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Bernardo Arévalo y los indicios de un gobierno ideologizado

Ilustración por Gabo®
Rafael Párraga
13 de octubre, 2023

Antes de los bloqueos en Guatemala, Bernardo Arévalo y su equipo participaron en una reunión del Grupo de Puebla y se sumaron a la Internacional Progresista, generando preocupación sobre las expectativas de un gobierno ideologizado. 

Panorama general. Los días previos al inicio de los bloqueos de carreteras fueron una declaración de intenciones del partido Movimiento Semilla y el presidente electo, Bernardo Arévalo, sobre la tendencia ideológica de su gobierno. Mientras muchos le consideraban un moderado, sus alianzas a nivel internacional indican contradicciones en esta premisa.

  • La cumbre del Grupo de Puebla, celebrada del 29 de septiembre al 1 de octubre, contó con la presencia de Arévalo; la hizo parte de su primer viaje internacional, como presidente electo. No llegó a EE. UU., como estaba previsto.
     
  • Pocos días después, el 4 de octubre, se anunció la incorporación de Semilla a la Internacional Progresista, fundada en 2019 por el socialista estadounidense, Bernie Sanders.

Entre líneas (I). Mientras que el nombre Internacional “Progresista” aparenta una connotación moderada e incluso centrista, en sus principios fundacionales se encuentran postulados radicales, preocupantes de ver asociados con supuestos tecnócratas como Bernardo Arévalo. Entre ellos, destacan los siguientes:

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  • En su definición de “progreso”, la Internacional lo describe como “un mundo postcapitalista”, lo que se fortalece por el postulado séptimo, que establece que “el capitalismo es el virus”.
     
  • El mismo dicta: “Aspiramos a erradicar el capitalismo en todas partes. Creemos que la explotación, el despojo y la destrucción ambiental están inscritos en el código genético del capitalismo. No apoyamos esfuerzos para salvar este sistema ni permitimos su expansión a todos los rincones de la Tierra”.
     
  • De igual manera, conviven postulados que podrían ser indicios de políticas de repartición de tierras, como el duodécimo, que dicta: “Nuestra demanda es la reparación completa por los crímenes del pasado y la restauración inmediata de tierras, recursos y soberanía para todos los pueblos desposeídos del mundo”. 

Entre líneas (II). Igual de preocupante son algunas ideas antidemocráticas, como la insuficiencia de las elecciones y el rechazo al diálogo para conseguir sus objetivos, plasmadas en los postulados XVI, XVII y XX. 

  • “XVI. Revolución, no Cambio de Régimen: apoyamos los movimientos populares para transformar la sociedad y recuperar el control del Estado”.
     
  • “XVII. Ganar Elecciones no es Suficiente:  Nuestra misión es construir poder popular a escala planetaria. Las elecciones son oportunidades para transformar la política y convertir las demandas populares en políticas gubernamentales. Pero sabemos que ganar elecciones no es suficiente para cumplir nuestra misión”.
     
  • “XX. El Diálogo no es Suficiente: Nuestras actividades nos preparan para la movilización planetaria, igualando la magnitud de nuestras crisis con la magnitud de las acciones que emprendemos contra ellas”. 

En perspectiva. La membresía de Semilla en un colectivo con dichos principios implica su aceptación de los mismos. Adicionalmente, su presencia en el Grupo de Puebla también asocia al gobierno de Arévalo con un grupo de presidentes y expresidentes de izquierdas, entre ellos convictos y prófugos de la justicia. 

  • Entre sus miembros fundadores, condenados por la justicia, se encuentran: Lula Da Silva y Dilma Rousseff, de Brasil; Evo Morales, de Bolivia; Manuel Zelaya, de Honduras, y Rafael Correa, de Ecuador. 
     
  • Adicionalmente, también están el ex candidato presidencial y exguerrillero salvadoreño, Hugo Martínez; el ampliamente cuestionado presidente argentino, Alberto Fernandez, y la controversial ministra de Igualdad española, Irene Montero.
     
  • El Grupo de Puebla es el heredero del anterior Foro de Sao Paulo, cumbre del socialismo del siglo XXI y refugio de algunos de los gobiernos más corruptos y autoritarios de la izquierda latinoamericana.

Por qué importa. Bernardo Arévalo logró atraer gran parte del voto urbano de centro-derecha en Guatemala, bajo la máxima de ser un candidato moderado y sensato, que prima la modernización del Estado y la defensa de la democracia por encima de la ideología. Sin embargo, sus alianzas a nivel internacional contradicen dicha premisa.

  • Su asociación con estas organizaciones es un indicio de un gobierno que puede privilegiar la agenda de la izquierda internacional, por encima del bienestar nacional, de acuerdo con los postulados de la Internacional Progresista. 
     
  • De igual manera, existen contradicciones fundamentales entre su acercamiento con el sector privado y su incorporación a una organización cuyo penúltimo principio se titula “De Cada Cual, a Cada Cual”, haciendo referencia a la frase de Karl Marx en su Crítica del Programa de Gotha.
     
