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Profesionalizar la sucesión

También hemos visto que al final la mejor alternativa es vender la empresa porque ninguno de los posibles sucesores mostró vocación para asumir el liderazgo. Es mejor estar abierto a todas las posibilidades y no casarnos con ninguna.

sucesión
Carlos Dumois |
23 de septiembre, 2022

¿Quién me ayuda a orquestar la sucesión?

Una forma efectiva de transferir la gestión de la Dueñez a la siguiente generación es efectuarla con el apoyo de profesionales. En la mayoría de las familias empresarias nos preguntamos si es viable que los sucesores sean capaces de continuar con la empresa.

El fundador o empresario líder siempre estará tentado a elegir él solo al sucesor y trabajar con él hasta el momento de su retiro. Otros prefieren continuar al mando hasta que la salud o la muerte les impida seguir, dejando abandonado el proceso sucesorio Estas no son precisamente las mejores maneras de gestionar la sucesión.

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Por otro lado, a la hora de tomar decisiones en este terreno tenemos muchas variables a tomar en cuenta: la querencia de los socios, sus necesidades y expectativas económicas, el potencial de creación de valor de los negocios y sus perspectivas a futuro, la cercanía de otras alternativas como vender o salir a bolsa, la existencia de líderes interesados en la siguiente generación, la posibilidad de construir un camino de gobernabilidad entre ellos, etc.

La realidad es que la sucesión en las empresas familiares suele ser tan compleja que lo más recomendable es contar con apoyos profesionales durante todo el proceso. Mejor aún si éstos son externos a la organización y a la familia. Si queremos trabajar seriamente en el proceso sucesorio primero debemos preguntarnos cuáles son los ámbitos en los que podemos contar con la asistencia de profesionales.

Son diversas las áreas donde hay espacio para el apoyo de expertos. Necesitamos psicólogos, evaluadores, coaches, especialistas en formación, pedagogos y otros. Claro que podemos hacerlo todo empíricamente, pero tomemos en cuenta que los conocimientos, herramientas y metodologías que tienen estos profesionales pueden ser de gran ayuda.

Son cinco las áreas principales de asesoría con las que podemos contar: expertos en empresas familiares, en Estrategia de Negocios, en Gobierno Corporativo, en evaluación de personal, en desarrollo humano y en procesos de coaching. Estos serán mejor aprovechados si se crea un Comité de Sucesión que le de seguimiento al proceso.

Algunos empresarios que les contamos de todos estos recursos nos dicen que les parece demasiado, que para qué tanta parafernalia, que las cosas pueden ser más sencillas, que en su caso el asunto no es complicado. La verdad es que la transparencia y seriedad con que se puede manejar este proceso muchas veces mejora la calidad de las decisiones y puede arrojar resultados inesperados.

Hemos visto que al crear el comité y seguir los pasos de un, plan integral de sucesión con la ayuda de externos, se encuentra que el hermano menor es el candidato idóneo, o que una de las mujeres lo es, o que ninguno parece serlo. También hemos visto que al final la mejor alternativa es vender la empresa porque ninguno de los posibles sucesores mostró vocación para asumir el liderazgo. Es mejor estar abierto a todas las posibilidades y no casarnos con ninguna.

Además de profesionales de las áreas que hemos comentado, pocas personas pueden ser de tanta ayuda como otros empresarios que hayan vivido el proceso en sus propias familias. Aunque las particularidades pueden haber sido muy diferentes, siempre habrá experiencias valiosas que extraer de las situaciones vividas.

No es difícil ver abultados presupuestos dedicados a temas de investigación de mercados, de gestión financiera, de marketing, de comunicación organizacional, de sistemas informáticos, de planeación fiscal. Igualmente, es común observar proyectos en estos campos que consumen la energía de docenas de directivos por meses o años. Pero al llegar al tema de la sucesión como que todo se quiere hacer con poca inversión y en poco tiempo.

La sucesión es un asunto relevante. La vida futura de la organización depende de su buen manejo. Vale la pena dedicarle tiempo y traer a la mesa los mejores expertos para maximizar su efectividad. No pensemos que es algo fácil que puede improvisarse. En mis próximas entregas analizaré más a fondo las diferentes especialidades que podemos aprovechar para profesionalizar este proceso.

 

c_dumois@cedem.com.mx

http://www.cedem.com.mx

Carlos A. Dumois es Presidente y Socio Fundador de CEDEM.

 

* “Dueñez® es una marca registrada por Carlos A. Dumois.

