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José Rubén Zamora escucha sentencia 10 meses después de su captura

Los jueces del Tribunal Octavo emiten sentencia contra José Rubén Zamora Marroquín este miércoles 14 de junio.

Luis Gonzalez
14 de junio, 2023

El viernes 29 de julio de 2022 cuando José Rubén Zamora Marroquín fue capturado, se encontraba en una reunión familiar. Estaba inquieto porque un día antes tuvo un inconveniente para cobrar un cheque por Q265 mil.

Su "amigo" Ronald Giovanni García Navarijo recibió Q300 mil en efectivo que le envió con los empleados de elPeriódico, pero el cheque que el exbanquero le entregó no lo pudo cambiar. La cuenta estaba inactiva y aunque Zamora le habló, García ofreció resolver el inconveniente, ya no hubo tiempo.

El mensajero de elPeriódico, Jorge Gonzalo Barrios Sánchez, todavía fue a la oficina de García por un nuevo cheque, pero ya no fue atendido. En la tarde de ese viernes el Ministerio Público inició un operativo en las oficinas del medio de comunicación y en la vivienda de Zamora, quien fue detenido, junto con Flora Silva, en ese entonces gerente financiero de elPeriódico.

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Ronald García Navarijo y Zamora

Ronald García Navarijo laboró durante 25 años en el Banco de Los Trabajadores (Bantrab). Cuando dejó la institución era gerente general. Inició en las actividades más elementales del banco y aparte del amplio conocimiento financiero que adquirió durante más de dos décadas, se relacionó con la clase política y otros dirigentes con notable participación en la vida de Guatemala.

Con Zamora mantenían una relación de amistad y como "fuente" de información, según el testimonio del presidente de elPeriódico. Empezaron a relacionarse a partir de una publicación que ese medio de comunicación realizó y que causó problemas al banco.

Se conocieron por medio de otro director de la entidad bancaria, Eduardo José Liu Yon, quien tocó las puertas de Zamora para aclarar el artículo. A partir del inconveniente llegaron a un "acuerdo".

Zamora se comprometió a no publicar más noticias negativas del Bantrab y los directivos acordaron una pauta anual, de acuerdo con los testimonios, bajo juramento, brindados por García y por Sergio Hernández, expresidente de la institución bancaria.

En julio de 2022 Zamora tenía problemas para pagar el Bono 14 (el equivalente a un mes de salario) a los trabajadores de su empresa. Según la ley, esa prestación debe cancelarse a más tardar el 15 de julio y por ello le urgía contar con Q300 mil. 

En esas preocupaciones se encontraba Zamora a finales de julio. Por fin obtuvo el dinero, fueron Q300 mil en efectivo que llegaron a sus manos desde una fuente que durante el juicio no quedó comprobada.

¿Quién le dio los Q300 mil?

En la audiencia de primera declaración Zamora dijo que el dinero se lo habían dado empresarios, pero que no podía revelar sus nombres sin su consentimiento. Más adelante dio otra versión. Que el dinero era producto de la venta de una pintura de su propiedad, la cual le había donado el reconocido pintor Elmar René Rojas.

Pero esta segunda versión no solo fue desechada sino que dio paso a otro proceso penal contra sus terceros abogados, Juan Francisco Solórzano Foppa y Justino Brito, así como contra tres personas particulares, entre ellas su primo Juan Carlos Marroquín Godoy. Fueron acusados de falsificar documentos para intentar legalizar el origen del dinero mediante la supuesta compra-venta de la pintura.

Alejandro Girón Lainfiesta y Orlando Alejandro Álvarez Zamora (los supuestos compradores de la pintura), así como Marroquín Godoy, aceptaron su culpa y mediante procedimiento abreviado fueron condenados por el delito de obstaculización a la acción penal. Los abogados Solórzano Foppa y Brito fueron ligados a proceso y también aceptaron que cometieron los delitos de obstaculización a la acción penal y patrocinio infiel.

Ayuda para "bancarizar" los Q300 mil

Ya con los Q300 mil en sus manos para aliviar la deuda con los empleados de elPeriódico, Zamora, un ingeniero industrial con una maestría en administración de empresas y especialización en Banca y Finanzas del INCAE, llamó a su "amigo" García para pedirle de favor que "bancarizara" el dinero.

