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Estimado Lector:

Esto es vital porque quien pida libertad deben querer cumplir a cabalidad la responsabilidad aparejada. Se que sueno un poco repetitivo pero no me canso de decir que libertad y responsabilidad existen en perpetua unión.

Libertad
Enrique Búcaro Batres |
07 de diciembre, 2022

Un grito común en todos los pueblos de nuestra época es el grito que clama “¡Libertad, libertad!”. Sin duda ello es algo deseado, pero ¿qué es la libertad?

La libertad ciertamente no es hacer lo que se quiere como se quiere y cuando se quiere, pues sería estúpido afirmar que matar al vecino porque es un tipo desagradable es libertad. También sería estúpido afirmar que ir a la velocidad que se quiera en cualquier calle es ejercicio de la libertad. Hacer lo que se quiere cuando se quiere y de la forma en que se quiere, sin más consideración que el deseo de la propia voluntad, es un desorden de la capacidad de actuar y no un ejercicio de la libertad. Hacer lo que se quiere sin mesura es sencillamente un libertinaje.  

Entonces ¿qué podemos decir que es la libertad? la libertad es la capacidad de autodeterminarnos al bien, cuyo límite es el derecho de los demás. Ella está íntimamente ligada a la responsabilidad, pues de cada acción subyacen ciertas y determinadas responsabilidades. Decir desear la libertad es necesariamente decir desear el cumplir de la responsabilidad que conlleva. Estudiar un idioma, aprender a conducir, aceptar un trabajo, casarse, son todas expresiones de libertad pero todas conllevan determinadas responsabilidades. Esto es vital porque quien pida libertad deben querer cumplir a cabalidad la responsabilidad aparejada. Se que sueno un poco repetitivo pero no me canso de decir que libertad y responsabilidad existen en perpetua unión.

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Aquel que quiere libertad para emprender debe desear cumplir su responsabilidad como empresario, hacia él, hacia sus clientes, hacia sus empleados, hacia sus inversionistas, etc. Aquel que quiere conducir debe desear cumplir las leyes de tránsito, gusten o no gusten. Aquel que quiere la libertad de los países como los Estados Unidos de América, como Noruega, como Suecia, como Gran Bretaña, debe querer cumplir sus deberes de saber, de involucrarse, de ser ciudadano activo y trabajar para el mejoramiento de todos los pobres, los ricos, la clase media, de todos porque todos forman parte de la sociedad en la cual se quiere vivir en libertad.

La libertad más general es la de vivir tomando cada acción y cada decisión por uno mismo, lo cual puede ser complejo y bastante abrumados, pero, no se aflija estimado Lector, pues en la moral, la ética, la costumbre y la ley debemos todos encontrar guías para conducirnos con responsabilidad y en libertad, por ello, en principio, debemos conservar nuestros valores, nuestra moral, nuestras costumbres, nuestras leyes y detestar aquello que con la apariencia de guía hacia el bien quiere apresarnos en la voluntad de los perversos o en el desorden de la maldad.

Toda norma, ley, costumbre y moral tiene su forma de mejorar, puede errar o quedar desfasada, por ello debemos considerar mejorar siempre y no cerrarnos al cumplimiento ciego e irracional de la ley, de la costumbre o de la moral.

Siempre debemos buscar determinarnos al bien, respetando el derecho ajeno, cumpliendo nuestras responsabilidades, siempre debemos buscar vivir en libertad.

Estimado Lector:

Esto es vital porque quien pida libertad deben querer cumplir a cabalidad la responsabilidad aparejada. Se que sueno un poco repetitivo pero no me canso de decir que libertad y responsabilidad existen en perpetua unión.

Enrique Búcaro Batres |
07 de diciembre, 2022
Libertad

Un grito común en todos los pueblos de nuestra época es el grito que clama “¡Libertad, libertad!”. Sin duda ello es algo deseado, pero ¿qué es la libertad?

La libertad ciertamente no es hacer lo que se quiere como se quiere y cuando se quiere, pues sería estúpido afirmar que matar al vecino porque es un tipo desagradable es libertad. También sería estúpido afirmar que ir a la velocidad que se quiera en cualquier calle es ejercicio de la libertad. Hacer lo que se quiere cuando se quiere y de la forma en que se quiere, sin más consideración que el deseo de la propia voluntad, es un desorden de la capacidad de actuar y no un ejercicio de la libertad. Hacer lo que se quiere sin mesura es sencillamente un libertinaje.  

Entonces ¿qué podemos decir que es la libertad? la libertad es la capacidad de autodeterminarnos al bien, cuyo límite es el derecho de los demás. Ella está íntimamente ligada a la responsabilidad, pues de cada acción subyacen ciertas y determinadas responsabilidades. Decir desear la libertad es necesariamente decir desear el cumplir de la responsabilidad que conlleva. Estudiar un idioma, aprender a conducir, aceptar un trabajo, casarse, son todas expresiones de libertad pero todas conllevan determinadas responsabilidades. Esto es vital porque quien pida libertad deben querer cumplir a cabalidad la responsabilidad aparejada. Se que sueno un poco repetitivo pero no me canso de decir que libertad y responsabilidad existen en perpetua unión.

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La libertad más general es la de vivir tomando cada acción y cada decisión por uno mismo, lo cual puede ser complejo y bastante abrumados, pero, no se aflija estimado Lector, pues en la moral, la ética, la costumbre y la ley debemos todos encontrar guías para conducirnos con responsabilidad y en libertad, por ello, en principio, debemos conservar nuestros valores, nuestra moral, nuestras costumbres, nuestras leyes y detestar aquello que con la apariencia de guía hacia el bien quiere apresarnos en la voluntad de los perversos o en el desorden de la maldad.

Toda norma, ley, costumbre y moral tiene su forma de mejorar, puede errar o quedar desfasada, por ello debemos considerar mejorar siempre y no cerrarnos al cumplimiento ciego e irracional de la ley, de la costumbre o de la moral.

Siempre debemos buscar determinarnos al bien, respetando el derecho ajeno, cumpliendo nuestras responsabilidades, siempre debemos buscar vivir en libertad.