El presidente de Guatemala Alejandro Giammattei cuestionó el trabajo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), durante su presentación en la Sesión Protocolar ante el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA).

El mandatario señaló a esta dependencia de la OEA de "extorsión" y "amenaza" tras recibir una comunicación de la CIDH en la cual le indicaron que debía atender a una delegación de esta entidad en calidad de "visita in loco", y que en caso contrario sería "castigado".

"Es una extorsión cuando lo condicionan", comentó Giammattei y agregó que es como decir "sino me invitan lo voy a castigar". Esto es una "amenaza" y es una "extorsión. Estamos en un capítulo donde no nos toca estar", subrayó el Presidente al final de su discurso que tardó más de 40 minutos.

La CIDH es "activista"

Previo a iniciar su discurso ante el Consejo Permanente de la OEA, Giammattei presentó un video enviado por el Congreso de la República por medio del cual señalan diversos intentos de la CIDH por influir en la legislación de Guatemala, según el parecer oficial.

Guatemala fue incluida en el Capítulo IV.b de la CIDH, sección en donde coloca a naciones como Cuba, Venezuela y Nicaragua, señaladas de graves violaciones a los derechos humanos.

Pero según el mandatario guatemalteco, el país no debe estar en esa sección porque los cuestionamiento de la CIDH tienen "sesgos ideológicos" y no toman en cuenta violaciones a los derechos humanos cometidos por los exfucionarios del sistema de justicia, que ahora se dicen perseguidos por motivos políticos.

Indicó que la CIDH pretende que Guatemala ajuste su normativa a movimientos internacionales que Guatemala no ha ratificado y en temas ajenos a decisiones de la mayoría de ciudadanos, como el aborto y el matrimonio entre personas del mismo sexo.

Subrayó a esta institución de actuar como "activista" en estos asuntos.