 

 

 

 

Profesionalizar la sucesión

También hemos visto que al final la mejor alternativa es vender la empresa porque ninguno de los posibles sucesores mostró vocación para asumir el liderazgo. Es mejor estar abierto a todas las posibilidades y no casarnos con ninguna.

Carlos Dumois |
23 de septiembre, 2022
sucesión

¿Quién me ayuda a orquestar la sucesión?

Una forma efectiva de transferir la gestión de la Dueñez a la siguiente generación es efectuarla con el apoyo de profesionales. En la mayoría de las familias empresarias nos preguntamos si es viable que los sucesores sean capaces de continuar con la empresa.

El fundador o empresario líder siempre estará tentado a elegir él solo al sucesor y trabajar con él hasta el momento de su retiro. Otros prefieren continuar al mando hasta que la salud o la muerte les impida seguir, dejando abandonado el proceso sucesorio Estas no son precisamente las mejores maneras de gestionar la sucesión.

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Por otro lado, a la hora de tomar decisiones en este terreno tenemos muchas variables a tomar en cuenta: la querencia de los socios, sus necesidades y expectativas económicas, el potencial de creación de valor de los negocios y sus perspectivas a futuro, la cercanía de otras alternativas como vender o salir a bolsa, la existencia de líderes interesados en la siguiente generación, la posibilidad de construir un camino de gobernabilidad entre ellos, etc.

La realidad es que la sucesión en las empresas familiares suele ser tan compleja que lo más recomendable es contar con apoyos profesionales durante todo el proceso. Mejor aún si éstos son externos a la organización y a la familia. Si queremos trabajar seriamente en el proceso sucesorio primero debemos preguntarnos cuáles son los ámbitos en los que podemos contar con la asistencia de profesionales.

Son diversas las áreas donde hay espacio para el apoyo de expertos. Necesitamos psicólogos, evaluadores, coaches, especialistas en formación, pedagogos y otros. Claro que podemos hacerlo todo empíricamente, pero tomemos en cuenta que los conocimientos, herramientas y metodologías que tienen estos profesionales pueden ser de gran ayuda.

Son cinco las áreas principales de asesoría con las que podemos contar: expertos en empresas familiares, en Estrategia de Negocios, en Gobierno Corporativo, en evaluación de personal, en desarrollo humano y en procesos de coaching. Estos serán mejor aprovechados si se crea un Comité de Sucesión que le de seguimiento al proceso.

Algunos empresarios que les contamos de todos estos recursos nos dicen que les parece demasiado, que para qué tanta parafernalia, que las cosas pueden ser más sencillas, que en su caso el asunto no es complicado. La verdad es que la transparencia y seriedad con que se puede manejar este proceso muchas veces mejora la calidad de las decisiones y puede arrojar resultados inesperados.

Hemos visto que al crear el comité y seguir los pasos de un, plan integral de sucesión con la ayuda de externos, se encuentra que el hermano menor es el candidato idóneo, o que una de las mujeres lo es, o que ninguno parece serlo. También hemos visto que al final la mejor alternativa es vender la empresa porque ninguno de los posibles sucesores mostró vocación para asumir el liderazgo. Es mejor estar abierto a todas las posibilidades y no casarnos con ninguna.

Además de profesionales de las áreas que hemos comentado, pocas personas pueden ser de tanta ayuda como otros empresarios que hayan vivido el proceso en sus propias familias. Aunque las particularidades pueden haber sido muy diferentes, siempre habrá experiencias valiosas que extraer de las situaciones vividas.

No es difícil ver abultados presupuestos dedicados a temas de investigación de mercados, de gestión financiera, de marketing, de comunicación organizacional, de sistemas informáticos, de planeación fiscal. Igualmente, es común observar proyectos en estos campos que consumen la energía de docenas de directivos por meses o años. Pero al llegar al tema de la sucesión como que todo se quiere hacer con poca inversión y en poco tiempo.

La sucesión es un asunto relevante. La vida futura de la organización depende de su buen manejo. Vale la pena dedicarle tiempo y traer a la mesa los mejores expertos para maximizar su efectividad. No pensemos que es algo fácil que puede improvisarse. En mis próximas entregas analizaré más a fondo las diferentes especialidades que podemos aprovechar para profesionalizar este proceso.

 

c_dumois@cedem.com.mx

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Carlos A. Dumois es Presidente y Socio Fundador de CEDEM.

 

* “Dueñez® es una marca registrada por Carlos A. Dumois.