El excandidato a la presidencia del desaparecido partido Libertad Democrática Renovada (Líder), Manuel Baldizón, aún tiene una posibilidad para permanecer en EE. UU.
Manuel Baldizón era un político relativamente joven cuando participó como candidato a la presidencia de Guatemala por primera vez, en 2011.
En esa ocasión perdió frente a Otto Pérez Molina, actualmente preso por varios casos de corrupción donde lo señalan como cabecilla.
La segunda vez que participó en las presidenciales fue en 2015, donde no logró avanzar a la segunda ronda electoral.
Baldizón era favorito en las encuestas. Sus promesas de campaña conquistaron a guatemaltecos, sin embargo, no fue suficiente.
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Qué sigue ahora
Una corte de inmigración negó la solicitud de asilo que planteó desde finales de enero, cuando fue detenido intentando ingresar a EE. UU. con la visa que había sido anulada.
El Ministerio Público ordenó la captura por el caso Odebrecht, bajo señalamientos de supuestamente haber recibido sobornos.
La Ley de Inmigración de EE. UU. indica que luego de la petición negada, la persona tiene la posibilidad de apelar la decisión del juez en un plazo de 30 días.
En ese tiempo el excandidato tiene la posibilidad de aportar nuevas pruebas y evidencias que hagan creíble que el Estado de Guatemala no puede proteger su vida.
Después de presentado el recurso, el tiempo que demore la respuesta judicial depende de la acumulación de casos del juez.
Además, Baldizón podría solicitar un amparo, lo que detendría temporalmente la ejecución de su deportación.
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Manuel volverá
Si EE. UU. le niega a Baldizón todos los recursos que utilice, volverá a Guatemala en un vuelo de deportados como todas las personas que son detenidas intentando ingresar de manera irregular a ese país.
Los vuelos llegan a la Fuerza Aérea Guatemalteca.
Según el Ministerio Público, en cuanto sea deportado y baje del avión, sería capturado por la Policía Nacional Civil por existir una orden vigente.
De inmediato tendrían que llevarlo ante un juez para que conozca los motivos de su detención y trasladarlo al juez que giró la orden para que comience el proceso penal.
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En esa ocasión perdió frente a Otto Pérez Molina, actualmente preso por varios casos de corrupción donde lo señalan como cabecilla.
La segunda vez que participó en las presidenciales fue en 2015, donde no logró avanzar a la segunda ronda electoral.
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La Ley de Inmigración de EE. UU. indica que luego de la petición negada, la persona tiene la posibilidad de apelar la decisión del juez en un plazo de 30 días.
En ese tiempo el excandidato tiene la posibilidad de aportar nuevas pruebas y evidencias que hagan creíble que el Estado de Guatemala no puede proteger su vida.
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