Navidad 2022: cómo se reza la Corona de Adviento
El Adviento es el tiempo de preparación de los cristianos para la Navidad y por lo tanto un tiempo para compartir en familia y con amigos.
En Guatemala y en el mundo es una tradición que las familias y amigos creyentes en el nacimiento del hijo de Dios se reúnan a rezar la Corona de Adviento. La corona es un elemento muy característico de la temporada y es elaborada con ramas de abeto y decorada con 4 velas que simbolizan la vida eterna y la esperanza, recordando que Jesús vino al mundo para salvarnos del pecado.
Cómo se reza la Corona de Adviento 2022
Primer Domingo de Adviento 27 de noviembre: "Una reflexión por la familia"
- Para comenzar: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
- Se apagan las luces y se lee el texto de San Juan 3, 7-11: Amémonos unos a otros, ya que el amor es de Dios. Y todo el que ama ha nacido de Dios y conoce a Dios. En esto se manifestó el amor que Dios nos tiene: en que Dios envió a su Hijo único. A Dios nadie lo ha visto nunca, pero si nos amamos los unos a los otros, Dios permanece en nosotros. Esta es palabra de Dios.
- Se reponde: Te alabamos Señor.
- Oración: Que esta corona nos ayude a preparar los corazones de cada uno de los que formamos la familia para tu llegada el día de Navidad.
- Se enciende la primera vela: Encender la primera vela recordando qué significa penitencia, conversión de corazón.
- Dinámica para reflexionar: Hacer la siguiente pregunta ¿Cómo hemos amado este año en nuestra familia? El que desee responder en alto, lo puede hacer.
- Propósitos: Después de la reflexión anterior, cada miembro de la familia dirá cuáles serán sus propósitos para mejorar. Luego hará un compromiso para cumplirlos durante la semana.
- Oración: Dios Padre, gracias por darnos una familia. Te pedimos que, en nuestra familia podamos demostrarnos el amor que nos tenemos. Amen.
- Para terminar: Todos los miembros de la familia se toman de la mano y rezan juntos el “Padre nuestro”. Se encienden las luces y se canta una canción.
Segundo domingo de Adviento 4 de diciembre: "La importancia del servicio a la familia"
- Para empezar: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
- Se enciende la vela del domingo anterior, se apagan las luces y se lee el Evangelio de san Marcos 10, 43.45: No ha de ser así entre vosotros; antes, si alguno de vosotros quiere ser grande, sea vuestro servidor; y el que de vosotros quiera ser el primero, sea siervo de todos, pues tampoco el Hijo del hombre ha venido a ser servido, sino a servir y a dar su vida en rescate por muchos. Esta es palabra de Dios.
- Se responde: Te alabamos, Señor.
- Se enciende la segunda vela: Se enciende la segunda vela de Adviento y se hace una reflexión con el fin de conocetarnos con la importancia que tiene el amor y la unión familiar.
- Dinámica para reflexionar: Guardar unos minutos en silencio. Luego debes hacer la siguiente pregunta: En nuestro hogar ¿cómo nos ayudamos unos a otros diariamente?
- Propósitos: Después de la reflexión anterior, cada quien dirá cual será su propósito a cumplir en la semana.
- Para orar: Padre, que nos has dado una familia en la que todos nos ayudamos y somos felices, te pedimos bendecir nuestros trabajos. También, nuestras tareas de todos los días para que cumplamos con más ganas y alegría la tarea que nos toca hacer.
- Para terminar: Todos los miembros de la familia se toman de las manos y rezan juntos un padrenuestro. Se encienden las luces y se canta una canción.
Tercer domingo de Adviento 11 de diciembre: "Cómo podemos mejorar como familia"
- Para empezar: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
- Se encienden las dos velas de los domingos anteriores, se apagan las luces y se lee la lectura del Evangelio según San Mateo 5, 13-16: Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvirtúa, ¿con qué se la salará? Para nada aprovecha ya, sino para tirarla y que la pisen los hombres. Vosotros sois la luz del mundo. No puede ocultarse una ciudad asentada sobre un monte, ni se enciende una lámpara y se la pone bajo el celemín, sino sobre el candelero, para que alumbre a cuantos hay en la casa. así ha de lucir vuestra luz ante los hombres, para que, viendo nuestras buenas obras, glorifiquen a vuestro Padre, que está en los cielos. Esta es palabra de Dios.
- Se responde: Te alabamos, Señor.
- Se enciende la tercera vela: Se enciende la tercera vela de Adviento.
- Para reflexionar: Después de la lectura anterior, se guardan unos minutos en silencio. Luego se hace la siguiente pregunta: ¿qué hago yo para que mi familia sea mejor?
- Propósitos: Cada miembro de la familia puede decir cuál es su propósito durante la semana y se comprometerá a cumplirlo.
- Para orar: Padre, en nuestra familia crecemos y aprendemos a ser mejores. Te pedimos hoy que nos ayudes a ser una familia cristiana y ser un buen ejemplo para los que nos rodean. Te pedimos fuerzas para mejorar o cambiar lo que sea necesario de nosotros para que nuestra familia sea mejor cada día. Amén.
- Para terminar: Todos los miembros de la familia se toman de la mano y rezan juntos el Padre nuestro. Se encienden las luces y se canta una canción.
Cuarto domingo de Adviento: La presencia de Dios
- Para empezar: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
- Se encienden las tres velas de los domingos anteriores y se lee la lectura del Evangelio según San Mateo 7, 24-25: Aquel, pues, que escucha mis palabras y las pone por obra, será el varón prudente, que edifica su casa sobre roca. Cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos y dieron sobre la casa; pero no cayó, porque estaba fundada sobre roca. Esta es palabra de Dios.
- Se responde: Te alabamos, Señor.
- Se enciende la cuarta vela: Mientras se enciende la última vela del Adviento se hace una reflexión sobre el nacimniento del Niño Jesús.
- Para reflexionar: Guardar unos minutos en silencio. Luego hacer la siguiente pregunta: ¿De qué manera se ha manifestado la presencia de Dios en nuestra familia durante el año?
- Propósitos: Después de la lectura anterior, cada uno de los miembros de la familia, dirá cuál es su propósito para la semana.
- Para orar: Padre, que nos has dado una familia en la cuál te hemos conocido y amado, ayúdanos a vivir teniéndote siempre presente. Te pedimos que en esta Navidad nos regales el quedarte con nosotros en nuestros corazones. Amén.
- Para terminar: Todos los miembros de la familia se toman de las manos para rezar juntos un Padrenuestro. Se encienden las luces y se canta una canción.