Para inyectarlo, mezcle jugo de piña, vino blanco y especias, para potenciar su sabor. Los jugos de piña o naranja lo harán más jugoso. Aunque esté inyectado, conviene marinarlo una noche antes de ser cocinado. Se busca un buen sabor, pero además que esté jugoso y agradablemente dorado.
Para marinarlo, mezcle mostaza, curry, salsa inglesa, entre otros y bañe con vino o cerveza o jugo de naranja mientras se marina; es conveniente, también bañarlo durante su cocción. Hornee inicialmente tapado y destape durante la útlima etapa para que dore. Para un mejor resultado, adicione miel o mantequilla que puede ser con ajo.
Asimismo, podrá rellenarse con preparaciones de carne molida o pan; pero puede utilizar arroz integral con vegetales o puré de papa o quinoa con zanahoria, puerro y apio como otras opciones. Recuerde, el relleno deberá estar siempre cocinado antes de colocarlo dentro del pavo. Se llena el cuello y el cuerpo, no completamente, porque durante la cocción éste podría expandirse y salirse. Se cose con hilo o se cierra con palillos y se sujetan las patas para que luzcan bien.
Envuelva los muñones de las piernas y la punta de las alas con papel de aluminio a fin de evitar que se doren demasiado. Cocine el pavo hasta que los jugos salgan claros o utilice un termómetro y llegue a 165° Fahrenheit y cuando introduzca el cuchillo, comprobar que los jugos sean claros, para prevenir el riesgo de una intoxicación causada por no cocinar bien la carne.
Utilice una pavera, aunque una bolsa para hornear reduce el tiempo de su cocción y guarda muy bien sus jugos. El tiempo aproximado de cocción es de 20 a 30 minutos por cada libra y se hornea a 375° F en un horno precalentado
El gravy o salsa se elabora con los jugos que suelta el ave, en combinación con los menudos cocinados con vino, todo licuado, colado y posteriormente cocinado.
Al estar listo el pavo se dejará reposar por 15 minutos, se procederá a trinchar, servir con el relleno al lado y ¡a disfrutar!
Para inyectarlo, mezcle jugo de piña, vino blanco y especias, para potenciar su sabor. Los jugos de piña o naranja lo harán más jugoso. Aunque esté inyectado, conviene marinarlo una noche antes de ser cocinado. Se busca un buen sabor, pero además que esté jugoso y agradablemente dorado.
Para marinarlo, mezcle mostaza, curry, salsa inglesa, entre otros y bañe con vino o cerveza o jugo de naranja mientras se marina; es conveniente, también bañarlo durante su cocción. Hornee inicialmente tapado y destape durante la útlima etapa para que dore. Para un mejor resultado, adicione miel o mantequilla que puede ser con ajo.
Asimismo, podrá rellenarse con preparaciones de carne molida o pan; pero puede utilizar arroz integral con vegetales o puré de papa o quinoa con zanahoria, puerro y apio como otras opciones. Recuerde, el relleno deberá estar siempre cocinado antes de colocarlo dentro del pavo. Se llena el cuello y el cuerpo, no completamente, porque durante la cocción éste podría expandirse y salirse. Se cose con hilo o se cierra con palillos y se sujetan las patas para que luzcan bien.
Envuelva los muñones de las piernas y la punta de las alas con papel de aluminio a fin de evitar que se doren demasiado. Cocine el pavo hasta que los jugos salgan claros o utilice un termómetro y llegue a 165° Fahrenheit y cuando introduzca el cuchillo, comprobar que los jugos sean claros, para prevenir el riesgo de una intoxicación causada por no cocinar bien la carne.
Utilice una pavera, aunque una bolsa para hornear reduce el tiempo de su cocción y guarda muy bien sus jugos. El tiempo aproximado de cocción es de 20 a 30 minutos por cada libra y se hornea a 375° F en un horno precalentado
El gravy o salsa se elabora con los jugos que suelta el ave, en combinación con los menudos cocinados con vino, todo licuado, colado y posteriormente cocinado.
Al estar listo el pavo se dejará reposar por 15 minutos, se procederá a trinchar, servir con el relleno al lado y ¡a disfrutar!