En la segunda ciudad más importante del país se terminó la calma. Si es que todavía quedaba algo de tranquilidad, los criminales, en dos días, levantaron a los grupos organizados de la sociedad civil y empresarial, y también motivaron a cinco de los siete diputados de Quetzaltenango, a reunirse de emergencia con las autoridades policíacas, el alcalde y la Gobernadora Departamental.
Cuatro muertes recientes acabaron con la paciencia de los grupos organizados y los representantes políticos que piden acciones concretas contra las bandas delincuenciales que están asesinando, con total impunidad, a choferes, ayudantes, taxistas, vecinos y periodistas en todo el departamento.
El Colectivo VOS demanda al presidente de la República, Jimmy Morales, que destituya a la gobernadora Claudia Ávila, a quien consideran no apta para desempeñarse en el puesto, en tanto que los legisladores y transportistas cuestionan los operativos de la Policía Nacional Civil, ya que los crímenes no se detienen.
Mientras tanto, este martes el Ministerio de Gobernación circuló datos que, según ellos, reflejan cómo se han reducido los homicidios en algunos departamentos, lo que incluye a Quetzaltenango, donde se reportan 25 crímenes menos este año, en comparación con 2015, tomando en cuenta de enero a lo que va de diciembre de 2016.
O pagan o los matan
Con esa amenaza de muerte, los delincuentes tienen de rodillas a los transportistas y otros sectores comerciales de Quetzaltenango, que cuando se niegan a cumplir la exigencia, son atacados.
[quote_center]Esto le pasó a los Transportes Madrigal. El miércoles 7 de diciembre fueron asesinados el chofer Eduardo Alejandro Barrios, de 32 años y el inspector Selvin Leonel Solís, un joven de 17 años. Y el viernes 9, cuando los sepultaban, de nuevo los sicarios atacaron a otro piloto y ayudante de esta empresa.[/quote_center]
Esta vez las víctimas fueron el conductor Édgar Rubén Cifuentes Velásquez, de 45 años y el ayudante Pablo Mérida, también menor de edad. Ambos crímenes fueron cometidos en la zona 7 de esa ciudad y todo apunta a que se relacionan con los grupos de extorsionistas que operan en el área.
Periodistas también son víctimas
Pero los asesinatos a plena luz del día no ocurren solo en la cabecera. Coatepeque es uno de los municipios más violentos de Quetzaltenango y basta recordar dos casos recientes, pero relacionados, para corroborar que la impunidad se mueve en todo el departamento.
El 25 de junio, a eso de las cuatro de la tarde, fue baleado el periodista Álvaro Alfredo Aceituno López, de 65 años, director de la emisora Estéreo Ilusión, cuando recién había salido de su vivienda. Fue hospitalizado, pero falleció.
Y 37 días después fue atacada su hija, Lindaura Aceituno, cuando llevaba a su pequeña hijita al colegio. También fue llevada a un centro asistencia; sin embargo, murió. El suceso ocurrió en las primeras horas del martes 2 de agosto.
Tres meses después de estos crímenes, en la ruta entre Coatepeque y Flores Costa Cuca, fueron asesinados el periodista Hamilton Hernández Vásquez, de 28 años y su esposa Ermelinda González Lucas, de 35, quienes viajaban hacia su residencia en una motocicleta.
Vale apuntar que Hernández fue el noveno periodista ultimado en Guatemala durante 2016, según las entidades que defienden la libertad de Prensa. De estas cuatro muertes tampoco se conocen avances de las investigaciones.
El colmo, los criminales mandan
[quote_center]Colomba es otro de los municipios agobiados por la delincuencia. En 2016 se registran 20 asesinatos y 40 heridos, según medios de comunicación.[/quote_center]
En ese lugar se han registrado crímenes en el parque y hasta enfrente de la Municipalidad, institución que suspendió las celebraciones de fin de año para evitar que sigan ocurriendo muertes, lo cual indica la imposibilidad de garantizar la seguridad de los habitantes.
El 27 de octubre fue inaugurada la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI) en Quetzaltenango, lo cual se considera una esperanza para combatir a las mafias y el poder paralelo, lo que se espera incida en el combate contra los grupos del crimen organizado.
