Entre los muchos problemas que padece nuestro país, uno de los que más hadado de que hablar últimamente es el problema de la migración. Las oleadas demigrantes que van a Estados Unidos, no sólo desde Guatemala, sino desde lamayoría de los países centroamericanos, son un problema que debe resolversebuscando cuál es la causa principal del asunto. Las políticas de ayuda temporalpara migrantes, ofrecimientos de ayuda para familias del área rural, o bloquearfronteras, no son soluciones que vayan a frenar las migraciones en el largoplazo.
Cuando nos preguntamos la razón por la cuál la mayoría de las personasdeciden dejar nuestro país, la respuesta más común es simple: aquí no existenoportunidades de desarrollo, no hay trabajo, no hay seguridad o no funcionanlos servicios de salud o educación pública. En gran medida esto significa enque en Guatemala no estamos creando las condiciones necesarias para generarriqueza, así como incentivos para atraer la inversión. Al final, el problema sereduce a que en Guatemala el marco institucional público no presta lascondiciones necesarias para que, por medio de los intercambios libres, se genereriqueza, se atraiga la inversión y, en consecuencia, se logre generar progresoy desarrollo.
Nuestras instituciones públicas se debilitan cada día más, haciendo másevidente la falta de seguridad jurídica en la que vivimos, así como la falta decapacidad que tenemos como Estado de resolver eficientemente nuestrasdiferencias sociales. Por tal razón, para iniciar a solucionar nuestrosproblemas de fondo, uno de los principales aspectos que debemos priorizar es latransformación del estado, asegurando que esta institucionalidad pueda proveerlas condiciones mínimas para que las inversiones puedan desarrollarse de formanormal conforme al mercado, creando así oportunidades de trabajo y generando deriqueza.
Esto quiere decir que, si quisiéramos atender nuestros problemas depobreza, cosa que frenaría la migraciónexcesiva, debemos generar una solución integral. Para esto, es necesario quetodas las personas que estén interesadas en resolver esta situación, unifiquenesfuerzos y logre reformar la estructura y organización del Estado. Esto pasapor ajustar de manera profunda las instituciones del gobierno, garantizando asíla prestación de servicios públicos mínimos, como lo son seguridad, salud,justicia y educación.
El próximo año las nuevas autoridades que tomarán posesión tienen unaoportunidad única para avanzar en este aspecto. Pueden desde el principio de sugestión generar una estrategia integral de reformas a la institucionalidad delEstado que permita un desarrollo económico alto y sostenido, creando asíoportunidades para todos los ciudadanos y desincentivando en consecuencia,moverse de nuestro país a otro, en busca de una mejor calidad de vida.
Entre los muchos problemas que padece nuestro país, uno de los que más hadado de que hablar últimamente es el problema de la migración. Las oleadas demigrantes que van a Estados Unidos, no sólo desde Guatemala, sino desde lamayoría de los países centroamericanos, son un problema que debe resolversebuscando cuál es la causa principal del asunto. Las políticas de ayuda temporalpara migrantes, ofrecimientos de ayuda para familias del área rural, o bloquearfronteras, no son soluciones que vayan a frenar las migraciones en el largoplazo.
Cuando nos preguntamos la razón por la cuál la mayoría de las personasdeciden dejar nuestro país, la respuesta más común es simple: aquí no existenoportunidades de desarrollo, no hay trabajo, no hay seguridad o no funcionanlos servicios de salud o educación pública. En gran medida esto significa enque en Guatemala no estamos creando las condiciones necesarias para generarriqueza, así como incentivos para atraer la inversión. Al final, el problema sereduce a que en Guatemala el marco institucional público no presta lascondiciones necesarias para que, por medio de los intercambios libres, se genereriqueza, se atraiga la inversión y, en consecuencia, se logre generar progresoy desarrollo.
Nuestras instituciones públicas se debilitan cada día más, haciendo másevidente la falta de seguridad jurídica en la que vivimos, así como la falta decapacidad que tenemos como Estado de resolver eficientemente nuestrasdiferencias sociales. Por tal razón, para iniciar a solucionar nuestrosproblemas de fondo, uno de los principales aspectos que debemos priorizar es latransformación del estado, asegurando que esta institucionalidad pueda proveerlas condiciones mínimas para que las inversiones puedan desarrollarse de formanormal conforme al mercado, creando así oportunidades de trabajo y generando deriqueza.
Esto quiere decir que, si quisiéramos atender nuestros problemas depobreza, cosa que frenaría la migraciónexcesiva, debemos generar una solución integral. Para esto, es necesario quetodas las personas que estén interesadas en resolver esta situación, unifiquenesfuerzos y logre reformar la estructura y organización del Estado. Esto pasapor ajustar de manera profunda las instituciones del gobierno, garantizando asíla prestación de servicios públicos mínimos, como lo son seguridad, salud,justicia y educación.
El próximo año las nuevas autoridades que tomarán posesión tienen unaoportunidad única para avanzar en este aspecto. Pueden desde el principio de sugestión generar una estrategia integral de reformas a la institucionalidad delEstado que permita un desarrollo económico alto y sostenido, creando asíoportunidades para todos los ciudadanos y desincentivando en consecuencia,moverse de nuestro país a otro, en busca de una mejor calidad de vida.