El
presidente Otto Pérez Molina en un mensaje donde se dirige al pueblo de Guatemala indica que el país nuevamente
se encuentra en un momento difícil. El mandatario reconoce la crisis que atraviesa los tres Poderes del Estado. “El Organismo Judicial se encuentra en un
impase con la designación de los nuevos magistrados, al Organismo Legislativo
se le ha dificultado encontrar acuerdos para temas de interés nacional y el
Ejecutivo, bajo mi responsabilidad, atraviesa por dificultades financieras”. Según analistas, el reconocimiento de Pérez Molina erosiona la institucionalidad porque genera un escenario de incapacidad de las funciones constitucionales de estos tres altos organismos.

Pérez
Molina aseguró que la crisis financiera por la que atraviesa el Ejecutivo “disminuye
la capacidad del Gobierno para dar respuesta a las necesidades más urgentes de
los guatemaltecos”, lo que se agudiza con los desastres naturales que han
afectado a miles de habitantes del país.

Aunque el mandatario reconoce la crisis en su discurso no
plantea una solución concreta, sólo se limita a decir: “Tengo la plena confianza en que saldremos
adelante como siempre lo hemos hecho”.

Lo que sí deja claro es que la mayoría de críticas a su Gobierno son pesimistas y alarmantes al decir que “más allá de las controversias que puede provocar el intenso
debate, la alarmante información, el análisis pesimista y la crítica poco
constructiva, debe prevalecer la convicción democrática y respetar la ley”, enfatiza en su mensaje el Presidente.

Sobre las declaraciones de Pérez Molina,  Luis Linares, de la Asociación de Investigaciones y
Estudios Sociales (ASIES), indica que es importante que se reconozca que hay
una crisis, pero lo que interesa es hacer propuestas que signifiqueN un
cambio de rumbo. Según el analista, se debe actuar en consecuencia del
reconocimiento de la responsabilidad de los funcionarios.