García aceptó apoyar a Zamora y el trato fue el siguiente. Zamora le enviaría en efectivo Q300 mil y García, utilizando empresas bajo su gestión en la parte contable, le entregaría un cheque por Q265 mil. La operación comercial que documentarían sería que los Q265 mil parecieran producto de la compra de espacio publicitario en elPeriódico.

¿Por que Zamora aceptó recibir Q265 mil, es decir Q35 mil menos de lo entregado a García? Porque la empresa que supuestamente compraba la publicidad debía descontar los impuestos de ley y el llamado timbre de prensa. Ambos estuvieron de acuerdo con la operación y el monto pactado. Pero García vio que en esta operación financiera podría darse el delito de lavado de dinero y pensó qué hacer.

García alertó al Ministerio Público de lo que podría ocurrir y la Fiscalía tomó algunas acciones para verificar la denuncia presentada por e exbanquero. Fueron movilizados agentes para verificar el envío del dinero a una oficina del edificio Centro Empresarial de la zona 10 de la capital de Guatemala y se le dio seguimiento al mensajero que, tras entregar los Q300 mil en efectivo, se fue directo al banco para intentar cobrar el cheque.

García no metió las manos en la operación para recibir el dinero. Le habló a otra persona que se identificó como "señor Polanco", quien atendió a González Barrios y al piloto de Zamora, Roberto Vicente Sandoval.

García, quien aparentemente graba toda sus conversaciones, grabó la entrega del dinero y las pláticas con Zamora. Todo esto lo entregó a la Fiscalía que corroboró los hechos, preparó el expediente y pidió la órdenes de captura. 

Zamora fue detenido y su nombre resonó fuera de Guatemala. La Prensa internacional destacó la detención de un "reconocido periodista" que de manera constante critica a los gobiernos de turno. Sus amigos periodistas vieron en la acción un ataque contra la libre emisión de pensamiento y sus enemigos celebraron la captura de una persona que se "hacía pasar por periodista" y "extorsionaba" para mantener una vida con privilegios.

Sin abogados desde la primera audiencia

Sin duda la mayor deficiencia de José Rubén Zamora Marroquín en este proceso acusado de lavado de dinero, tráfico de influencias y chantaje, fue su defensa jurídica. Sus primeros dos abogados, Mario Castañeda y Romeo Montoya fueron condenados en proceso abreviado por conspiración para la obstrucción de la justicia.

Quien quedó en lugar, el abogado originario de Costa Rica, Cristian Ulate, renunció a la defensa porque, supuestamente, había adquirido compromisos con otro cliente con anticipación, y con esa condición aceptó ser el abogado de Zamora de manera temporal.

Enseguida tomaron la defensa los abogados Solórzano Foppa y Brito, pero fueron acusados por los delitos de obstrucción a la acción penal y patrocinio infiel. Mientras los defensores iban desfilando, el proceso avanzó y ya, en el juicio, se presentaron los abogados Patricia Guillermo de Chea y Ricardo Sergio Sheiner, como los nuevos abogados.

Sheiner renunció por motivos de salud y Guillermo fue separada por el propio Zamora que pidió apoyo de la Defensa Pública Penal porque ya no tenía dinero para pagar los defensores contratados por su familia. 

El Instituto de la Defensa Pública Penal nombró al abogado Joel Iván Reyes Guzmán para tomar el caso en la recta final. El defensor tuvo que ponerse al día del proceso sobre la marcha. El miércoles 31 de mayo fue el último que habló en la fase de conclusiones. Con su participación terminó el debate y solo queda escuchar la sentencia el 14 de junio.

Zamora no duda que será condenado y su esperanza está puesta en las instancias internacionales para lograr su absolución. El Ministerio Público pidió las penas máximas, 40 años de cárcel, además del pago de Q300 mil. La petición fue cuestionado por quienes la consideran desproporcionada y avivó un nuevo debate en redes sociales.

Pero ya todo fue escuchado y visto. Durante esta semana los jueces del Tribunal Octavo, Otto Valverde, Graciela Ordóñez y la presidenta, Oly González, debatirán y determinarán la inocencia o culpabilidad de José Rubén Zamora Marroquín, el "militante contra la corrupción y la impunidad" que terminó en la cárcel, con elPeriódico cerrado (que fundó en 1996) y entregado a la justicia por su "amigo" Ronald García Navarijo.

