La escalada de violencia en la Franja de Gaza, con la ciudad fronteriza de Rafah como uno de los principales focos, ha generado una ola de preocupación a nivel internacional.

Es noticia. La intensificación de los ataques aéreos israelíes en esta zona densamente poblada ha provocado un fuerte rechazo por parte del presidente estadounidense, Joe Biden, quien calificó la respuesta militar de Israel como “exagerada”.

• La Casa Blanca, anticipándose a un posible deterioro de la situación, emitió una advertencia a Israel, instando al gobierno de Netanyahu a reconsiderar cualquier acción militar en Rafah. John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, destacó la importancia de proteger a los civiles en esta crisis. Sus declaraciones se alinean con las del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, quien advirtió sobre el riesgo de una tragedia gigantesca en la región.
• Sin embargo, Netanyahu confirmó instrucciones a las Fuerzas de Defensa de Israel para operar en Rafah. La preocupación se extiende a Egipto, donde existe el temor de que un avance israelí hacia Rafah impulse a los habitantes de Gaza a buscar refugio cruzando la frontera.
• Estados Unidos, aunque ha expresado públicamente su preocupación, continúa apoyando la campaña militar contra Hamás. Sin embargo, expertos como Aaron David Miller, del Carnegie Endowment for International Peace, señalan que Biden aún no ha utilizado toda la influencia de Washington para mediar en el conflicto. Esto incluye opciones como reducir la ayuda militar o el apoyo diplomático, medidas que podrían presionar por un alto al fuego, demandado por más de 150 países en las Naciones Unidas.