Hace 7 meses, previo a su juramento como Presidente Constitucional de Guatemala, Bernardo Arévalo aseguró que al tomar posesión del cargo reduciría su salario. De hecho, hay videos en redes sociales que evidencian su promesa.   

• “La presidencia se reducirá el salario y también realizará una revisión de los salarios públicos”, afirmó durante una conferencia de prensa que se realizó días antes de la segunda vuelta electoral del 25 de agosto de 2023.   
• “Me lo preguntaron, lo dije y lo vamos a hacer. El día que yo tomé posesión como Presidente de la República, el salario presidencial bajará”, agregó Arévalo en esa actividad en la que también se encontraba el diputado Samuel Pérez.   
• La emisora Nuevo Mundo publicó en YouTube, el 23 de junio, la promesa del gobernante. También durante la emisión del 23 de agosto del Noticiero Guatevisión, se habló del tema. “Yo voy a reducir mi salario, eso es un hecho, ya lo anuncié”, indicó al ser cuestionado por los presentadores.   
• En perspectiva. A un mes de estar al frente del Organismo Ejecutivo, Arévalo aún no ha cumplido su promesa de campaña. Todo apunta a que el monto salarial que recibió en enero, fue igual al pagado a su antecesor Alejandro Giammattei cuando inició su gestión en 2020.   
• Para corroborar este punto se consultó el apartado de Información Pública de Oficio de la Secretaría de Asuntos Administrativos y de Seguridad de la Presidencia, sin embargo, el documento no está disponible. Luego de una búsqueda meticulosa se obtuvo acceso a un archivo del 11 de mayo de 2023.   
• En el documento se hace constar que en aquel momento el presidente recibió Q33,588.00 de sueldo base, Q250.00 de bonificación y Q115,000.00 de gastos de representación. Estas cifras según publicaciones de otros medios como Prensa Libre no variaron hasta diciembre de 2023.   

Qué destacar. El 29 de enero de 2024 el gobernante ofreció una conferencia de prensa luego de su reunión con el Gabinete y la fiscal general Consuelo Porras. En aquel momento, se le cuestionó sobre los avances en el tema de la reducción de su salario.   

• “Lo que sucede en realidad es que tenemos que hacer un estudio del conjunto de salarios de altos ejecutivos del Estado para saber cuál es la ruta más adecuada. Este es un tema que estará tomando poco tiempo y dentro de poco haremos el anuncio oficial. No se preocupe, el salario presidencial va a ser reducido”, respondió Arévalo.   

Lo que sigue. A partir de entonces, se dio seguimiento al tema. El 6 de febrero se solicitó una entrevista con el Secretario General de la Presidencia, Juan Gerardo Guerrero y con el actual titular del Ministerio de Finanzas Publicas, Jonathan Menkos.   

• El objetivo de la conversación era conocer cómo se hace un aumento o una disminución salarial de un funcionario de Estado y para corroborar si el mandatario ya había iniciado el proceso. Pero hasta este 14 de febrero no hubo una respuesta a la solicitud.   
• También se solicitó información relacionada a la Oficina Nacional de Servicio Civil. Ahí se dijo que la Secretaría de Asuntos Administrativos y de Seguridad de la Presidencia de la República es la responsable del tema. 

En conclusión. Esto demuestra que el gobierno de Arévalo continúa con la burocracia de administraciones anteriores de no dar información de manera eficaz. Además, parece que al gobernante se le olvidó que los ojos de la ciudadanía están puestos en sus promesas. 

Ahora solo el tiempo dirá si su promesa de reducir su salario se cumplirá o solo se mantendrá en un discurso más de cualquier político populista que busca ganarse la voluntad de los votantes.