La audiencia de anticipo de prueba del colaborador eficaz Salvador Estuardo González alias “Eco”, por el caso La Línea, se ha desarrollado de una forma inusual, entre una serie de recursos interpuestos por los abogados defensores, quienes han detenido en varias ocasiones la audiencia, además de acusaciones como la proferida contra “Eco”, a quien se le señaló de “soplón” y lo ocurrido este martes, cuando la jornada cerró de manera abrupta porque uno de los defensores se salió de la sala, no sin antes gritar y señalar de “mentiroso” al fiscal del Ministerio Público y desmayarse o tropezar cuando caminaba hacia afuera.
De acuerdo con abogados consultados, existe en el Juzgado de Mayor Riesgo B un desorden, porque el Juez Miguel Ángel Gálvez no ha actuado de forma disciplinaria, por lo que los juristas hasta le han faltado al respeto; sin embargo, también consideran que si Gálvez se porta de forma rígida, lo podrían recusar por dicha situación.
Según César Calderón, abogado defensor del expresidente Otto Pérez Molina, la audiencia está desordenada, “el Juez no ha controlado bien el proceso y ha dejado muchas cosas que debe hacer y gobernar dentro de diligencia”.
Calderón se abstuvo de emitir opinión acerca de las declaraciones vertidas por “Eco” este martes. Indicó que al finalizar la declaración del colaborador eficaz se pronunciará, pues considera que es “muy prematuro” hablar acerca de la situación. Además, dijo que a su consideración, esta declaración no aportará nada nuevo en el caso.
Por su parte, Francisco García Gudiel, defensor del exjefe de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), Carlos Muñoz, dice que al Juez Gálvez se le fue de las manos el control del caso. “No supo imponer el poder de disciplina del cual está investido, según el artículo 358 del Código Procesal Penal, lo cual ha causado ese desorden y las situaciones que se ha dada en la audiencia”.
Según el jurista, estas situaciones indignan a la población. Agrega que el pueblo de Guatemala tenía una gran expectativa por la declaración de González Álvarez, “pero al final de cuentas no ha dicho nada nuevo, pues la declaración que realizó en septiembre, es similar a la que ahora hace, con alguna variación, pero no significa que altere el asunto”.
Además, García Gudiel añadió que el Ministerio Público no supo plantear las preguntas. Asimismo, indicó que esta declaración terminará sin aportar nada nuevo o que se supiera. “La tónica y el ritmo que lleva es la misma que ya sabíamos”.
Mientras tanto, el Constitucionalista Gabriel Orellana, dice que, al parecer, existe una concertación entre todos los abogados de la defensa para obstaculizar la declaración. Además, le llama la atención el temperamento del juez y sobre todo el peligro que corre González Álvarez.
“Cada día que pasa es uno menos para los defensores, es decir que el tiempo que pasa se les agota, en cuanto a lo que tienen que decir, ¿Qué pasara si lo eliminan físicamente?, algo que es realmente preocupante”, subraya Orellana.
Añade que si el Juez se porta “muy drástico” en la audiencia, “el subterfugio sería recusarlo, lo cual significaría un mes y medio para retrasar la audiencia, pero lo que también llama la atención es por qué no lo han planteado”.
Al ser consultada por el retraso que ha tenido la audiencia de anticipo de prueba, la Fiscal General, Thelma Aldana, indicó que “así funciona el sistema, el derecho de defensa, el debido proceso y hay que esperar que se agoten todos los procedimientos”.
Según Aldana el convenio de colaborador eficaz de González Álvarez sí cumple con los formalismos del caso y por eso el Juez lo aceptó. “Lo que hace el abogado defensor es luchar por su cliente hasta con el último de los recursos que la Ley le permite, mientras que el Ministerio Público, al contrario, debe de acusar con base al material probatorio recabado en la investigación”.
Pérez y Baldetti mandaron a borrar evidencia
Durante la declaración como anticipo de prueba de Salvador González, se dio a conocer que el expresidente Pérez Molina y la exvicemandataria Baldetti, habrían enviado al abogado Ricardo Grijalva, para que borrara evidencias de comunicación entre “Eco” y los exgobernantes.
“Es una sindicación muy seria, que podría ser considerado como obstrucción a la justicia”, sostiene García Gudiel.
Asimismo, González explicó ante el Juez contralor del caso, que Juan Carlos Monzón, exsecretario Privado de Baldetti, le presentó a Osama Aranky, quien se hizo cargo de las Aduanas de manera paralela al Estado. Uno de sus objetivos era hacer 52 cambios o traslados de personal que serían ubicado en lugares clave para establecer la red de corrupción que concluyó con las renuncias de Pérez y Baldetti.
