Dos autobuses con un centenar de migrantes llegaron a la residencia oficial de la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris el pasado jueves 14 de septiembre.
Las unidades de transporte colectivo fueron fletados por el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, de acuerdo con información de medios locales.
Se precisó que los autobuses recogieron a los migrantes en Eagle Pass, en Texas, y llegaron a las proximidades del Observatorio Naval, en Washington DC, donde se ubica la residencia de la vicepresidenta.
El grupo de migrantes incluye a personas de Venezuela, Uruguay, Colombia y México.
Marisela Castillo Apitz, directora de la ONG Humanitarian Action, que atiende a migrantes, explicó que estaban esperando a los migrantes en las proximidades de la estación de trenes de la capital estadounidense, Union Station, a donde han estado llegando autobuses fletados por Texas con indocumentados en los últimos meses.
"De pronto nos avisaron que estaban aquí, fuera de la casa de la vicepresidenta, muy raro. Ellos dijeron que se sintieron engañados, esas fueron sus palabras, se sintieron parte de un show político. En total eran 101 migrantes, en su mayoría venezolanos", apuntó.
Castillo Apitz afirmó que los migrantes se quedaron "desconcertados y perdidos en estas calles".
Otros traslados
La llegada de estos dos autobuses a la capital de EE. UU. coincide con el envío de medio centenar de migrantes, sobre todo venezolanos, a la exclusiva isla de Martha's Vineyard, en Massachusetts, tras haber sido trasladados en avión desde Texas y Florida.
Los migrantes, entre los que hay también colombianos, llegaron en dos aviones que aterrizaron inesperadamente en el aeropuerto de la isla, lo que obligó a los responsables de gestión de emergencias a movilizarse para darles atención sanitaria, alojamiento y comida.
El gobernador republicano de Florida, Ron DeSantis, se atribuyó el mérito de enviar a los migrantes a Martha's Vineyard.
DeSantis prometió en 2021 gastar US$8 millones para enviar inmigrantes fuera de su estado y mencionaba este lugar como un posible destino.
En abril pasado, Abbott anunció su intención de mandar a indocumentados a Washington DC, en respuesta a la decisión del gobierno de Joe Biden de rescindir una normativa sanitaria que permitía expulsarlos por la pandemia, que no llegó a ponerse en marcha por el bloqueo de los tribunales.
Mientras que en mayo, el gobernador de Arizona, el republicano Doug Ducey, emuló la medida y comenzó a mandar autobuses con migrantes a la capital.
Dos autobuses con un centenar de migrantes llegaron a la residencia oficial de la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris el pasado jueves 14 de septiembre.
Las unidades de transporte colectivo fueron fletados por el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, de acuerdo con información de medios locales.
Se precisó que los autobuses recogieron a los migrantes en Eagle Pass, en Texas, y llegaron a las proximidades del Observatorio Naval, en Washington DC, donde se ubica la residencia de la vicepresidenta.
El grupo de migrantes incluye a personas de Venezuela, Uruguay, Colombia y México.
Marisela Castillo Apitz, directora de la ONG Humanitarian Action, que atiende a migrantes, explicó que estaban esperando a los migrantes en las proximidades de la estación de trenes de la capital estadounidense, Union Station, a donde han estado llegando autobuses fletados por Texas con indocumentados en los últimos meses.
"De pronto nos avisaron que estaban aquí, fuera de la casa de la vicepresidenta, muy raro. Ellos dijeron que se sintieron engañados, esas fueron sus palabras, se sintieron parte de un show político. En total eran 101 migrantes, en su mayoría venezolanos", apuntó.
Castillo Apitz afirmó que los migrantes se quedaron "desconcertados y perdidos en estas calles".
Otros traslados
La llegada de estos dos autobuses a la capital de EE. UU. coincide con el envío de medio centenar de migrantes, sobre todo venezolanos, a la exclusiva isla de Martha's Vineyard, en Massachusetts, tras haber sido trasladados en avión desde Texas y Florida.
Los migrantes, entre los que hay también colombianos, llegaron en dos aviones que aterrizaron inesperadamente en el aeropuerto de la isla, lo que obligó a los responsables de gestión de emergencias a movilizarse para darles atención sanitaria, alojamiento y comida.
El gobernador republicano de Florida, Ron DeSantis, se atribuyó el mérito de enviar a los migrantes a Martha's Vineyard.
DeSantis prometió en 2021 gastar US$8 millones para enviar inmigrantes fuera de su estado y mencionaba este lugar como un posible destino.
En abril pasado, Abbott anunció su intención de mandar a indocumentados a Washington DC, en respuesta a la decisión del gobierno de Joe Biden de rescindir una normativa sanitaria que permitía expulsarlos por la pandemia, que no llegó a ponerse en marcha por el bloqueo de los tribunales.
Mientras que en mayo, el gobernador de Arizona, el republicano Doug Ducey, emuló la medida y comenzó a mandar autobuses con migrantes a la capital.