 

José Rubén Zamora escucha sentencia 10 meses después de su captura

Los jueces del Tribunal Octavo emiten sentencia contra José Rubén Zamora Marroquín este miércoles 14 de junio.

Luis Gonzalez
14 de junio, 2023

El viernes 29 de julio de 2022 cuando José Rubén Zamora Marroquín fue capturado, se encontraba en una reunión familiar. Estaba inquieto porque un día antes tuvo un inconveniente para cobrar un cheque por Q265 mil.

Su "amigo" Ronald Giovanni García Navarijo recibió Q300 mil en efectivo que le envió con los empleados de elPeriódico, pero el cheque que el exbanquero le entregó no lo pudo cambiar. La cuenta estaba inactiva y aunque Zamora le habló, García ofreció resolver el inconveniente, ya no hubo tiempo.

El mensajero de elPeriódico, Jorge Gonzalo Barrios Sánchez, todavía fue a la oficina de García por un nuevo cheque, pero ya no fue atendido. En la tarde de ese viernes el Ministerio Público inició un operativo en las oficinas del medio de comunicación y en la vivienda de Zamora, quien fue detenido, junto con Flora Silva, en ese entonces gerente financiero de elPeriódico.

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Ronald García Navarijo y Zamora

Ronald García Navarijo laboró durante 25 años en el Banco de Los Trabajadores (Bantrab). Cuando dejó la institución era gerente general. Inició en las actividades más elementales del banco y aparte del amplio conocimiento financiero que adquirió durante más de dos décadas, se relacionó con la clase política y otros dirigentes con notable participación en la vida de Guatemala.

Con Zamora mantenían una relación de amistad y como "fuente" de información, según el testimonio del presidente de elPeriódico. Empezaron a relacionarse a partir de una publicación que ese medio de comunicación realizó y que causó problemas al banco.

Se conocieron por medio de otro director de la entidad bancaria, Eduardo José Liu Yon, quien tocó las puertas de Zamora para aclarar el artículo. A partir del inconveniente llegaron a un "acuerdo".

Zamora se comprometió a no publicar más noticias negativas del Bantrab y los directivos acordaron una pauta anual, de acuerdo con los testimonios, bajo juramento, brindados por García y por Sergio Hernández, expresidente de la institución bancaria.

En julio de 2022 Zamora tenía problemas para pagar el Bono 14 (el equivalente a un mes de salario) a los trabajadores de su empresa. Según la ley, esa prestación debe cancelarse a más tardar el 15 de julio y por ello le urgía contar con Q300 mil. 

En esas preocupaciones se encontraba Zamora a finales de julio. Por fin obtuvo el dinero, fueron Q300 mil en efectivo que llegaron a sus manos desde una fuente que durante el juicio no quedó comprobada.

¿Quién le dio los Q300 mil?

En la audiencia de primera declaración Zamora dijo que el dinero se lo habían dado empresarios, pero que no podía revelar sus nombres sin su consentimiento. Más adelante dio otra versión. Que el dinero era producto de la venta de una pintura de su propiedad, la cual le había donado el reconocido pintor Elmar René Rojas.

Pero esta segunda versión no solo fue desechada sino que dio paso a otro proceso penal contra sus terceros abogados, Juan Francisco Solórzano Foppa y Justino Brito, así como contra tres personas particulares, entre ellas su primo Juan Carlos Marroquín Godoy. Fueron acusados de falsificar documentos para intentar legalizar el origen del dinero mediante la supuesta compra-venta de la pintura.

Alejandro Girón Lainfiesta y Orlando Alejandro Álvarez Zamora (los supuestos compradores de la pintura), así como Marroquín Godoy, aceptaron su culpa y mediante procedimiento abreviado fueron condenados por el delito de obstaculización a la acción penal. Los abogados Solórzano Foppa y Brito fueron ligados a proceso y también aceptaron que cometieron los delitos de obstaculización a la acción penal y patrocinio infiel.

Ayuda para "bancarizar" los Q300 mil

Ya con los Q300 mil en sus manos para aliviar la deuda con los empleados de elPeriódico, Zamora, un ingeniero industrial con una maestría en administración de empresas y especialización en Banca y Finanzas del INCAE, llamó a su "amigo" García para pedirle de favor que "bancarizara" el dinero.

