Un estudio reciente del Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM) reveló la  crisis que enfrentan los educadores en Venezuela. Para mantener a una familia de cinco personas, un docente debe ganar 26 veces su salario actual. La canasta básica alimentaria, que incluye 60 productos esenciales, se ha tasado en 548 dólares, mientras que el ingreso promedio de un maestro es de apenas 21 dólares mensuales.

Lo que se debe saber. Este escenario destaca una brecha enorme entre los ingresos y los costos de vida, donde el sueldo de un profesor apenas cubre el 3,8% de las necesidades alimenticias básicas, dejando un déficit del 96,2%.

• Además, a pesar de una inflación reportada del 1,2% en febrero, la más baja desde agosto de 2012, y una acumulada del 2,9% hasta la misma fecha, el poder adquisitivo sigue siendo insuficiente para enfrentar los crecientes precios de los alimentos.
• El salario mínimo y las pensiones se han congelado desde marzo de 2022 en 130 bolívares, perdiendo valor frente a la subida del dólar, moneda que domina el mercado venezolano.
• Aunque el gobierno de Nicolás Maduro incrementó el denominado ‘bono de guerra económica’ de 30 a 60 dólares y ofrece un bono de alimentación de 40 dólares, estos esfuerzos son insuficientes y no alcanzan a todos los trabajadores públicos.