En sus declaraciones, “Eco” implicó en los hechos a Filadelfo Reyes, intendente de la Aduanas y Carlos Muñoz, jefe de la SAT, a quienes visitó en una ocasión en el edificio de la SAT, para elaborar la lista de los trabajadores que serían reubicados.
González indicó que todos los datos que ofreció en sus declaraciones se pueden comprobar porque los detalles están en la computadora incautada. Agregó que en las reuniones se establecieron los porcentajes para cada una de las partes, y remarcó que le entregaban el 50 por ciento a los exgobernantes.
También afirmó que la exintendente de la SAT, Claudia Méndez, tenía conocimiento acerca de los porcentajes de dinero que se repartían, “porque a ella le entregaban el cinco por ciento”. En sus declaraciones, ratificó que esa institución era conocida, entre la red de defraudación, como las “tres letras” o “la zona 9”, sobre todo cuando se comunicaba con Baldetti.
¿Desmayo, tropezón o show?
El abogado Mario Sanler Castillo, de la Defensoría Pública Penal, se desmayó en plena audiencia luego de discutir con Juan Francisco Sandoval, abogado de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), cuando se retiraba bastante molesto y después de acusar de “mentiroso” al fiscal.
La discusión se originó porque el Ministerio Público presentó las computadoras incautadas a Salvador González, y el juez pidió a los defensores que revisaran las evidencias, pero el abogado Sanler, tras observar una de las máquinas, aseguró que el embalaje estaba roto y, por tanto, denunció que no hubo una cadena de custodia adecuada.
Pero Sandoval responsabilizó a Sanler de romper el protector, lo cual causó la ira del defensor de Carlos Ávila, implicado en el caso de defraudación aduanera La Línea. Sanler dijo sentirse mal de salud y por ello se retiró de la Sala, pero cuando iba caminando se desplomó.
En octubre de 2010, cuando Sanler defendía a un acusado por el caso Parlacen, relacionado con el crimen de diputados salvadoreños, también sufrió un desmayo, según reporte del Diario de Hoy, de El Salvador., tal como se observa en la fotografía del medio de comunicación.
Para el abogado César Calderón, Sanler tuvo motivos para retirarse y responsabilizó de su estado de salud al fiscal del MP porque hizo un señalamiento infundado, además cuestionó el papel del juez Miguel Ángel Gálvez, quién fijó la continuación de la audiencia para este miércoles a las nueve horas.
Con información de Winter Flores y Giovani Pérez.
La audiencia de anticipo de prueba del colaborador eficaz Salvador Estuardo González alias “Eco”, por el caso La Línea, se ha desarrollado de una forma inusual, entre una serie de recursos interpuestos por los abogados defensores, quienes han detenido en varias ocasiones la audiencia, además de acusaciones como la proferida contra “Eco”, a quien se le señaló de “soplón” y lo ocurrido este martes, cuando la jornada cerró de manera abrupta porque uno de los defensores se salió de la sala, no sin antes gritar y señalar de “mentiroso” al fiscal del Ministerio Público y desmayarse o tropezar cuando caminaba hacia afuera.
De acuerdo con abogados consultados, existe en el Juzgado de Mayor Riesgo B un desorden, porque el Juez Miguel Ángel Gálvez no ha actuado de forma disciplinaria, por lo que los juristas hasta le han faltado al respeto; sin embargo, también consideran que si Gálvez se porta de forma rígida, lo podrían recusar por dicha situación.
Según César Calderón, abogado defensor del expresidente Otto Pérez Molina, la audiencia está desordenada, “el Juez no ha controlado bien el proceso y ha dejado muchas cosas que debe hacer y gobernar dentro de diligencia”.
Calderón se abstuvo de emitir opinión acerca de las declaraciones vertidas por “Eco” este martes. Indicó que al finalizar la declaración del colaborador eficaz se pronunciará, pues considera que es “muy prematuro” hablar acerca de la situación. Además, dijo que a su consideración, esta declaración no aportará nada nuevo en el caso.
Por su parte, Francisco García Gudiel, defensor del exjefe de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), Carlos Muñoz, dice que al Juez Gálvez se le fue de las manos el control del caso. “No supo imponer el poder de disciplina del cual está investido, según el artículo 358 del Código Procesal Penal, lo cual ha causado ese desorden y las situaciones que se ha dada en la audiencia”.
Según el jurista, estas situaciones indignan a la población. Agrega que el pueblo de Guatemala tenía una gran expectativa por la declaración de González Álvarez, “pero al final de cuentas no ha dicho nada nuevo, pues la declaración que realizó en septiembre, es similar a la que ahora hace, con alguna variación, pero no significa que altere el asunto”.
Además, García Gudiel añadió que el Ministerio Público no supo plantear las preguntas. Asimismo, indicó que esta declaración terminará sin aportar nada nuevo o que se supiera. “La tónica y el ritmo que lleva es la misma que ya sabíamos”.