Según el subcomisario José Martínez, jefe de la comisaría 41 de Quetzaltenango, las fuerzas policiales cumplen con su trabajo y este año han realizado más detenciones, pero son ajenos a las resoluciones de los jueces.
Discurso del jefe de la CICIG, Iván Velásquez, con motivo de la inauguración de la FECI en Quetzaltenango.
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Cuatro muertes recientes acabaron con la paciencia de los grupos organizados y los representantes políticos que piden acciones concretas contra las bandas delincuenciales que están asesinando, con total impunidad, a choferes, ayudantes, taxistas, vecinos y periodistas en todo el departamento.
El Colectivo VOS demanda al presidente de la República, Jimmy Morales, que destituya a la gobernadora Claudia Ávila, a quien consideran no apta para desempeñarse en el puesto, en tanto que los legisladores y transportistas cuestionan los operativos de la Policía Nacional Civil, ya que los crímenes no se detienen.
Mientras tanto, este martes el Ministerio de Gobernación circuló datos que, según ellos, reflejan cómo se han reducido los homicidios en algunos departamentos, lo que incluye a Quetzaltenango, donde se reportan 25 crímenes menos este año, en comparación con 2015, tomando en cuenta de enero a lo que va de diciembre de 2016.
O pagan o los matan
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[quote_center]Esto le pasó a los Transportes Madrigal. El miércoles 7 de diciembre fueron asesinados el chofer Eduardo Alejandro Barrios, de 32 años y el inspector Selvin Leonel Solís, un joven de 17 años. Y el viernes 9, cuando los sepultaban, de nuevo los sicarios atacaron a otro piloto y ayudante de esta empresa.[/quote_center]
Esta vez las víctimas fueron el conductor Édgar Rubén Cifuentes Velásquez, de 45 años y el ayudante Pablo Mérida, también menor de edad. Ambos crímenes fueron cometidos en la zona 7 de esa ciudad y todo apunta a que se relacionan con los grupos de extorsionistas que operan en el área.
Periodistas también son víctimas
Pero los asesinatos a plena luz del día no ocurren solo en la cabecera. Coatepeque es uno de los municipios más violentos de Quetzaltenango y basta recordar dos casos recientes, pero relacionados, para corroborar que la impunidad se mueve en todo el departamento.
El 25 de junio, a eso de las cuatro de la tarde, fue baleado el periodista Álvaro Alfredo Aceituno López, de 65 años, director de la emisora Estéreo Ilusión, cuando recién había salido de su vivienda. Fue hospitalizado, pero falleció.
Y 37 días después fue atacada su hija, Lindaura Aceituno, cuando llevaba a su pequeña hijita al colegio. También fue llevada a un centro asistencia; sin embargo, murió. El suceso ocurrió en las primeras horas del martes 2 de agosto.
Tres meses después de estos crímenes, en la ruta entre Coatepeque y Flores Costa Cuca, fueron asesinados el periodista Hamilton Hernández Vásquez, de 28 años y su esposa Ermelinda González Lucas, de 35, quienes viajaban hacia su residencia en una motocicleta.
Vale apuntar que Hernández fue el noveno periodista ultimado en Guatemala durante 2016, según las entidades que defienden la libertad de Prensa. De estas cuatro muertes tampoco se conocen avances de las investigaciones.
El colmo, los criminales mandan
[quote_center]Colomba es otro de los municipios agobiados por la delincuencia. En 2016 se registran 20 asesinatos y 40 heridos, según medios de comunicación.[/quote_center]
En ese lugar se han registrado crímenes en el parque y hasta enfrente de la Municipalidad, institución que suspendió las celebraciones de fin de año para evitar que sigan ocurriendo muertes, lo cual indica la imposibilidad de garantizar la seguridad de los habitantes.
El 27 de octubre fue inaugurada la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI) en Quetzaltenango, lo cual se considera una esperanza para combatir a las mafias y el poder paralelo, lo que se espera incida en el combate contra los grupos del crimen organizado.
Según el subcomisario José Martínez, jefe de la comisaría 41 de Quetzaltenango, las fuerzas policiales cumplen con su trabajo y este año han realizado más detenciones, pero son ajenos a las resoluciones de los jueces.
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