Política
Política
Empresa
Empresa
Investigación y Análisis
Investigación y Análisis
Internacional
Internacional
Opinión
Opinión
Inmobiliaria
Inmobiliaria
Agenda Empresarial
Agenda Empresarial

La carreta frente al caballo

Al final del día, todo es política, que se traduce en compadrazgo, robo, corrupción, tráfico de influencias, privilegios, compadrazgos y, sobre todo, compromisos adquiridos. 

.
Carolina Castellanos |
16 de junio, 2023

Los candidatos a la presidencia están tan ansiosos y desesperados por ganar las elecciones que se les “olvida” que todo tiene un orden lógico y eficiente. Por ejemplo, usted arranca su carro antes de intentar moverlo. Por supuesto que está la opción de empujarlo, pero esto es totalmente ineficiente. Eventualmente llegará a su destino, pero cansado, sudando y sin energías para realizar su trabajo.

Lo mismo sucede con las ofertas electorales. Una de ellas dice que creará una oficina de ética gubernamental con el objetivo de supervisar el comportamiento de los funcionarios del gobierno. Me parece que primero hay que contratar a personas con una trayectoria de ética y honorabilidad. Segundo, reducir drásticamente la burocracia, no darle tanto poder a cada funcionario y automatizar tramitología para eliminar de tajo la discrecionalidad. 

Otra oferta es la meritocracia. La Real Academia Española la define como “sistema de gobierno en que los puestos de responsabilidad se adjudican en función de los méritos personales”. Para ello debe existir una descripción de puestos para así poder definir a quienes se apegan más a esta descripción. Adicionalmente, tiene que haber un sistema de evaluación del desempeño, para poder comprobar y supervisar que los funcionarios sí tienen los méritos requeridos, una vez expuestos a todos los retos del puesto adjudicado.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER

Hay un candidato que ofrece darle tablets a los estudiantes. Empecemos por el principio: las escuelas deben tener internet y los estudiantes deben tener enchufes de energía eléctrica en su casa para poder cargarla. Por otro lado, ¿de qué les servirá la tablet si no tienen idea de cómo acceder a la información? Es más, el nivel de lecto-escritura en la generalidad de los estudiantes de las escuelas públicas es muy bajo, de acuerdo a estudios efectuados a lo largo de los años. 

Hay candidatos ofreciendo trabajo. Esto es bien popular entre ellos. Para lograr esto, es imprescindible reducir la tramitología para iniciar una empresa formal. También deben reducir la cantidad de impuestos directos, indirectos, específicos y generales, para que los empresarios tengamos más posibilidades de invertir y generar más empleos. El trabajo informal es la mayoría, pero no paga impuestos, dejando esa carga al resto de nosotros los “formales”. 

El otro favorito es la salud. ¿Quieren ciudadanos saludables, productivos, y que aporten a la sociedad? Den un enorme paso hacia atrás y enfóquense en reducir drásticamente la desnutrición. Hay una ventana de tan solo cinco años para nutrir a los niños. Después de eso, es muy limitado lo que pueden lograr hacer estas personas. Por otro lado, el sistema de salud pública es más que nefasto. El robo y la corrupción dominan la gestión, desde un puesto de salud hasta los grandes hospitales, desabastecidos, sucios y desordenados.

Los sindicatos en el Estado han causado un daño enorme. No se les puede despedir si hacen un mal trabajo, roban o extorsionan. Exigen incrementos salariales sin la intención de mejorar sus servicios. Los afectados somos los que les pagamos sus salarios con nuestros impuestos. ¿Algún candidato ha mencionado esto en sus mítines? Por supuesto que no pues perderían una importante cantidad de votos.

Al final del día, todo es política, que se traduce en compadrazgo, robo, corrupción, tráfico de influencias, privilegios, compadrazgos y, sobre todo, compromisos adquiridos.

Todo ello resulta siendo la carreta frente al caballo. Es imposible moverla hacia un mejor destino para todos.

La carreta frente al caballo

Al final del día, todo es política, que se traduce en compadrazgo, robo, corrupción, tráfico de influencias, privilegios, compadrazgos y, sobre todo, compromisos adquiridos. 

Carolina Castellanos |
16 de junio, 2023
.

Los candidatos a la presidencia están tan ansiosos y desesperados por ganar las elecciones que se les “olvida” que todo tiene un orden lógico y eficiente. Por ejemplo, usted arranca su carro antes de intentar moverlo. Por supuesto que está la opción de empujarlo, pero esto es totalmente ineficiente. Eventualmente llegará a su destino, pero cansado, sudando y sin energías para realizar su trabajo.

Lo mismo sucede con las ofertas electorales. Una de ellas dice que creará una oficina de ética gubernamental con el objetivo de supervisar el comportamiento de los funcionarios del gobierno. Me parece que primero hay que contratar a personas con una trayectoria de ética y honorabilidad. Segundo, reducir drásticamente la burocracia, no darle tanto poder a cada funcionario y automatizar tramitología para eliminar de tajo la discrecionalidad. 

Otra oferta es la meritocracia. La Real Academia Española la define como “sistema de gobierno en que los puestos de responsabilidad se adjudican en función de los méritos personales”. Para ello debe existir una descripción de puestos para así poder definir a quienes se apegan más a esta descripción. Adicionalmente, tiene que haber un sistema de evaluación del desempeño, para poder comprobar y supervisar que los funcionarios sí tienen los méritos requeridos, una vez expuestos a todos los retos del puesto adjudicado.

SUSCRIBITE A NUESTRO NEWSLETTER

Hay un candidato que ofrece darle tablets a los estudiantes. Empecemos por el principio: las escuelas deben tener internet y los estudiantes deben tener enchufes de energía eléctrica en su casa para poder cargarla. Por otro lado, ¿de qué les servirá la tablet si no tienen idea de cómo acceder a la información? Es más, el nivel de lecto-escritura en la generalidad de los estudiantes de las escuelas públicas es muy bajo, de acuerdo a estudios efectuados a lo largo de los años. 

Hay candidatos ofreciendo trabajo. Esto es bien popular entre ellos. Para lograr esto, es imprescindible reducir la tramitología para iniciar una empresa formal. También deben reducir la cantidad de impuestos directos, indirectos, específicos y generales, para que los empresarios tengamos más posibilidades de invertir y generar más empleos. El trabajo informal es la mayoría, pero no paga impuestos, dejando esa carga al resto de nosotros los “formales”. 

El otro favorito es la salud. ¿Quieren ciudadanos saludables, productivos, y que aporten a la sociedad? Den un enorme paso hacia atrás y enfóquense en reducir drásticamente la desnutrición. Hay una ventana de tan solo cinco años para nutrir a los niños. Después de eso, es muy limitado lo que pueden lograr hacer estas personas. Por otro lado, el sistema de salud pública es más que nefasto. El robo y la corrupción dominan la gestión, desde un puesto de salud hasta los grandes hospitales, desabastecidos, sucios y desordenados.

Los sindicatos en el Estado han causado un daño enorme. No se les puede despedir si hacen un mal trabajo, roban o extorsionan. Exigen incrementos salariales sin la intención de mejorar sus servicios. Los afectados somos los que les pagamos sus salarios con nuestros impuestos. ¿Algún candidato ha mencionado esto en sus mítines? Por supuesto que no pues perderían una importante cantidad de votos.

Al final del día, todo es política, que se traduce en compadrazgo, robo, corrupción, tráfico de influencias, privilegios, compadrazgos y, sobre todo, compromisos adquiridos.

Todo ello resulta siendo la carreta frente al caballo. Es imposible moverla hacia un mejor destino para todos.