Violando la Constitución salvadoreña, Bukele ha sido reelecto ratificando, además, una mayoría absoluta en el legislativo a pesar de no tener resultados oficiales. 

Panorama general. Con un 82% de los votos a la hora de cierre, el presidente Nayib Bukele ha sido reelecto, a pesar de la prohibición constitucional a la reelección presidencial consecutiva. 

• En una avalancha electoral, donde se juntaron las elecciones presidenciales y legislativas por primera vez en la historia de El Salvador, también se amplió su dominio legislativo, obteniendo 58 diputados de 60.  
   

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• Debido al fracaso del Tribunal Supremo Electoral (TSE), no obstante, los resultados no son oficiales, sino que se basan en un sondeo de boca de urna de CID Gallup y los “datos internos” del partido oficial, como lo declaró el presidente. 

Visto y no visto (I). La jornada se llevó a cabo entre una serie de anomalías coherentes con toda la dinámica del proceso electoral, desde la reforma al sistema en mayo de 2023. Los centros de votación abrieron, en algunos casos, hasta una hora tarde; los periodistas y observadores fueron excluidos del proceso de apertura, y el presidente realizó una conferencia de prensa llamando al voto, violando el silencio electoral.   

• Muchos miembros de Juntas Receptoras de Votos (JRV) denunciaron que se les negó el acceso a los centros de votación, siendo reemplazados por miembros desconocidos para integrar las mesas.   
   

• De igual manera, el presidente Bukele se autoproclamó como ganador y comentó el número de diputados que obtendría antes de que siquiera iniciaran los conteos de votos de la Asamblea Legislativa.   
   

• TSE tardó más de cuatro horas en iniciar el proceso de transmisión de datos, lo que llevó a los salvadoreños a concluir que el propio candidato conoció el resultados antes de que los votos fueran contados.  

Visto y no visto (II). Los miembros de las JRV denunciaron que el sistema del TSE registraba dos veces cada voto por Nuevas Ideas (NI) en las elecciones legislativas. El Tribunal dio la orden a las 2:12 AM de abandonar la tabulación digital de datos para hacerlas a mano, respaldándolas con fotografías tomadas por los integrantes de las JRV.  

• A la hora de cierre, El Salvador no cuenta con resultados oficiales, sin embargo, el sistema del TSE reflejaba votos registrados para NI en departamentos donde no aparecía procesada ningún acta. 
   

• Al igual que en Guatemala, el TSE fracasó en la gestión de las elecciones, y los únicos resultados con base en los cuales se celebró la victoria, provienen de la información brindada por Bukele. 
   

• Los resultados oficiales registran solamente un 31.49% de actas procesadas para las elecciones presidenciales y un 0.93% para la elección legislativa. 

Cómo funciona. El proceso electoral de 2024 fue preparado para respaldar la popularidad del presidente Bukele. En mayo de 2023, el oficialismo llevó a cabo una serie de reformas electorales. La bancada de NI cambió la fórmula de reparto legislativo, pasando de una fórmula Hare —vigente desde la década de los 60—, que toma en cuenta cocientes y residuos, a una fórmula D'Hont modificada, que elimina del todo los residuos.  

• Dicho cambio se llevó a cabo para favorecer a los partidos grandes y virtualmente eliminar a los partidos pequeños. Se pasó de un sistema electoral proporcional a uno mayoritario, primando la “gobernabilidad” por encima de la representatividad. 

   

• Adicionalmente, se autorizó el voto electrónico en el exterior y se les permitió a los ciudadanos en el extrangero sin dirección registrada en El Salvador votar por el listado de diputados de San Salvador: el distrito de mayor magnitud en todo el país. 
    

• El gobierno de Bukele también se negó a pagar a los partidos de oposición la deuda política de US$ 34 millones 733 mil 871, mientras que NI usó la maquinaria estatal para regalar víveres a ciudadanos de escasos recursos.  

Sí, pero. A pesar de haberse llevado a cabo una serie de abusos por parte del Estado en contra de la oposición, los distintos partidos fueron incapaces de entender la realidad de El Salvador. La oposición se enfocó en denunciar los abusos de derechos humanos por parte del gobierno, criticando el punto más popular de la administración de Bukele: la supresión de las maras.  

• A pesar del creciente costo de vida y el fracaso económico del gobierno de Bukele, la oposición falló en hacer hincapié en temas que generan inconformidad en la población que sigue absteniéndose de votar.  

Lo que sigue. La popularidad de Bukele le permitió una victoria histórica, no solo por el margen, sino por el retroceso democrático de 90 años al pasado. El Salvador inicia una era sin división de poderes y con un modelo de partido único, a efectos prácticos. Con el tema de seguridad bajo control, Bukele tiene varios retos: resolver la crisis de pensiones, el estancamiento económico, el mal sistema de salud y de educación, además de mantener la situación de seguridad en un margen institucional. 

• Mientras que Bukele lo ha negado, fuentes internas de NI confirman que el gran proyecto del próximo gobierno es llevar a cabo una reforma constitucional.  
   

• La actual legislatura podría realizarla y, al tomar posesión la legislatura electa, ratificarla y hacerla entrar en vigor.  
   

• El Salvador se ha despedido, después de 90 años, de su era republicana. eciente costo de vida y el fracaso económico del gobierno de Bukele, la oposición falló en hacer hincapié en temas que generan inconformidad en la población que sigue absteniéndose de votar.  

Lo que sigue. La popularidad de Bukele le permitió una victoria histórica, no solo por el margen de victoria, sino por el retroceso democrático de 90 años al pasado. El Salvador inicia una era sin división de poderes y con un modelo de partido único, a efectos prácticos. Con el tema de seguridad bajo control, Bukele tiene varios retos: resolver la crisis de pensiones, el estancamiento económico, el mal sistema de salud y de educación, además de mantener la situación de seguridad en un margen institucional.

• Mientras que Bukele lo ha negado, fuentes internas de NI confirman que el gran proyecto del próximo gobierno es llevar a cabo una reforma constitucional.  

   

• La actual legislatura podría realizarla y, al tomar posesión la legislatura electa, ratificarla y hacerla entrar en vigor.  

   

• El Salvador se ha despedido, después de 90 años, de su era republicana.