  • Finalmente, preocupan especialmente las alianzas de un político cuya bandera electoral fue el combate a la corrupción, con algunos de los políticos más corruptos de América Latina, como lo son los integrantes del Grupo de Puebla.
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Bernardo Arévalo y los indicios de un gobierno ideologizado

Ilustración por Gabo®
Rafael Párraga
13 de octubre, 2023

Antes de los bloqueos en Guatemala, Bernardo Arévalo y su equipo participaron en una reunión del Grupo de Puebla y se sumaron a la Internacional Progresista, generando preocupación sobre las expectativas de un gobierno ideologizado. 

Panorama general. Los días previos al inicio de los bloqueos de carreteras fueron una declaración de intenciones del partido Movimiento Semilla y el presidente electo, Bernardo Arévalo, sobre la tendencia ideológica de su gobierno. Mientras muchos le consideraban un moderado, sus alianzas a nivel internacional indican contradicciones en esta premisa.

  • La cumbre del Grupo de Puebla, celebrada del 29 de septiembre al 1 de octubre, contó con la presencia de Arévalo; la hizo parte de su primer viaje internacional, como presidente electo. No llegó a EE. UU., como estaba previsto.
     
  • Pocos días después, el 4 de octubre, se anunció la incorporación de Semilla a la Internacional Progresista, fundada en 2019 por el socialista estadounidense, Bernie Sanders.

Entre líneas (I). Mientras que el nombre Internacional “Progresista” aparenta una connotación moderada e incluso centrista, en sus principios fundacionales se encuentran postulados radicales, preocupantes de ver asociados con supuestos tecnócratas como Bernardo Arévalo. Entre ellos, destacan los siguientes:

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  • En su definición de “progreso”, la Internacional lo describe como “un mundo postcapitalista”, lo que se fortalece por el postulado séptimo, que establece que “el capitalismo es el virus”.
     
  • El mismo dicta: “Aspiramos a erradicar el capitalismo en todas partes. Creemos que la explotación, el despojo y la destrucción ambiental están inscritos en el código genético del capitalismo. No apoyamos esfuerzos para salvar este sistema ni permitimos su expansión a todos los rincones de la Tierra”.
     
  • De igual manera, conviven postulados que podrían ser indicios de políticas de repartición de tierras, como el duodécimo, que dicta: “Nuestra demanda es la reparación completa por los crímenes del pasado y la restauración inmediata de tierras, recursos y soberanía para todos los pueblos desposeídos del mundo”. 

Entre líneas (II). Igual de preocupante son algunas ideas antidemocráticas, como la insuficiencia de las elecciones y el rechazo al diálogo para conseguir sus objetivos, plasmadas en los postulados XVI, XVII y XX. 

  • “XVI. Revolución, no Cambio de Régimen: apoyamos los movimientos populares para transformar la sociedad y recuperar el control del Estado”.
     
  • “XVII. Ganar Elecciones no es Suficiente:  Nuestra misión es construir poder popular a escala planetaria. Las elecciones son oportunidades para transformar la política y convertir las demandas populares en políticas gubernamentales. Pero sabemos que ganar elecciones no es suficiente para cumplir nuestra misión”.
     
  • “XX. El Diálogo no es Suficiente: Nuestras actividades nos preparan para la movilización planetaria, igualando la magnitud de nuestras crisis con la magnitud de las acciones que emprendemos contra ellas”. 

En perspectiva. La membresía de Semilla en un colectivo con dichos principios implica su aceptación de los mismos. Adicionalmente, su presencia en el Grupo de Puebla también asocia al gobierno de Arévalo con un grupo de presidentes y expresidentes de izquierdas, entre ellos convictos y prófugos de la justicia. 

  • Entre sus miembros fundadores, condenados por la justicia, se encuentran: Lula Da Silva y Dilma Rousseff, de Brasil; Evo Morales, de Bolivia; Manuel Zelaya, de Honduras, y Rafael Correa, de Ecuador. 
     
  • Adicionalmente, también están el ex candidato presidencial y exguerrillero salvadoreño, Hugo Martínez; el ampliamente cuestionado presidente argentino, Alberto Fernandez, y la controversial ministra de Igualdad española, Irene Montero.
     
  • El Grupo de Puebla es el heredero del anterior Foro de Sao Paulo, cumbre del socialismo del siglo XXI y refugio de algunos de los gobiernos más corruptos y autoritarios de la izquierda latinoamericana.

Por qué importa. Bernardo Arévalo logró atraer gran parte del voto urbano de centro-derecha en Guatemala, bajo la máxima de ser un candidato moderado y sensato, que prima la modernización del Estado y la defensa de la democracia por encima de la ideología. Sin embargo, sus alianzas a nivel internacional contradicen dicha premisa.

  • Su asociación con estas organizaciones es un indicio de un gobierno que puede privilegiar la agenda de la izquierda internacional, por encima del bienestar nacional, de acuerdo con los postulados de la Internacional Progresista. 
     
  • De igual manera, existen contradicciones fundamentales entre su acercamiento con el sector privado y su incorporación a una organización cuyo penúltimo principio se titula “De Cada Cual, a Cada Cual”, haciendo referencia a la frase de Karl Marx en su Crítica del Programa de Gotha.
     
  • Finalmente, preocupan especialmente las alianzas de un político cuya bandera electoral fue el combate a la corrupción, con algunos de los políticos más corruptos de América Latina, como lo son los integrantes del Grupo de Puebla.