Este martes concluyó la jornada de trabajo entre los mandatarios de Guatemala, El Salvador y Honduras para avanzar en el proyecto del Plan de la Alianza para la Prosperidad. El presidente Otto Pérez Molina anunció que el próximo 16 de marzo los cancilleres de esos países presentarán los lineamientos finales en Washington D.C., Estados Unidos.
El presidente añadió que los gobernantes conocido como Triángulo Norte enfrentan nuevo retos para propiciar el éxito de este plan en las tres naciones. En la jornada participó el vicepresidente de Estados Unidos, Joseph Biden, la vicecanciller de México, Vanessa Rubio Márquez, y el titular del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el colombiano Luis Alberto Moreno.
Los líderes ratificaron la voluntad de avanzar en el plan que pretende generar crecimiento económico, inversiones para la generación de empleos y seguridad en la región centroamericana, así como reducir la migración irregular hacia Estados Unidos.
Los cuatro ejes que conforman el Plan de la Alianza son dinamizar el sector productivo, desarrollar el capital humano, mejorar la seguridad ciudadana y fortalecer las instituciones públicas. La modalidad incluye acciones para promover los sectores estratégicos y la atracción de nuevas inversiones.
Un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) indica que en el área de los tres países en mención, el 24 y 28,7 por ciento de los adultos jóvenes (de 15 a 24 años) no estudian ni trabajan, en tanto que en las demás naciones de Centroamérica ese promedio es de 17 por ciento. Además, el 30 por ciento de los niños menores de cinco años padece desnutrición crónica.
La tasa de homicidios en los tres países oscila entre 39 y 66 muertes violentas por cada 100 mil habitantes. La efectividad de la justicia en Guatemala es del 52,7 por ciento, en El Salvador del 27,3 por ciento, mientras que en Honduras alcanza el 56,4 por ciento, según el informe “Desarrollo Sostenible 2014”.
En las proyecciones del plan se proyecta reducir los costos y mejorar el servicio de energía eléctrico por medio de una acción que incluye duplicar la capacidad del Sistema de Interconexión Eléctrica de los Países de América Central (SIEPAC) y reducir los costos para exportar e introducir sistemas de gas natural para abaratar el servicio.
Este martes concluyó la jornada de trabajo entre los mandatarios de Guatemala, El Salvador y Honduras para avanzar en el proyecto del Plan de la Alianza para la Prosperidad. El presidente Otto Pérez Molina anunció que el próximo 16 de marzo los cancilleres de esos países presentarán los lineamientos finales en Washington D.C., Estados Unidos.
El presidente añadió que los gobernantes conocido como Triángulo Norte enfrentan nuevo retos para propiciar el éxito de este plan en las tres naciones. En la jornada participó el vicepresidente de Estados Unidos, Joseph Biden, la vicecanciller de México, Vanessa Rubio Márquez, y el titular del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el colombiano Luis Alberto Moreno.
Los líderes ratificaron la voluntad de avanzar en el plan que pretende generar crecimiento económico, inversiones para la generación de empleos y seguridad en la región centroamericana, así como reducir la migración irregular hacia Estados Unidos.
Los cuatro ejes que conforman el Plan de la Alianza son dinamizar el sector productivo, desarrollar el capital humano, mejorar la seguridad ciudadana y fortalecer las instituciones públicas. La modalidad incluye acciones para promover los sectores estratégicos y la atracción de nuevas inversiones.
Un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) indica que en el área de los tres países en mención, el 24 y 28,7 por ciento de los adultos jóvenes (de 15 a 24 años) no estudian ni trabajan, en tanto que en las demás naciones de Centroamérica ese promedio es de 17 por ciento. Además, el 30 por ciento de los niños menores de cinco años padece desnutrición crónica.
La tasa de homicidios en los tres países oscila entre 39 y 66 muertes violentas por cada 100 mil habitantes. La efectividad de la justicia en Guatemala es del 52,7 por ciento, en El Salvador del 27,3 por ciento, mientras que en Honduras alcanza el 56,4 por ciento, según el informe “Desarrollo Sostenible 2014”.
En las proyecciones del plan se proyecta reducir los costos y mejorar el servicio de energía eléctrico por medio de una acción que incluye duplicar la capacidad del Sistema de Interconexión Eléctrica de los Países de América Central (SIEPAC) y reducir los costos para exportar e introducir sistemas de gas natural para abaratar el servicio.