Vecinos y autoridades de El Estor, Izabal, pidieron a los magistrados de la Corte de Constitucionalidad (CC), reconsiderar su decisión y permitir que la minera siga operando.
Los comunitarios representantes de diversos sectores de ese municipio y el alcalde de El Estor, Rony Méndez, advirtieron que la resolución de la Corte les preocupa porque cerraría la fuente de empleo más grande del área.
La Compañía Guatemalteca Níquel (CGN), genera dos mil empleos directos y mil indirectos, además apoya varios proyectos de infraestructura, salud, educación y salubridad.
Daño a 900 familias
“Nos preocupa la decisión de la Corte de Constitucionalidad, que amparó a un grupo de vecinos que solo buscan entorpecer el desarrollo del municipio”, subraya el alcalde Rony Méndez.
La máxima autoridad local enfatiza que el El Estor cuenta con recursos propios que le permiten mantener su economía, pero esta decisión pone freno al desarrollo.
Apunta que aparte de generar empleo, la minera contribuye con los ingresos de la comuna pagando IUSI, boletos de ornato y regalías, así como otros aportes que ya están presupuestados.
Si la minera cierra, la Municipalidad se ve afectada con 50 empleos, pero el mayor impacto es con las 900 familias que se quedarán sin ingresos, afirma Rony Méndez, alcalde de El Estor.
“Pedimos a los magistrados no dejar en abandono a estas familias y al municipio que depende de un 50% de la actividad de la minera”, indica Méndez.
Piden mantener el trabajo
Rafael Artola Tot, en representación de los tres mil trabajadores de la minera, dice que están “preocupados y consternados” por la resolución de la CC.
“Qué pasará en el municipio si la minera cierra. Pedimos a las autoridades que nos apoyen, no deseamos que El Estor vuelva a tiempos pasados cuando no había trabajo”, enfatiza Artola.
“Después de que se fue la empresa Exmibal (que antes explotó la mina), el municipio quedó desolado y ahora tenemos trabajo con esta minera”, recordó.
Walter Montejo, quien es contratista, señala que cuando llegaron al El Estor solo había dos restaurantes, pero ahora funcionan en cada esquina y ello se debe a la inversión de la minera que promueve el comercio en el municipio.
“Son miles de niños y familias que serán afectados. Ahora son 100 pescadores, pero podría subir a mil porque de algo tienen que sobrevivir, pero quién les a comprar si no hay trabajo”, agrega Montejo.
Norma Morales, propietaria de un restaurante, indica que antes de la llegada de la minera, tenía dos empleadas, pero ahora cuenta con doce, en su mayoría madres solteras.
Jesús Cuc, de la Asociación Pesqueros de El Estor, comenta: “No hay empleo, pescamos y vendemos al cliente que trabaja en la empresa, pero si suspenden la minera es injusto, porque habrá mucha delincuencia, como sucedió antes”.
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La Compañía Guatemalteca Níquel (CGN), genera dos mil empleos directos y mil indirectos, además apoya varios proyectos de infraestructura, salud, educación y salubridad.
Daño a 900 familias
“Nos preocupa la decisión de la Corte de Constitucionalidad, que amparó a un grupo de vecinos que solo buscan entorpecer el desarrollo del municipio”, subraya el alcalde Rony Méndez.
La máxima autoridad local enfatiza que el El Estor cuenta con recursos propios que le permiten mantener su economía, pero esta decisión pone freno al desarrollo.
Apunta que aparte de generar empleo, la minera contribuye con los ingresos de la comuna pagando IUSI, boletos de ornato y regalías, así como otros aportes que ya están presupuestados.
Si la minera cierra, la Municipalidad se ve afectada con 50 empleos, pero el mayor impacto es con las 900 familias que se quedarán sin ingresos, afirma Rony Méndez, alcalde de El Estor.
“Pedimos a los magistrados no dejar en abandono a estas familias y al municipio que depende de un 50% de la actividad de la minera”, indica Méndez.
Piden mantener el trabajo
Rafael Artola Tot, en representación de los tres mil trabajadores de la minera, dice que están “preocupados y consternados” por la resolución de la CC.
“Qué pasará en el municipio si la minera cierra. Pedimos a las autoridades que nos apoyen, no deseamos que El Estor vuelva a tiempos pasados cuando no había trabajo”, enfatiza Artola.
“Después de que se fue la empresa Exmibal (que antes explotó la mina), el municipio quedó desolado y ahora tenemos trabajo con esta minera”, recordó.
Walter Montejo, quien es contratista, señala que cuando llegaron al El Estor solo había dos restaurantes, pero ahora funcionan en cada esquina y ello se debe a la inversión de la minera que promueve el comercio en el municipio.
“Son miles de niños y familias que serán afectados. Ahora son 100 pescadores, pero podría subir a mil porque de algo tienen que sobrevivir, pero quién les a comprar si no hay trabajo”, agrega Montejo.
Norma Morales, propietaria de un restaurante, indica que antes de la llegada de la minera, tenía dos empleadas, pero ahora cuenta con doce, en su mayoría madres solteras.
Jesús Cuc, de la Asociación Pesqueros de El Estor, comenta: “No hay empleo, pescamos y vendemos al cliente que trabaja en la empresa, pero si suspenden la minera es injusto, porque habrá mucha delincuencia, como sucedió antes”.
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