Mientras tanto, el Constitucionalista Gabriel Orellana, dice que, al parecer, existe una concertación entre todos los abogados de la defensa para obstaculizar la declaración. Además, le llama la atención el temperamento del juez y sobre todo el peligro que corre González Álvarez.
“Cada día que pasa es uno menos para los defensores, es decir que el tiempo que pasa se les agota, en cuanto a lo que tienen que decir, ¿Qué pasara si lo eliminan físicamente?, algo que es realmente preocupante”, subraya Orellana.
Añade que si el Juez se porta “muy drástico” en la audiencia, “el subterfugio sería recusarlo, lo cual significaría un mes y medio para retrasar la audiencia, pero lo que también llama la atención es por qué no lo han planteado”.
Al ser consultada por el retraso que ha tenido la audiencia de anticipo de prueba, la Fiscal General, Thelma Aldana, indicó que “así funciona el sistema, el derecho de defensa, el debido proceso y hay que esperar que se agoten todos los procedimientos”.
Según Aldana el convenio de colaborador eficaz de González Álvarez sí cumple con los formalismos del caso y por eso el Juez lo aceptó. “Lo que hace el abogado defensor es luchar por su cliente hasta con el último de los recursos que la Ley le permite, mientras que el Ministerio Público, al contrario, debe de acusar con base al material probatorio recabado en la investigación”.
Pérez y Baldetti mandaron a borrar evidencia
Durante la declaración como anticipo de prueba de Salvador González, se dio a conocer que el expresidente Pérez Molina y la exvicemandataria Baldetti, habrían enviado al abogado Ricardo Grijalva, para que borrara evidencias de comunicación entre “Eco” y los exgobernantes.
“Es una sindicación muy seria, que podría ser considerado como obstrucción a la justicia”, sostiene García Gudiel.
Asimismo, González explicó ante el Juez contralor del caso, que Juan Carlos Monzón, exsecretario Privado de Baldetti, le presentó a Osama Aranky, quien se hizo cargo de las Aduanas de manera paralela al Estado. Uno de sus objetivos era hacer 52 cambios o traslados de personal que serían ubicado en lugares clave para establecer la red de corrupción que concluyó con las renuncias de Pérez y Baldetti.
En sus declaraciones, “Eco” implicó en los hechos a Filadelfo Reyes, intendente de la Aduanas y Carlos Muñoz, jefe de la SAT, a quienes visitó en una ocasión en el edificio de la SAT, para elaborar la lista de los trabajadores que serían reubicados.
González indicó que todos los datos que ofreció en sus declaraciones se pueden comprobar porque los detalles están en la computadora incautada. Agregó que en las reuniones se establecieron los porcentajes para cada una de las partes, y remarcó que le entregaban el 50 por ciento a los exgobernantes.
También afirmó que la exintendente de la SAT, Claudia Méndez, tenía conocimiento acerca de los porcentajes de dinero que se repartían, “porque a ella le entregaban el cinco por ciento”. En sus declaraciones, ratificó que esa institución era conocida, entre la red de defraudación, como las “tres letras” o “la zona 9”, sobre todo cuando se comunicaba con Baldetti.
¿Desmayo, tropezón o show?
El abogado Mario Sanler Castillo, de la Defensoría Pública Penal, se desmayó en plena audiencia luego de discutir con Juan Francisco Sandoval, abogado de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), cuando se retiraba bastante molesto y después de acusar de “mentiroso” al fiscal.
La discusión se originó porque el Ministerio Público presentó las computadoras incautadas a Salvador González, y el juez pidió a los defensores que revisaran las evidencias, pero el abogado Sanler, tras observar una de las máquinas, aseguró que el embalaje estaba roto y, por tanto, denunció que no hubo una cadena de custodia adecuada.
Pero Sandoval responsabilizó a Sanler de romper el protector, lo cual causó la ira del defensor de Carlos Ávila, implicado en el caso de defraudación aduanera La Línea. Sanler dijo sentirse mal de salud y por ello se retiró de la Sala, pero cuando iba caminando se desplomó.
En octubre de 2010, cuando Sanler defendía a un acusado por el caso Parlacen, relacionado con el crimen de diputados salvadoreños, también sufrió un desmayo, según reporte del Diario de Hoy, de El Salvador., tal como se observa en la fotografía del medio de comunicación.
Para el abogado César Calderón, Sanler tuvo motivos para retirarse y responsabilizó de su estado de salud al fiscal del MP porque hizo un señalamiento infundado, además cuestionó el papel del juez Miguel Ángel Gálvez, quién fijó la continuación de la audiencia para este miércoles a las nueve horas.
Con información de Winter Flores y Giovani Pérez.