En esta entrevista Carmen Urízar, exministra de Energía y Minas de Guatemala, explica que en materia energética y de sostenibilidad, todavía hay muchos retos que atender, como por ejemplo, completar el nivel de electrificación rural; disminuir el uso de leña y lograr que las personas utilicen otros energéticos más eficientes para la cocción, como el gas o la electricidad.

La también expresidenta de la Comisión Nacional de Energía Eléctrica y actual directora de Energy & Infrastructure Analysis Center y de la Iniciativa Mujeres Energía Centroamérica, considera que otro reto es completar la expansión del sistema de transmisión; aprovechar más el mercado regional, en lo relativo a realizar transacciones de largo plazo y en materia de combustibles para el transporte, lograr sustitutos como la electromovilidad u otros combustibles como el gas o renovables como el etanol.

¿Cuánta de la producción de energía eléctrica proviene de energías renovables?

 — Guatemala casi está dentro de los 20 países del mundo con mayor proporción de energía renovable para producir su electricidad. Actualmente es entre el 72% y el 75%, esto prácticamente fue resultado de la política energética que se hizo en 2007, cuando el país se propuso cambiar la matriz eléctrica.

Antes, producíamos por medios no renovables como el petróleo, ahora, casi el 75% proviene de energías renovables y la más utilizada en Guatemala es la hidroeléctrica, la que proviene del agua, de la utilización de los ríos.

Después está la energía de la biomasa, se obtiene de los compuestos orgánicos mediante procesos naturales, por ejemplo, el bagazo de caña de azúcar. Tenemos una buena proporción de energías renovables.

Guatemala también ha incorporado energías intermitentes como la solar y la eólica, que proviene del viento.

¿Qué desafíos son prioridad para Guatemala en el sector eléctrico?

 — Hoy, obviamente son muy diferentes a los que se tenían hace 20 años, en donde realmente nuestro desafío era cambiar la matriz eléctrica, porque producirla de petróleo nos hacía tener una electricidad muy cara.

En la actualidad, la energía proviene más de fuentes renovables y eso ha permitido que el precio haya bajado. El país posee los precios de la energía eléctrica más competitivos de Centroamérica y eso es importante para la competitividad y también para el bolsillo del usuario.

Otro desafío sigue siendo la electrificación rural. Guatemala tiene una electrificación rural aproximada del 90%, quiere decir que, nueve de cada 10 guatemaltecos tienen electricidad.

Sin embargo, ese 10% restante, es de la provincia. Las áreas más desatendidas y con menor cobertura son las Verapaces (Alta Verapaz y Baja Verapaz), Huehuetenango y Quiché. S estas áreas Guatemala tiene un desafío grande de llevar electricidad. 

Otro de los desafíos eléctricos es elevar la calidad del servicio ¿Cómo se puede medir la calidad de la electricidad? Uno de los indicadores son las interrupciones, cada cuánto se vale electricidad, y el otro es el tiempo de la interrupción. Por ejemplo, dos o tres minutos sin electricidad ya es un indicador de mala calidad. En la provincia a veces la electricidad se va por horas. 

Existen una serie de indicadores técnicos que deben de ponérsele atención para que la electricidad que se reciba sea adecuada y de buena calidad. Esto también ayudará a que las industrias puedan descentralizar su actividad productiva e instalar a la provincia y generen actividad productiva, esto es otro desafío importante.

Uno de los desafíos en materia regional es lograr que más países puedan exportar e importar energía. 

¿Qué es el desarrollo energético sostenible?

 —La sostenibilidad a lo que se refiere es cómo a largo plazo logramos que las cosas continúen, es velar por el ambiente.  Sostenibilidad significa cómo el sector energético se desarrolla, pero siendo respetuoso con el ambiente y también con las comunidades.

Entonces, ¿qué es el desarrollo energético sostenible?, es que las necesidades energéticas se puedan satisfacer con las soluciones que los países están dando, puede ser diversificando la matriz o usando más renovables.

Pero fundamentalmente la sostenibilidad se va a lograr cuando se sea respetuoso con el ambiente para que los recursos no se acaben, sino que haya un uso responsable que haga que los mismos sean en el largo plazo, justamente renovables.

¿Qué obstáculos o desafíos hay en la transición a las energías sostenibles?

 —Hay desafíos de varias características. Uno es el conflicto social, por ejemplo, una hidroeléctrica encuentra un conflicto porque una comunidad no desea que la hidroeléctrica se haga o que se utilice el río.
Por otro lado, hay un obstáculo en las energías renovables, porque a veces hay falta de información y eso es lo que ha generado el conflicto.

¿Cómo ha avanzado Guatemala en el campo de la electromovilidad?

 —Guatemala en 2022 aprobó una ley de electromovilidad que permite y facilita a los que tienen interés de generar un cambio hacia el transporte eléctrico, ya sea individual, comprando un automóvil o a nivel masivo, con buses, tienen una exoneración de impuestos.

¿Qué metas tiene Guatemala y qué atractivo tiene para las inversiones?

 —Guatemala quiere tener en el 2050 el 80% de su matriz eléctrica en energía renovables, ya casi lo alcanzamos porque vamos por el 75%. También se quiere tener una cobertura eléctrica del 100%, eso es importante porque obviamente se quiere que todos los guatemaltecos tengan electricidad, porque es uno de los servicios básicos más importantes.

Con electricidad se puede tener agua potable, existe una posibilidad de tener bombeo de agua con electricidad, también se puede tener telecomunicaciones, las personas pueden conectar su teléfono, además, se elevaría la educación porque puede tener una computadora. Además, se elevan las actividades productivas.