La victoria de Bernardo Arévalo no solo supone un cambio de política doméstica, sino también en la exterior. La relación con EE. UU., Taiwán e Israel son las grandes incógnitas del nuevo gobierno.

Panorama general. Desde el domingo 20 de agosto, el futuro de las relaciones diplomáticas de Guatemala ha sido motivo de controversia e incertidumbre. Los aliados históricos del país centroamericano, aunque no han activado el botón de pánico, esperan con preocupación.

• Las relaciones con EE. UU., Israel y Taiwán serán los grandes desafíos de un Arévalo; en con respecto a los últimos dos, ha sido ambiguo en sus declaraciones.

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En el radar (I). Los vínculos de Bernardo Arévalo con Israel son un indicador, a simple vista, engañoso. Mientras que el presidente electo estudió y vivió muchos años en el aquel país, no ha sido capaz de expresar su apoyo claro, a nivel político.

• Como diputado, Arévalo se reunió con el embajador de Palestina en Guatemala en marzo de 2022, expresando en su cuenta de X: "El pueblo de Guatemala es amigo de los pueblos israelí y palestino (...) El traslado de nuestra embajada a Jerusalén violó el derecho internacional".

• De igual manera, ha declarado: "soy proisraelí, soy pro-palestino y soy pro-cualquier pueblo que está luchando por el derecho a vivir en paz (...) Los habitantes del Estado de Israel y de Palestina tienen el derecho a tener una vida libre de amenazas y vivir en paz en su Estado y su territorio".

• La falta de pronunciamiento de Arévalo, en su calidad de presidente electo, sobre los ataques terroristas de Hamas en Israel, ahora suman interrogantes a sus ambiguas posturas con respecto al añejo conflicto; preocupa su falta de apoyo a un aliado histórico de Guatemala, como Israel.

En el radar (II). En cuanto a Taiwán, es normal que en Taipéi se preocupen por el cambio de gobierno, puesto que Arévalo no ha sido capaz de desestimar un acercamiento con China. Guatemala y Belice son los únicos países de Centroamérica que mantienen su reconocimiento a Taiwán, tras la decisión del gobierno hondureño de formalizar sus relaciones diplomáticas con China a finales de marzo.

• La inclusión de China como observador al PARLACEN supuso un nuevo asedio contra Taiwán en la región. Tras la victoria de Arévalo, el Ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Wenbin, declaró que "desarrollar las relaciones con China es lo que sirve a los intereses fundamentales de Guatemala y lo que quiere el pueblo guatemalteco".

• Al felicitar a Arévalo por su victoria, la Cancillería de Taiwán declaró que: "Taiwán apunta con entusiasmo a la continuación de la cooperación con nuestro aliado democrático en beneficio de ambos pueblos".

• No obstante, Arévalo indicó a República que "cuando hacen la pregunta de China o Taiwán, la respuesta es: los dos. Lo que tenemos que hacer es continuar un marco de relaciones en ambos sentidos", una postura que no se sostiene a nivel diplomático.

Por qué importa. Finalmente, mientras que las relaciones con EE. UU., se mantendrán, no hay certeza sobre qué tan amistosa será, especialmente con los cambios que pueda haber en la nación norteamericana después de las elecciones presidenciales de 2024. De cualquier manera, la relación se verá condicionada por las posturas del gobierno de Arévalo para con Israel y Taiwán.

• A pesar de haber una buena relación con la administración Biden, la política exterior con un hipotético gobierno republicano se verá condicionada al compromiso de Guatemala en frenar la migración hacia EE. UU.

• Adicionalmente, un acercamiento con China y un posible regreso de la embajada guatemalteca a Tel Aviv, podría generar tensiones fuertes entre Guatemala y EE. UU.

• Guatemala no sería el primer país centroamericano en distanciarse de EE. UU., como ya lo han hecho Nicaragua y, más recientemente, El Salvador. Sin embargo, dicha postura sería perjudicial para Guatemala a nivel geopolítico y le obligaría a acudir a China como principal aliado.

El balance. La falta de contundencia de Arévalo parece ser una estrategia efectiva, puesto que le convierte en un actor clave para los países que busquen su apoyo. No hacer evidente su postura le brinda una posición de ventaja a la hora de negociar las alianzas de su futuro gobierno.

• No obstante, esta estrategia solo funciona previo a su toma de posesión. Una vez asumidas sus funciones, deberá tomar una postura clara en cuanto a estas relaciones clave.

• Una postura diplomática con Taiwán, mientras se busca fortalecer las relaciones comerciales con China, no se sostiene a largo plazo, puesto que Pekín suele condicionar esas alianzas a retirar el reconocimiento de Taiwán, como ya ha pasado en el resto de los países de la región.

• Finalmente, Israel ha sido un aliado clave de Guatemala desde su reconocimiento durante el gobierno de Juán José Arévalo —padre de Bernardo—, especialmente para su industria militar. La falta de apoyo de parte de Arévalo hacia Israel es una movida que enciende las alarmas, tanto en Jerusalén como en EE. UU.