García aceptó apoyar a Zamora y el trato fue el siguiente. Zamora le enviaría en efectivo Q300 mil y García, utilizando empresas bajo su gestión en la parte contable, le entregaría un cheque por Q265 mil. La operación comercial que documentarían sería que los Q265 mil parecieran producto de la compra de espacio publicitario en elPeriódico.

¿Por que Zamora aceptó recibir Q265 mil, es decir Q35 mil menos de lo entregado a García? Porque la empresa que supuestamente compraba la publicidad debía descontar los impuestos de ley y el llamado timbre de prensa. Ambos estuvieron de acuerdo con la operación y el monto pactado. Pero García vio que en esta operación financiera podría darse el delito de lavado de dinero y pensó qué hacer.

García alertó al Ministerio Público de lo que podría ocurrir y la Fiscalía tomó algunas acciones para verificar la denuncia presentada por e exbanquero. Fueron movilizados agentes para verificar el envío del dinero a una oficina del edificio Centro Empresarial de la zona 10 de la capital de Guatemala y se le dio seguimiento al mensajero que, tras entregar los Q300 mil en efectivo, se fue directo al banco para intentar cobrar el cheque.

García no metió las manos en la operación para recibir el dinero. Le habló a otra persona que se identificó como "señor Polanco", quien atendió a González Barrios y al piloto de Zamora, Roberto Vicente Sandoval.

García, quien aparentemente graba toda sus conversaciones, grabó la entrega del dinero y las pláticas con Zamora. Todo esto lo entregó a la Fiscalía que corroboró los hechos, preparó el expediente y pidió la órdenes de captura. 

Zamora fue detenido y su nombre resonó fuera de Guatemala. La Prensa internacional destacó la detención de un "reconocido periodista" que de manera constante critica a los gobiernos de turno. Sus amigos periodistas vieron en la acción un ataque contra la libre emisión de pensamiento y sus enemigos celebraron la captura de una persona que se "hacía pasar por periodista" y "extorsionaba" para mantener una vida con privilegios.

Sin abogados desde la primera audiencia

Sin duda la mayor deficiencia de José Rubén Zamora Marroquín en este proceso acusado de lavado de dinero, tráfico de influencias y chantaje, fue su defensa jurídica. Sus primeros dos abogados, Mario Castañeda y Romeo Montoya fueron condenados en proceso abreviado por conspiración para la obstrucción de la justicia.

Quien quedó en lugar, el abogado originario de Costa Rica, Cristian Ulate, renunció a la defensa porque, supuestamente, había adquirido compromisos con otro cliente con anticipación, y con esa condición aceptó ser el abogado de Zamora de manera temporal.

Enseguida tomaron la defensa los abogados Solórzano Foppa y Brito, pero fueron acusados por los delitos de obstrucción a la acción penal y patrocinio infiel. Mientras los defensores iban desfilando, el proceso avanzó y ya, en el juicio, se presentaron los abogados Patricia Guillermo de Chea y Ricardo Sergio Sheiner, como los nuevos abogados.

Sheiner renunció por motivos de salud y Guillermo fue separada por el propio Zamora que pidió apoyo de la Defensa Pública Penal porque ya no tenía dinero para pagar los defensores contratados por su familia. 

El Instituto de la Defensa Pública Penal nombró al abogado Joel Iván Reyes Guzmán para tomar el caso en la recta final. El defensor tuvo que ponerse al día del proceso sobre la marcha. El miércoles 31 de mayo fue el último que habló en la fase de conclusiones. Con su participación terminó el debate y solo queda escuchar la sentencia el 14 de junio.

Zamora no duda que será condenado y su esperanza está puesta en las instancias internacionales para lograr su absolución. El Ministerio Público pidió las penas máximas, 40 años de cárcel, además del pago de Q300 mil. La petición fue cuestionado por quienes la consideran desproporcionada y avivó un nuevo debate en redes sociales.

Pero ya todo fue escuchado y visto. Durante esta semana los jueces del Tribunal Octavo, Otto Valverde, Graciela Ordóñez y la presidenta, Oly González, debatirán y determinarán la inocencia o culpabilidad de José Rubén Zamora Marroquín, el "militante contra la corrupción y la impunidad" que terminó en la cárcel, con elPeriódico cerrado (que fundó en 1996) y entregado a la justicia por su "amigo" Ronald García Navarijo.