A solamente tres días de los comicios, República conversó con el diputado de ARENA, Francisco Lira, proyectado como el posible único diputado de oposición que será electo el 4 de febrero en las elecciones presidenciales y legislativas de El Salvador.

¿Cómo ha sido su experiencia como diputado desde 2021?

Muy  compleja, porque no es la Asamblea Legislativa (AL) que uno conocía anteriormente. No importa que nosotros podamos discutir, plantear y opinar, al final de cuentas, hacen lo que ellos quieren. Mi comisión pasó aproximadamente más de siete meses sin sesionar.  No hay una posición clara para poder plantear las necesidades del pueblo salvadoreño. De 148 iniciativas que hemos presentado en esta legislatura, 25  han sido por tu servidor y ninguna ha sido ni siquiera agendada en comisión para poderla discutir.

Ellos han tomado la AL como que fuera su finca. Solo hay mensajes de odio, de rencor y de fanatismo que, a lo que llevan, es a solo aprobar los proyectos enlatados que vienen de Casa Presidencial (CAPRES). La AL no cumple su rol de poder escuchar a los diferentes partidos políticos que la conforman; al final de cuentas, muchos salvadoreños votaron por nosotros.

¿En estos tres años, ha apoyado el oficialismo alguna iniciativa de las bancadas de oposición? 

Ninguno. Hace más de año y medio yo presenté una iniciativa para solicitarle a la encargada del ministerio de desarrollo explicar por qué se ha retrasado la pensión básica universal para los adultos mayores. Hasta este día no hemos encontrado una explicación. Se ha aprobado el presupuesto y ya lleva más de un año sin que se entregue esa pensión, para aproximadamente 40 mil adultos mayores que viven en situaciones de pobreza y en municipios de escasos recursos. Lo que contestó Junta Directiva a una diputada de oposición es que “todo lo que venga de ustedes no se va a aprobar, porque con nosotros tienen que venir aquí, a nuestra oficina, a plantearse cualquier situación”. Es absurdo.

Nosotros en la oposición nos vemos con una pared. El oficialismo ni siquiera pretende leer la iniciativa que presentamos. Al final de cuentas, no nos hacen el daño a nosotros; le hacen el daño al pueblo salvadoreño. Hay dos clases de salvadoreños: los salvadoreños que tienen acceso a la justicia a través de este partido y los salvadoreños que votaron por ellos, pero que no lo reciben. Somos nosotros los que los recibimos (como oposición) y ellos les cierran la puerta.

La AL anterior no era perfecta, pero se discutía. Ahora no, simplemente vienen proyectos enlatados de CAPRES, se discuten media hora en el pleno y se aprueban utilizando una herramienta legal que se llama dispensa de trámite.

Así aprobaron la circulación como moneda de curso legal del bitcoin, que hasta las mismas encuestas de ellos indican que es la peor política pública de despegue económico que ha tenido este país. Hasta este momento, sólo el 5% aproximadamente utiliza esta moneda y son los mismos que ya la utilizaban con los extranjeros cuando llegaban a las playas de El Salvador.

Esta gente realmente sólo aprieta el botón por apretarlo.

Las encuestas apuntan a que la oposición obtendrá entre tres y un solo diputado, el cuál se proyecta que será usted ¿se puede confiar en esas encuestas? 

Lo que se mira cuando hacemos territorio, en mi departamento de libertad y mis colegas a lo largo y ancho del país, es que la gente tiene mucho temor de exponerse a dar una respuesta en una encuesta. Vemos mucho temor al tema del régimen de excepción. Va a ser la primera votación que vamos a tener con régimen después de la guerra.

Aquí viene una campaña de miedo, de odio y de oscuridad contra nosotros los diputados de oposición. Ellos (Nuevas Ideas) dicen que si pierden un diputado más, nosotros vamos a sacar a los delincuentes de la cárcel.

Hay que tener tres dedos de frente para volver a ese tan trágico episodio de El Salvador. Nosotros no vamos a sacar a ningún delincuente de la cárcel.

Tu servidor fue uno de los tres diputados que dio el voto por el primer régimen de excepción, porque escuchamos el llamado del Ejecutivo, después de que hubo una matanza de más de 80 homicidios en un fin de semana.

Claro, seguimos dándole votos para endurecer las leyes en el tema penal, para que ningún pandillero pueda ver la luz del sol, para que ningún pandillero salga de la cárcel, como para que ahora me vengan a decir que nosotros queremos sacar a los delincuentes.

En lo que sí estoy claro es que este gobierno ha capturado de forma ilegal aproximadamente 15 mil personas, cuyo único pecado es vivir en una comunidad vulnerable o marginal. A ellos es a lo que nos debemos nosotros. Es por eso que alzamos la voz para representarlos. Cuando pregunta el oficialismo que si nosotros como ARENA, si conseguimos mayoría, vamos a sacar a los pandilleros… los que liberan a los pandilleros son estos funcionarios, que negociaron con la sangre de nuestra gente simplemente para tener el poder.

Ellos tienen todo el poder. ¿Por qué no contrarrestaron la delincuencia en sus primeros años? ¿Por qué no lo hicieron? Te digo por qué. Porque tenían una negociación permanente (con las pandillas).

Y esto viene del primer día que tu servidor se sentó en la curul, en el cual destituyeron a los magistrados de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia y colocaron a sus elegidos.

Destituyeron al señor Fiscal General de la República semanas antes de poder dar a conocer el Caso Catedral, que demuestra las negociaciones que tuvo cuando era alcalde de San Salvador para poder llegar al Ejecutivo.

