Solo aparecen como xx en los registros oficiales, pero cada vez es menor el número de personas fallecidas que no se pueden identificar
Por: Oscar Mijangos
En 2008 fueron inhumadas 829 personas sin que se supiera su identidad. Pasaron a formar parte de las estadísticas y solo las XX los identifican. ¿Quiénes eran?, ¿sus familiares los siguen buscando?
Preguntas difíciles de responder, pero por los avances de la tecnología y modernización del sistema forense de Guatemala, cada vez es menos la incertidumbre.
De 829 en 2008, la cifra se redujo a 203 en 2017 y a septiembre de 2018 el número de inhumados como XX es de 159 personas, según el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif).
En el caso de la capital, los fallecidos no identificados son sepultados en el Cementerio La Verberna, ubicado en la zona 7.
Fotografía de: Carmen Yela. Facebook
En busca de los XX
Al llegar a la sede del Inacif, en la zona 3 capitalina, se observa un portón con barrotes un poco oxidados, que permite observar parte del movimiento del personal.
Lo primero que miré fue un hombre de uno 38 años, abrazado a otra persona, en consolación por la pérdida de su hijo. “Los hijos deben enterrarnos, no nosotros a ellos”, dijo el padre doliente.
En la entrada principal de la morgue hay una garita, donde dos policías y personal de la institución, preguntan la gestión que se pretende realizar. Conforme el trámite, permiten o niegan el ingreso.
Al momento de preguntar por los documentos necesarios para identificar a una persona XX, no hubo mayor respuesta, porque solo dan información a parientes cercanos de quien se busca.
Mientras tanto, afuera de la morgue del Inacif se encuentran personas en espera de respuestas y otros dando tiempo para recibir el cuerpo del pariente o amigo. Los rostros acá nos recuerdan dónde estamos. Solo se observa tristeza, dolor, angustia y miradas perdidas.
Unos pasos más luego de la garita se encuentra el mercado de flores. Se ve todo tipo de arreglos, coronas, cruces y otros artículos para poner en la velación o tumba del ser querido.
Al otro lado de la calle se encuentran las funerarias, donde observé a varias personas ingresar para contratar los servicios o solo a comprar la caja funeraria donde quedará para siempre el cuerpo del familiar que se adelantó en el viaje sin retorno.
Se siente el cambio de ambiente porque el comportamiento de las personas es un poco más sereno, aunque el dolor sigue presente. Se encuentran sentadas en la banqueta, recostadas en la pared o de pie. Pocas son las que están hablando porque la mayoría se encuentra en total silencio.
El proceso en el Inacif
Luego que una persona fallece sin importar el lugar del suceso, es trasladado a las instalaciones del Inacif para determinar la causa de la muerte.
Los cuerpos que ingresan sin identificación o que no son reclamados por familiares, permanecen en los cuartos fríos de la morgue durante 10 días. Luego de este lapso de tiempo son inhumados como XX y son enterrados en el cementerio La Verbena, zona 7.
En los últimos años la cifras de fallecidos sin identificar se redujo un 75 por ciento porque el proceso de identificación es más efectivo.
Documentos requeridos para identificar a una persona
- DPI original del familiar o persona que reclama el cuerpo del fallecido (para identificar a personas adultas, menores de edad y neonatos nacidos muertos).
- DPI del fallecido (si el fallecido no tramitó DPI se deberá presentar Certificación de Asiento de Cédula o Certificado de Nacimiento).
- Certificado de Nacimiento de la persona fallecida (si lo hubiere, en persona menor de edad).
- Indicar y acreditar parentesco de la persona que reclama el cuerpo del fallecido (para identificar personas adultas, menores de edad y neonatos nacidos muertos).
- Entrevista técnica al familiar o persona reclamante del cuerpo del fallecido ( para identificar personas adultas, menores de edad, neonatos nacidos muertos y es necesario disponibilidad de tiempo).
Las personas que van a reconocer a una persona ya inhumada como XX, se apoyan en fotografías forenses, para determinar si la persona ya se encuentra en el Cementerio La Verbena.
Parte de tecnología y trabajo de INACIF
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Fotografía de: Carmen Yela. Facebook
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En la entrada principal de la morgue hay una garita, donde dos policías y personal de la institución, preguntan la gestión que se pretende realizar. Conforme el trámite, permiten o niegan el ingreso.
Al momento de preguntar por los documentos necesarios para identificar a una persona XX, no hubo mayor respuesta, porque solo dan información a parientes cercanos de quien se busca.
Mientras tanto, afuera de la morgue del Inacif se encuentran personas en espera de respuestas y otros dando tiempo para recibir el cuerpo del pariente o amigo. Los rostros acá nos recuerdan dónde estamos. Solo se observa tristeza, dolor, angustia y miradas perdidas.
Unos pasos más luego de la garita se encuentra el mercado de flores. Se ve todo tipo de arreglos, coronas, cruces y otros artículos para poner en la velación o tumba del ser querido.
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Se siente el cambio de ambiente porque el comportamiento de las personas es un poco más sereno, aunque el dolor sigue presente. Se encuentran sentadas en la banqueta, recostadas en la pared o de pie. Pocas son las que están hablando porque la mayoría se encuentra en total silencio.
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En los últimos años la cifras de fallecidos sin identificar se redujo un 75 por ciento porque el proceso de identificación es más efectivo.
Documentos requeridos para identificar a una persona
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- DPI del fallecido (si el fallecido no tramitó DPI se deberá presentar Certificación de Asiento de Cédula o Certificado de Nacimiento).
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- Indicar y acreditar parentesco de la persona que reclama el cuerpo del fallecido (para identificar personas adultas, menores de edad y neonatos nacidos muertos).
- Entrevista técnica al familiar o persona reclamante del cuerpo del fallecido ( para identificar personas adultas, menores de edad, neonatos nacidos muertos y es necesario disponibilidad de tiempo).
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