En una declaración conjunta, el presidente Joe Biden de Estados Unidos confirmó una acción militar conjunta llevada a cabo en colaboración con el Reino Unido y con el respaldo de Australia, Baréin, Canadá y los Países Bajos, dirigida contra los rebeldes hutíes en Yemen.

Lo que se debe saber. Esta operación se llevó a cabo en respuesta a una serie de ataques sin precedentes por parte de los hutíes que amenazaron la seguridad de las rutas de navegación en el mar Rojo.

• Los rebeldes hutíes lanzaron recientemente un misil balístico con la intención de impactar las rutas de navegación en el Golfo de Adén, una vía crucial para el transporte de petróleo desde el Golfo Pérsico.
• Estos ataques pusieron en peligro al personal estadounidense, a los marines civiles y a los socios internacionales, además de afectar el comercio y la libertad de navegación, según advirtió el presidente Biden.

Qué destacar. La acción militar se llevó a cabo en respuesta al vigésimo séptimo ataque hutí contra buques comerciales en el mar Rojo y el golfo de Adén.

• Más de 50 naciones se han visto afectadas, y tripulaciones de más de 20 países han sido amenazadas o tomadas como rehenes en actos de piratería.
• Además, más de 2,000 barcos han tenido que desviarse considerablemente de su ruta original para evitar el Mar Rojo, lo que ha causado semanas de retrasos en los tiempos de envío de productos.
• Las principales navieras a nivel mundial han tenido que ajustar sus rutas para evitar el Mar Rojo, una vía marítima por la que transita casi el 15% del comercio marítimo global, incluyendo el 8% del comercio mundial de cereales, el 12% del comercio de petróleo y el 8% del comercio mundial de gas natural licuado.

Detalles relevantes. Esta acción militar conjunta busca proteger la seguridad de las rutas de navegación y el libre flujo del comercio internacional en la región.

• El presidente Biden enfatizó que no dudará en tomar medidas adicionales si fuera necesario para garantizar la seguridad de su pueblo y la estabilidad del comercio global.
• Los rebeldes chiíes hutíes, respaldados por Irán, han estado llevando a cabo ataques en el mar Rojo desde noviembre en apoyo a los palestinos de la Franja de Gaza y han alegado que sus objetivos están vinculados a Israel.