El país no está bien. Hay falta de empleo y de oportunidades; la canasta básica cara; no le han pagado a los familiares de los médicos que murieron por COVID, tomando en cuenta que el presupuesto lo tienen desde hace cinco años; no han construido el hospital Rosales, solo han puesto cuatro primeras piedras. Esa es la encuesta que yo miro, donde han aumentado desde 2019 a esta fecha 170 mil hogares que viven en pobreza con US$ 1.30 diario. La pobreza ha crecido en este país. Aquí no importa que seamos entre 10, 15 o un diputado de oposición, lo importante es que ese diputado siga alzando la voz por todos esos grupos que no están siendo representados y a los que no les están solucionando sus problemas con este gobierno.

Por ellos seguiremos alzando la voz, para que con la libertad y la poca democracia que puede existir después de estas elecciones, podamos construir un buen sistema de partidos políticos. ¿Por qué lo digo? Porque este gobierno se ha encargado de destruir ese sistema y aplastarlo, sin importar que no estén solventando las necesidades del pueblo salvadoreño.

¿Se puede mantener la seguridad en El Salvador sin un régimen de excepción como el de Bukele? 

Sí, lo que debe pasar es una transición del régimen de excepción a un estado de derecho, que pueda haber un sistema de leyes que permita no transgredir los derechos de nuestros ciudadanos. Debe haber una política pública permanente en el tema de seguridad, no simplemente de una forma reactiva como es el régimen de excepción. Estamos claros en que la percepción de seguridad en este país no se puede negar, pero ¿cuánto tiempo vamos a estar con este régimen, vulnerando los derechos del pueblo salvadoreño?

Hay que sentarnos en una mesa, dialogar y buscar puntos de encuentro. Aquí han pasado 15, 20, 22 meses y la gente inocente todavía está presa. Quizás es un negocio para ellos, porque todos los meses reciben paquetes que valen entre US$ 80 y 150 y son más de 70 mil personas. ¿De quién es el negocio? Esa es la pregunta. Creo que sí es importante hacer ese proceso de transición, pero que tenga garantías constitucionales para nuestro pueblo.

¿Cuáles son los próximos pasos para la oposición, a partir del 5 de febrero? 

Independientemente de los resultados que tengamos, se deben recomponer muchas cosas, incluido el partido ARENA. Se deben de recomponer para hacer una propuesta real para las próximas elecciones ¿Por qué? Porque nosotros, como nueva generación, no tenemos culpa de lo que hicieron en el pasado, pero estamos cargando con una campaña sucia que está generando el oficialismo contra nosotros.

Estamos claros en que hay nuevos líderes que debemos representar a nuestro pueblo. Como te digo, sin importar que se gane o se pierda muchos o pocos diputados, el trabajo comenzará para hacer una propuesta real en las próximas elecciones.

Finalmente, si ya se sabe quién va a ganar el domingo ¿por qué deberían de ir a votar los salvadoreños? 

Primero, porque es un derecho que tenemos los salvadoreños para decidir y que no decidan por nosotros. En segundo lugar, los que ya tenemos algunas canitas de más ya vivimos, pero necesitamos un mejor futuro de oportunidades para los hijos, nietos o los hijos en camino. Porque nosotros, bien o mal, vivimos en libertad, pero a partir del 4 de febrero se puede convertir en una dictadura.

Si no hay sorpresas, puede seguir (Bukele) en el Ejecutivo de forma ilegal. Al final de cuentas, los partidos políticos son los medios; los que gobernamos somos las personas. Entonces, ustedes, pueblo salvadoreño, que van a tomar la decisión este 4 de febrero, piensen en su familia y en ese político que los representa. Esta nueva generación de políticos que estamos al frente de esta situación no representamos el pasado de esos funcionarios que utilizaron los votos que ustedes les dieron y actualmente no estamos siendo representados por ellos (Nuevas Ideas), que son peores que “los de siempre”.

Lo que pedimos es hallar puntos de encuentro, en los cuales las necesidades del pueblo no se conviertan en fanatismo, en odio ni en rencor. Yo no le deseo el mal a Nayib Bukele. Yo deseo que a este gobierno le vaya bien, porque Francisco Lira y su familia van a seguir viviendo aquí, no van a salir corriendo. Lo único que pido es que nos sentemos y encontremos ese diálogo, pero sin barreras de odio.

Por eso hay que salir a votar, hay que generar un equilibrio en la AL, para que no sea simplemente una caja de crédito de parte del gobierno central. Que se puedan discutir las propuestas; que no humillen a un representante del pueblo, para poder transparentar los años que este gobierno no ha permitido dar a conocer su proyecto; de descubrir la negociación de pandillas que él (Bukele) tuvo; dar a conocer qué han hecho con tantos millones de dólares que se han aprobado; para devolverle el 25% que este gobierno les quitó de pensiones a usted, que lo iban a ocupar para pagar deudas, un emprendimiento, o simplemente para pagar el tratamiento de una enfermedad.

Por eso, el pueblo de El Salvador tiene que ir a salir a votar, para devolverle la identidad a los municipios, que una manera tan grave y oscura se redujo de 262 a 44; para darle certeza jurídica a todas esas personas que ahorita tienen carta de libertad y siguen presos en las cárceles; para que a los veteranos y excombatientes se le devuelva la pensión que les han quitado y el hospital que les prometieron; para que le den la indemnización que le prometieron a los familiares de esos médicos que murieron en el COVID.

¿Por qué hay que votar? Porque necesitamos devolverle la institucionalidad a este país.

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