La inmigración ilegal ha generado una fricción entre el gobierno federal de EE. UU. y el estado de Texas, en un episodio más de una crisis migratoria que se torna insostenible.  

Panorama general. EE. UU. atraviesa, desde hace años, una crisis migratoria sin precedentes. El gobierno del presidente Biden ha sido incapaz de contener el flujo de migrantes en la frontera sur y los estados fronterizos han sufrido las consecuencias. La situación llevó al gobierno de Texas a tomar medidas propias y empezar a detener y deportar a inmigrantes ilegales encontrados en la frontera.  

• La política del gobernador Greg Abbott contra la inmigración ilegal inició en 2021, con la Operación Estrella Solitaria (Operation Lone Star). El estado ha invertido hasta US$ 11 mil millones para desplazar a la Guardia Nacional de Texas a la frontera.  

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• No obstante, las tensiones escalaron en enero cuando Abbott ordenó impedir el paso de los agentes federales (US Customs and Border Protection: CBP) al punto fronterizo de Shelby Park (Eagle Pass).  

• Esto generó un conflicto entre el gobierno federal y el gobierno tejano; la Corte Suprema de Justicia de los EE. UU. (SCOTUS) resolvió a favor de la autoridad estatal, permitiendo a la Guardia Nacional de Texas llevar a cabo detenciones y deportaciones.  

Cómo funciona. Abbott lanzó una nueva ofensiva contra la administración de Biden en diciembre, con la entrada en vigor de la ley estatal conocida como “SB 4”. La misma declara un crimen estatal que cualquier persona que esté sin autorización en EE. UU. cruce hacia Texas fuera de un puerto de entrada designado. La ley convierte el tema migratorio en un asunto de jurisdicción estatal, lo que permite que la policía y jueces locales encarcelen y deporten a los infractores.  

• Abbott aclaró que la medida es una respuesta a lo que considera una negligencia por parte del gobierno federal en cumplir con sus obligaciones.  

• De acuerdo con cifras de CPB, solamente en diciembre de 2023 se registraron hasta 301 mil 982 “encuentros” con migrantes y 241 mil 785 arrestos: la cifra más alta en la historia de EE. UU. 

• Abbott ha invertido hasta US$150 millones en transporte para llevar a migrantes a estados como Nueva York y Chicago, trasladando el problema de la migración a ciudades santuario que apoyan la inmigración, pero no suelen lidiar con los problemas asociados. 

Lo que sigue. La SB 4 está lejos de convertirse en una realidad permanente. La SCOTUS se negó a bloquear la ley como una medida temporal, sin embargo, todavía existen muchas apelaciones que la plantean como inconstitucional. Ni siquiera los jueces más conservadores de la SCOTUS —Amy Coney Barrett y Brett Kavanaugh— fueron contundentes a favor de la ley, afirmando que votaron en contra de bloquearla por un tema procedimental, pero dejaron la puerta abierta a futuros reveses.  

• Posterior a la decisión de la SCOTUS, el Tribunal de Apelaciones del Quinto Circuito de los EE. UU. falló a favor de parar la ley temporalmente, agendando una audiencia para el próximo miércoles, donde se decidirá su futuro.  

• El gobierno mexicano, por su parte, rechazó la autoridad estatal de Texas, afirmando que no recibiría migrantes que no sean deportados por autoridades federales.  

• Expertos en justicia afirman que la SB 4 podría generar una crisis legal, abriendo la puerta para que cada estado decida su ley migratoria y generando un conflicto mayor con el gobierno federal. 

Por qué importa. El año fiscal 2023 se convirtió en el año con más encuentros con migrantes en la historia de EE. UU., con hasta 2.47 millones de encuentros. Son tres años seguidos rompiendo récord, con 1.73 millones en 2021 y 2.37 millones en 2022. Desde octubre de 2020 hasta la fecha se han reportado 8.10 millones de encuentros con migrantes, cifras mayores a la población total de El Salvador o casi la mitad de la población de Guatemala.  

• La crisis se ha exacerbado a raíz de las rutas facilitadas por países centroamericanos, como Nicaragua y El Salvador. Se ha facilitado el tránsito a migrantes provenientes de países como Venezuela, Cuba, Colombia, Ecuador, Haití, además de países africanos y asiáticos, que han superado a Centroamérica en la lista de países de origen de los migrantes.

• El precedente de desobediencia estatal, debido a la percepción de negligencia por parte del gobierno federal, es solamente un reflejo de las tensiones provocadas por una administración cuyas políticas ideológicas contradicen el interés nacional.

• La laxitud de la política migratoria de Biden puede generar una respuesta aún más agresiva por parte de los próximos gobiernos, que heredarán una crisis demográfica casi imposible de revertir.