciudadanos enfrentan no solo la pérdida de hogares, sino también el aumento de la inseguridad.
El Instituto Nacional de Meteorología de Brasil (INMET) emitió una alerta roja para Río Grande do Sul, advirtiendo sobre la posibilidad de tormentas severas en el estado, ya azotado por inundaciones que han causado estragos. Según INMET, se esperan precipitaciones que podrían superar los 100 milímetros en 24 horas, acompañadas de vientos de más de 100 km/h y posible caída de granizo. Esta situación podría causar desde cortes de electricidad hasta perturbaciones en el transporte y daños en la infraestructura.
Lo que se debe saber. Esta semana, el gobierno brasileño declaró estado de calamidad en 336 municipios del estado, tras las lluvia que ha marcado niveles históricos, los más altos desde 1941. La crisis se ha intensificado en ciudades como Porto Alegre, donde el agua ha superado los cinco metros, afectando a otras áreas como Canoas y Caxias del Sur.
- La Defensa Civil de Río Grande do Sul reporta que al menos 83 personas han perdido la vida y 111 siguen desaparecidas. Más de 270 individuos han resultado heridos y cerca de 141 mil 300 han sido desplazados de sus hogares. La Fuerza Aérea Brasileña ha desplegado drones para asistir en las labores de búsqueda y rescate de víctimas.
- El impacto de esta catástrofe no solo se refleja en las cifras de muertos y desplazados, sino también en el creciente temor a la criminalidad. Los reportes de saqueos y asesinatos en las zonas más afectadas contribuyen a un clima de incertidumbre y miedo entre los sobrevivientes, complicando aún más los esfuerzos de respuesta y recuperación.
- Mientras tanto, cerca de 800 mil personas en el estado enfrentan una escasez de agua potable, y las pérdidas materiales aún son difíciles de calcular. Con la previsión de más lluvias, el panorama sigue siendo desalentador, y las autoridades instan a la población a tomar medidas de precaución, como desconectar los aparatos eléctricos y mantenerse informados sobre las condiciones meteorológicas.